Capítulo 428
Hábitat (III)
Traducción y edición: Sho Hazama
Corrección: Lord
Corrección: Lord
Al igual que Perséfone, la esposa de Kane y Sally, la esposa de Li Gaolei, se quedaron atrás en la Cuidad Dragón, y habían perdido toda comunicación con ellas. Lo único que podían esperar ahora era que alguien tan importante como Bevulas no se rebajara a atacar a la gente común. Esto no era del todo imposible, ya que, según la doctrina estándar del Parlamento de Sangre, solo los Jinetes, los subordinados o los familiares tenían derechos humanos básicos. La gente común sin habilidades ni antecedentes no era diferente de los esclavos, hasta el punto de que eran incluso un poco inferiores. Este tipo de creencia se había arraigado profundamente en sus corazones durante las últimas décadas, convirtiéndose en parte del conocimiento general.
Donde había conocimiento general, también había puntos ciegos. Entre los que tenían habilidades y los que no, ya existía una diferencia que los convertía en especies completamente diferentes. Este tipo de conocimiento general, o quizás norma, es algo que se desarrollaría gradualmente a lo largo de toda una generación. Era porque había demasiados casos que demostraban que los descendientes de los usuarios de habilidades tenían muchas más posibilidades de tener talentos especiales. Por eso, a los ojos de los usuarios de habilidades de alto nivel, las mujeres comunes y corrientes se convertían simplemente en herramientas para descargar sus deseos, ni siquiera suficientes para servir como herramientas para tener hijos. Por eso Su esperaba que Bevulas no pensara en utilizar a estas personas para amenazarlo. Incluso si Bevulas decidiera hacerlo, no supondría ninguna amenaza. Su seguía sin querer que los que estaban a su lado sufrieran ningún daño, pero lo único que podía hacer en ese momento era eso.
Sin embargo, en ese momento había otro problema que preocupaba a Su, y era que a Kane ya no le quedaba mucha vida. Cuando hizo inspeccionar su cuerpo, Su descubrió que ya mostraba signos de envejecimiento. Los de la nueva era, con el fin de adaptarse a este mundo y continuar con su supervivencia, acortaron en gran medida su ciclo fisiológico, pero también aceleraron su metabolismo. El precio de tener cuerpos robustos, mayor fertilidad y mejor capacidad de recuperación era una esperanza de vida más corta. Pocas personas que luchaban por sobrevivir en la naturaleza vivían más de 60 años, y la mayoría moría alrededor de los 40, ya fuera por causas naturales o no naturales. Solo teniendo habilidades se podía alargar la vida.
A partir de la tasa de desintegración radiactiva de los órganos internos de Kane, Su dedujo que le quedaban menos de 2 años de vida. El talento innato de Kane no era tan sobresaliente como el de Li o Li Gaolei, y anteriormente incluso había utilizado cantidades excesivas de fórmulas de habilidades, y fue debido al daño permanente que esto causó a su secuencia genética que mostraría signos de envejecimiento en esta etapa tan robusta de la vida. Aumentar las habilidades, desde cierta perspectiva, era como prender fuego a un gran árbol. Cuanto más grande e intensa era la llama, más rápido se convertía el árbol en cenizas.
Su ya había iniciado la loca evolución de su propio cuerpo, y este proceso era irreversible. Su solo podía observar cómo las llamas ardían cada vez con más fuerza, hasta el día en que se viera a sí mismo reducido a cenizas. Algo que podía considerarse tanto bueno como malo era que Su no tenía claro cuán enorme era su propio “árbol”, pero, en ese momento, parecía ser un árbol bastante grueso y alto, por lo que aún debería poder quemarlo durante un tiempo. Sin embargo, si se hablaba del grosor del tronco de un árbol, el de Madeline era sin duda un árbol antiguo que llegaba al cielo.
Si quería aumentar la vitalidad de Kane, necesitaba medicamentos de reparación genética de muy alto nivel, por ejemplo, el medicamento que casi llevó a Perséfone a la bancarrota. Sin embargo, incluso si tuvieran dinero, con el nivel de biotecnología de la ciudad de Kelen, era poco probable que pudieran producir medicamentos de tan alto nivel. Incluso con la medicación para la reparación genética, también necesitaban a alguien que pudiera realizar una cirugía a nivel genético. Mientras tanto, alguien capaz de hacerlo, incluso dentro de todo el parlamento, era solo el propio Dr. Connor. Este método quirúrgico de prolongación de la vida también era extremadamente limitado, ya que normalmente no superaba los 10 años, y además provocaba un daño fijo al potencial de desarrollo de las capacidades de la persona. A menos que alguien estuviera cerca del final de su vida, nadie estaría dispuesto a someterse a este tipo de cirugía. Sin embargo, para aquellas figuras verdaderamente importantes, en un momento crítico, aunque solo fuera 1 año más de vida, seguía siendo bueno.
Kane no era una gran figura, y Su no tenía los recursos económicos ni los antecedentes necesarios para pedirle ayuda al Dr. Connor. Por eso, a menos que ocurriera algo inesperado, en 2 años Kane sería el primero de sus subordinados en abandonar su lado. Mientras observaba a Kane trabajar incansablemente día y noche, Su solo podía ocultar este secreto. Independientemente de quién fuera, llegaría el día en que morirían. Él mismo no era una excepción.
Su sabía que llegaría el día en que él también sería destruido, abandonando este mundo y dejando atrás a Madeline y Perséfone, a quienes quería proteger, así como a sus subordinados y a aquellos a quienes recordaba. Sin embargo, antes de que llegara ese día, aún tenía que hacer todo lo posible para que aquellos que estaban a su lado vivieran un poco mejor. Eso era todo lo que podía hacer. Su nunca se consideró a sí mismo como alguien con grandes ideales. Solo quería que su propia vida fuera un poco más sencilla.
Durante este periodo de tiempo, por alguna razón, Su descubrió que su mente estaba llena de pensamientos aleatorios. Quizás porque había pasado demasiado tiempo desde que había obtenido paz y descanso, pero ahora que había dejado atrás las batallas y las luchas que le dificultaban incluso respirar, no estaba acostumbrado a ello.
Sin embargo, estos 10 días de paz le permitieron volver a ordenar sus propias habilidades, así como las de sus subordinados. Su había acumulado una gran cantidad de puntos de evolución para producir de forma autónoma una habilidad de noveno nivel en el Dominio de la Percepción, pero el inesperado ataque de Pandora le obligó a cambiar de planes y mostrar el Asalto Extremo que le robó a Claudia. Sin embargo, el Asalto Extremo era una habilidad de octavo nivel, así que ¿cómo podía obtener esta habilidad de la nada? Anteriormente, Su solo tenía tercer nivel de poder y velocidad en el Dominio del Combate. Para obtener el Asalto Extremo, elevó directamente su velocidad al séptimo nivel, además de aumentar su poder al sexto nivel, y solo entonces se abrió el camino que conducía al Asalto Extremo. Si no tenía suficiente poder, el poder del Asalto Extremo ni siquiera se manifestaría. En términos de poder, el Asalto Extremo en realidad no perdía frente a una habilidad de noveno nivel. Esta habilidad se basaba en la fuerza de algunas habilidades básicas como el poder y la velocidad, pero también tenía requisitos estrictos en cuanto al control de la energía y del propio cuerpo. Si se quería mostrar su verdadero poder, en realidad se necesitaban noveno nivel de poder, velocidad, así como el control de la energía del Dominio Mágico de octavo nivel o más. Por supuesto, si Su cumplía estas condiciones, tendría la fuerza para luchar contra Pandora. Sin embargo, el resultado de evolucionar a la fuerza el Asalto Extremo fue que Su se quedó sin puntos de evolución, sin saber cuánto tiempo tardaría en alcanzar el noveno nivel en el Dominio de la Percepción.
Mientras tanto, Madeline también agotó todos sus puntos de evolución en la batalla de esa noche, desarrollando quinto nivel de poder, cuarto nivel de velocidad, así como el segundo nivel de destreza, flexibilidad y defensa. En opinión de Su, Madeline tenía un gran talento en los cinco dominios de habilidades, por lo que, si su fuerza se complementaba con habilidades de nivel inferior de otros dominios, su fuerza de combate aumentaría sustancialmente. Sin embargo, esta chica de ojos azules se centró obstinadamente en desarrollar las habilidades del Dominio de Combate, sin estar dispuesta a utilizar ni un solo punto evolutivo en otros dominios.
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