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jueves, 5 de octubre de 2023

DD - Capítulo 40

Capítulo 40
La Noche de Walpurgis (V)
Traducción y edición: Sho Hazama
Corrección: Zura ja nai, Lord
Los Señores Demonio empezaron a murmurar entre ellos. Una mujer con voz zumbona soltó unas palabras malhumoradas. 300 años era un tiempo absurdo. Paimon cerró los ojos entre el clamor como si hubiera terminado de decir lo que quería decir. Me di cuenta de que el hecho de que usara adjetivos honoríficos con un Señor Demonio de bajo nivel como yo también era para resaltar su decencia. Ella probablemente cree que la forma en que está actuando es genial, pero en mi opinión, sólo se ve arrogante. - Silencio. Cálmense. El Señor Demonio de Rango 5, Marbas, calmó el zumbido con un gesto de su mano. El salón de baile se quedó quieto. - Paimon. ¿Has terminado? - Sí, esta dama no tiene nada más que añadir. - Si ese es el caso, entonces escuchemos el contraargumento de Dantalian. Dantalian tiene derecho a interrogar a Paimon y Paimon tiene derecho a responder a Dantalian. De acuerdo, murmuré para mis adentros y respiré hondo. Se acercaba mi turno. Dicen que si conoces a tu enemigo, puedes ganar todas las batallas, así que decidí comprobar mi estado antes de entrar en mi defensa. Debido a las desconocidas habilidades pasivas que poseen los Señores Demonio aquí, mis estadísticas han bajado drásticamente.

Nombre: Dantalian
Trabajo: Director de Mazmorra (F), Señor Demonio (F)
Facción: Ejército del Señor Demonio de Dantalian
Raza:
Señor Demonio
Alineación:
Neutral (-10)
Nivel:
4
Infamia:
253
Estadísticas
Liderazgo:
15/15
Poder:
2/5
Inteligencia:
20(-5)/25
Política:
13/15
Encanto:
5(-5)/10
Técnica:
4/10
Títulos: Ninguno.
Habilidades: Ninguna.
Capacidades: Ninguna.
Logros:
0
Subordinados:
42/50
Mis estadísticas son lamentables. Sin embargo, me sentía sereno gracias al silencioso aliento de Lapis. Incluso entre las numerosas emociones que me atravesaban en ese momento, aún podía sentir claramente una pequeña preocupación hacia mí. Además, ¡la época en la que los aventureros de la Aldea Jalsen invadieron fue mucho peor que esta! Mis estadísticas eran bajas ahora, pero las de entonces eran tan bajas que podrían haber cavado un pozo. Acababa de llegar a este mundo en aquella época, así que tuve que reunir información por mi cuenta de principio a fin. Tuve que montar una actuación, a pesar de no estar acostumbrado a actuar, para poder sobrevivir. ¿Y cómo es esta situación en comparación? Sé muy bien en qué tipo de situación me han metido y sé muy bien quién es la otra parte. Paimon fue uno de los jefes a los que vencí una y otra vez mientras jugaba al juego decenas de cientos de veces. Para mí es muy obvio cómo responderá a ciertas preguntas. - Dantalian puedes comenzar tu investigación. Marbas habló. Incliné la cabeza hacia él antes de mirar alrededor de la sala con una fina sonrisa. - Antes de comenzar, deseo expresar que estoy sinceramente perdido. En primer lugar, porque Su Alteza Paimon es un personaje mucho más noble y poderoso que alguien como yo. Oí a alguien resoplar. Probablemente era Barbatos, ya que había estado en contra de Paimon desde el principio de la reunión. No le presté atención y continué. - En segundo lugar, tampoco sabía que Andromalius era un personaje que poseía suficiente prestigio como para que Su Alteza Paimon se preocupara tanto por él. Hasta ahora, creía firmemente que había una brecha insalvable entre el estatus de Su Alteza Paimon y la personalidad de Andromalius. Sin embargo, Su Alteza Paimon ha saltado por encima de esa brecha y ahora está tratando de abogar por Andromalius de todas las personas, un individuo que es el más patético entre todos los 72 Señores Demonio y es honestamente vergonzoso incluso llamarlo nuestro compañero... Me disculpo, pero no logro entender la intención de Su Alteza. La expresión de Paimon se volvió fría. Las comisuras de su boca seguían levantadas, pero su mirada era fría. Para alguien que ha interactuado constantemente con la chica más impasible del continente demoniaco, esta expresión no era nada impresionante. No sólo era obvio para ella que casi había ridiculizado su reputación directamente, sino que también era obvio para todos los demás. - ...Esta señora dio una razón clara a ese respecto. Los Señores Demonio tienen valor únicamente porque son Señores Demonio. - ¿Es así? Abrí los ojos de par en par como si estuviera conmocionado. - No, ¿es realmente así? Señorita Paimon, ¿lo cree de verdad? - Sí, estoy siendo sincera. ¿Acaso cree que esta señora ha hecho esa declaración frívolamente? - Le pido disculpas. No tengo ninguna intención de burlarme de usted, Su Alteza Paimon. Simplemente estoy sorprendido porque creo que la señorita Paimon no podría hablar mal. Entonces me incliné en un ángulo de 60 grados. - Ahora bien, utilizaré la autoridad que se me ha concedido para sobrepasar mi estatus y hacerle algunas preguntas a la señorita Paimon. Señorita Paimon, ¿qué son los Señores Demonio? Puede que mi pregunta haya sido algo vaga. Permíteme reformularla. ¿Cuál es el significado de la existencia de los Señores Demonio en el continente demoniaco? - ¿Estás menospreciando a esta dama? Naturalmente, es guiar y unir a todas las razas demoniacas y conducirla a la superficie. - Una respuesta excelente. ¿Mirar hacia abajo? Destierre ese pensamiento. Simplemente me sentiré honrado si Su Alteza se toma la molestia de responder a un par de mis preguntas. Mostré las palmas de las manos y sonreí afectuosamente. - Señorita Paimon, si los Señores Demonio deben guiar, unir y conducir a la raza demoniaca a la superficie, entonces si un Señor Demonio no guía, une o intenta conducir a la humanidad demoniaca a la superficie, ¿significa eso que carece de las cualidades de un Señor Demonio? - Correcto. - A decir verdad, yo también lo creo. Eso era mentira. A quién le importa cuáles son los deberes de un Señor Demonio. Está bien mientras no muera. Sin embargo, mentir no cuesta nada. - Eso es en realidad todo lo que significa un Señor Demonio dentro del continente demoniaco. Perdóname, pero si tuviera que compararnos con los Archiduques que gobiernan los Infiernos del continente demoniaco, hay Señores Demonio entre nosotros cuyas influencias son menores que las suyas. Yo soy uno de ellos. A pesar de ello, somos tratados como emperadores y emperatrices que están por encima de esos duques y Archiduques. ¿A qué se debe esto? A todos, es tal y como ha dicho la señorita Paimon. Miré alrededor de la sala. - Como la supervivencia del más fuerte es ley y la codicia es la verdad del continente demoniaco, sólo nosotros, los Señores Demonio, podemos trabajar de verdad por el bien de los demás y liderarlos. Somos los únicos ante los que los demonios inclinan gustosamente la cabeza. Aunque los Archiduques de todos los Infiernos dirijan decenas de cientos de ejércitos, ¿crees que alguno de sus hombres les ha jurado lealtad de verdad? Dentro de este antro donde cada uno sólo puede pensar por sí mismo, para los demonios, los Señores Demonio son las únicas existencias que brillan como una luz de esperanza. Símbolos absolutos. Siendo realistas, puede que los demonios hayan estado librando constantemente sangrientas batallas durante miles de años, pero “ellos” son la prueba de que aún podríamos llegar a serlo algún día. Eso es lo que son los Señores Demonio en Dungeon Attack. - Pero entonces había un cierto Señor Demonio. Él no trató de unir o liderar a la raza demoniaca. Explotó a cientos de goblins únicamente para ganar dinero. Lo más sorprendente era el hecho de que ¡ni siquiera residía en el mundo humano! Pasaba el tiempo derrochando en el continente demoniaco para su propio disfrute y placer. Los fondos que utilizaba para su lujo procedían naturalmente del sudor y la sangre de sus goblins. Por eso, deseo preguntarles esto a todos. ¿Es esta persona realmente un Señor Demonio? Este individuo había traicionado esa expectativa y esperanza. Nadie respondió. Me detuve un momento antes de abrir la boca. - ¿Podemos realmente llamar a esta persona nuestro pariente? El salón de baile permaneció en silencio. Pasé de utilizar todo tipo de gestos a moverme con extrema prudencia y lentitud. - A todos. En todo caso, deseo que nos censuren. La razón por la que se nos trata con más nobleza, a pesar de ser peores que un Archiduque, es porque somos Señores Demonio. ¿Qué razón hay para que despreciemos y perdonemos a un individuo así? - Porque sí... ¿Acaso pensaba que perdería el impulso si me permitía continuar? Paimon me interrumpió. - Porque por muy burdos que sean, sólo existimos 72 de nosotros en el mundo... - Oh, Su Alteza Paimon. ¿Por el bien de quién existimos los 72 Señores Demonio? La fulminé con la mirada. - ¿Desde cuándo los Señores Demonio existen para otros Señores Demonio? ¿Desde cuándo los Señores Demonio dejamos de actuar por el bien de la raza demoniaca y creamos un ranking entre nosotros? - ... - Estamos solos. Tienen razón. Es difícil para nosotros distinguirnos de los demás. Por lo tanto, es difícil para nosotros sentir esa llamada unión. Para nosotros y los demás somos simplemente una sola masa de conciencia. De acuerdo. Nos sentimos solos; sin embargo, ¿significa esto que debemos absolutamente perdonar la vida de un Señor Demonio sólo para poder evitar nuestra soledad? Ella no pudo responder. Paimon. Este debate terminó en el momento en que respondió a mi primera pregunta. No debería haber dado una respuesta de manual diciendo que el deber de los Señores Demonio es liderar a la raza demoniaca. Debería haberse puesto firme y haber dicho simplemente que los Señores Demonio no tienen nada parecido a una obligación. - ¡Eso no es más que ser codicioso! Su Alteza Paimon ha incurrido en una contradicción demasiado obvia. Su Alteza habló en un tono que sonaba como si estuviera hablando por el bien de Andromalius y de todos nosotros. Sin embargo, ¿¡no es más que el codicioso deseo de Su Alteza Paimon de no estar sola!? Su personalidad de no poder afirmar sus nervios es la razón de su derrota. - Andromalius había cometido 2 graves crímenes. Levanté la voz y grité como si estuviera descargando mi ira. - Primero, había ido contra el deber de un Señor Demonio. Un Señor Demonio que ha perdido su honor pierde su derecho a gobernar sobre la raza demoniaca. Por lo tanto, ya no es un Señor Demonio. En segundo lugar, había dañado gravemente las expectativas y esperanzas que la gente tenía de los Señores Demonio. Cuando un día apelemos a la raza demoniaca para planificar una causa mayor, una parte de los demonios dudarán de nosotros porque pensarán en Andromalius como ejemplo. Si esto no dañó la imagen de todos los Señores Demonio, entonces no sé qué lo haría. - Alguien tenía que detener a Andromalius; sin embargo, nadie lo hizo durante cientos de años. ¿No es vergonzoso? ¡Los Señores Demonio estaban rebajando la reputación de los Señores Demonio por su cuenta! Además, un personaje del 9º rango ha defendido un valor que se opone completamente a la idea de los Señores Demonio, ¡la codicia! - ...Guh. - Me gustaría hacer una petición aquí. Como el Señor Demonio Andromalius no sólo ha ensuciado el nombre de los Señores Demonio, la muerte era el único castigo adecuado para él. Por lo tanto, me gustaría hacer una petición. Como un noble Señor Demonio que naturalmente debe mantener su dignidad ha ido en contra de su propia palabra, debemos hacer que Su Alteza Paimon actúe como representante y ofrezca una disculpa pública al pueblo de Niflheim. Paimon ni siquiera intentó mantener la sonrisa en sus labios. Ocultó la boca tras su abanico mientras me clavaba una daga con la mirada. Mientras los 2 nos mirábamos con agresividad, todos a nuestro alrededor permanecieron inmóviles. No era una quietud silenciosa, sino una quietud llena de excitación. Dado que ambas partes se estaban acusando mutuamente, no había nada más interesante que esto para los espectadores. Fue en ese momento cuando Barbatos rio y aplaudió. - ¡Jajaja! Tiene razón, ese chico tiene razón. Esa puta zorra siempre iba por ahí hablando de que los Señores Demonio deben ser de clase alta o lo que sea. Giré la cabeza. Ahora podía ver con mis ojos a Barbatos, de la cual sólo había podido oír la voz. Igual que en el juego, Barbatos era una chica joven. Llevaba un vestido muy adornado con volantes rojos, por lo que parecía una señorita de las que se ven cuando se juega con muñecas. - Si va en contra de las mismas palabras que ha estado diciendo constantemente toda su vida aquí, entonces sólo será malo para ella, así que definitivamente tiene que disculparse con esos pedazos de basura demoniacos. Jajaja, ¡esto es genial! Marbas, el que estaba a cargo de los procedimientos, le dio a Barbatos una mirada de reojo. - Barbatos. Las partes no implicada no pueden intervenir sin permiso. - Aah, pero el interrogatorio ha terminado. ¿Hay algo más que decir? Puta zorra, deberías ir corriendo a la ciudad y poner tu abundante culo en el suelo y disculparte. ¿Quién sabe? ¿Quizá algún vagabundo privado de sexo acepte tus disculpas haciéndote la gracia? - ¡Barbatos! El tono de Marbas se hizo más fuerte. Barbatos resopló y cerró la boca. Hizo algunos comentarios excesivamente sarcásticos, pero Paimon no se volvió a mirar a Barbatos ni una sola vez. Siguió mirándome fijamente. - ... No me eché atrás y seguí mirándola fijamente. O me encarcelan en algún lugar desconocido durante 300 años o pisas tu propia dignidad y te disculpas ante el pueblo. Sólo había estas 2 opciones. No quería perder en esta batalla de vigor. Tú fuiste quien me atacó primero. Te metiste conmigo cuando no estaba haciendo nada. Si no te hubieras desviado de tu camino para celebrar una audiencia en este lugar oficial y presentar cargos contra mí, entonces no habría tenido que correr el riesgo de ser hostil hacia alguien tan poderoso como tú. ‘Así que baja la mirada.’ Te he derrotado más de una docena de veces en el juego. Soy un jugador que logró no sólo matarte a ti, sino también a todos los Señores Demonio presentes en esta sala, Señor Demonio fetichista de humanos.

≡≡≡≡≡≡≡≡≡≡≡≡≡≡≡≡≡≡≡≡≡≡≡≡≡≡≡≡≡≡≡≡≡≡≡≡≡≡≡≡ Si encuentras errores déjanos las correcciones en un comentario abajo, servirán para mejorar la calidad de la serie.

DD - Capítulo 39

Capítulo 39
La Noche de Walpurgis (IV)
Traducción y edición: Sho Hazama
Corrección: Zura ja nai, Lord
Me quedé inmóvil. Lo primero que se me pasó por la cabeza fue que estaría bien tener algo entre las manos con lo que juguetear en ese momento. No podía ordenar mis pensamientos. No esperaba que sacaran el caso de Andromalius así. Tampoco había oído que los Señores Demonio se apreciaran entre sí. - Esa puta está diciendo tonterías otra vez. Nunca escuché que pudiéramos tener una audiencia o lo que sea. - Rango 10 y superiores tienen la autoridad para solicitar una audiencia. - ¿Eh? ¿En serio? - Aunque hace más de 500 años que no se utiliza realmente. Paimon, estás tratando de hacer un gran problema de la muerte de un vagabundo... Los Señores Demonio comenzaron una acalorada discusión. ‘Piensa. Tengo que pensar.’ Esta es la única oportunidad que tengo para hacerlo. Tengo que pensar en una idea mientras discuten. La razón por la que un par de Señores Demonio están en contra de una audiencia no es por el hecho de que yo les caiga bien, en su lugar es porque les desagrada Paimon. Las posibilidades de que me ayuden personalmente son extremadamente bajas. La mujer que está usando un tono infantil y quejándose es probablemente el Señor Demonio de Rango 8 Barbatos y el hombre que está tratando de calmar prudentemente a todos es muy probablemente el Señor Demonio de Rango 5 Marbas. Todos ellos son personajes importantes en Dungeon Attack. Paimon, representa a la facción demoniaca que está en términos relativamente amistosos con los humanos, mientras Barbatos, pertenece al bando que mantiene hostilidad hacia los humanos, y Marbas, es neutral. Las diferencias en las personalidades de cada uno de ellos llevan naturalmente al conflicto incluso aquí. Contorsioné mucho la cara mientras giraba desesperadamente los tornillos de mi cabeza. ‘¿Por qué me atacaba Paimon cuando nos veíamos por primera vez? No podía entenderlo. Maldita sea, creo que mi velocidad de procesamiento es más lenta de lo normal desde que mis estadísticas de Inteligencia había bajado. Aunque es posible que Andromalius hubiera sido parte de la facción de Paimon. Entonces, ¿eso significaba que este intento de audiencia era simplemente porque quería demostrarle a la gente que apreciaba a los de su facción? ¿Era Paimon el tipo de persona que actuaba así políticamente en el juego?’ Sabía que ese no era el caso, en relación con su insidiosa forma de hablar, Paimon es un personaje pervertido. Llega incluso a disfrazarse de humana y a buscar hombres y mujeres en ciudades humanas. En el juego, Paimon y el protagonista también se encuentran por primera vez en una ciudad humana y el hecho de que ella es un Señor Demonio se revela rápidamente en el momento en que lanza una mirada amorosa al protagonista. Después, Paimon no dejaba de molestar al protagonista por ser el primer hombre que no se enamoraba de su aspecto. La forma en que lo molestaba tampoco era normal, ya que lo hacía enviando innumerables ejércitos de monstruos tras el protagonista.

- Ya que estoy a las puertas de la muerte, ¿no podrías darle un beso a esta dama?
Incluso durante su último aliento, ella no detuvo sus avances hacia el héroe. Se lo pensó rápidamente antes de ceder ante los ojos llorosos de la doncella y darle un beso a Paimon. Ese fue el primer beso del protagonista. A pesar de estar rodeado de docenas de miembros femeninos en su equipo, un Señor Demonio dio su primer beso antes que nadie. Hubo un tiempo en que un grupo de jugadores debatía si Paimon era realmente una mujer pura o una simple puta. En cualquier caso, no sólo nunca ha bajado del ranking de las 10 heroínas más buscadas, sino que la gente pedía activamente a los desarrolladores que la convirtieran en objetivo de captura junto con Laura De Farnese. Como nota al margen, no me gusta Paimon. Después de todo, sufrí 2 Game Overs por su culpa. Cuando pierdes contra otros Señores Demonio, te matan de inmediato, pero Paimon era diferente, ya que te convertía en esclavo sexual si perdías contra ella. ‘Paimon puede ser una pervertida, pero sus principios son simples.’ Ella es pro-humanos. Le gustan los humanos, copia a los humanos, y trata de proteger a los humanos. Incluso cuando las relaciones entre demonios y humanos empeoraron gradualmente, Paimon y un par de otros Señores Demonio se abstuvieron de realizar matanzas indiscriminadas. Aunque fuera por una razón muy egoísta, como no querer perder sus juguetes, al menos justificaba sus acciones diciendo cosas “Como Señor Demonio, mancharás tu dignidad si disfrutas cometiendo matanzas”. A pesar de apreciarse a sí misma hasta un grado aterrador, era una mujer que actuaría como si apreciara increíblemente la autoridad y la dignidad frente a los demás. En otras palabras, es una Señor Demonio muy singular. ‘Por otro lado, Andromalius era un bastardo que típicamente trataba a los humanos como insectos.’ Según mi deducción solo hay una posibilidad increíblemente baja de que Andromalius pudiera haber formado parte de la facción de Paimon. Por lo tanto, está claro que Paimon está pidiendo una audiencia con otro objetivo en mente y no por el bien de Andromalius. En otras palabras, el objetivo soy yo. ‘¿Por qué? ¿Fui alguna vez hostil hacia Paimon? Es imposible que eso haya sucedido.’ En primer lugar, si excluyes mi interacción con Andromalius, entonces esta era la primera vez que me encontraba con otros Señores Demonio. Sin embargo, si estoy en lo cierto, entonces Andromalius no era el problema ahora. Al final, no había manera de que me hubiera involucrado personalmente con Paimon. No pude encontrar una respuesta. Me sentí frustrado. Como no conocía la intención de la otra parte, me sentía como si estuviera en el fondo de un océano negro como el carbón e intentara nadar. ‘Maldita sea, ¿dónde podría haber...?’ Fue en ese momento. Algo pequeño rodeó mi mano derecha. Me giré hacia un lado, sorprendido. Lapis me estaba mirando. - ... Sus ojos claros y a la vez firmes me miraban en silencio. En ese momento experimenté algo extraordinario. Era algo que probablemente sólo ocurría 5 o 6 veces en toda la vida de una persona. Sé muy bien lo que estás sintiendo en este momento, y como te conozco más concisa y exactamente de lo que te conoces a ti mismo, es por esta razón que estaré de tu lado pase lo que pase, esto era lo que me decían sus ojos. Lapis era capaz de decirme esto sin una sola palabra, expresión o gesto. Como no había palabras, no había malentendidos, como no había expresiones, no había exageración de emociones, y como no había gestos, sólo había sinceridad. Mi oleada de desesperación desapareció. Sólo quedó la tranquilidad. Sentí un tipo de gratitud que sentiría al conocer a alguien bien dispuesto hacia mí, alguien cuyos pensamientos internos no diferían de lo que mostraban en el exterior. La habilidad de un Señor Demonio no sólo le permite leer las emociones de los demás. También les permite armonizar sus emociones con las de los demás. - ... Lapis y yo nos miramos durante un breve instante. Mientras lo hacíamos, la gente a nuestro alrededor seguía discutiendo. De repente sentí que mi contemplación sobre la inclinación de Paimon era divertida. Todos los pensamientos que había tenido hasta ahora no se habían desvanecido. Es sólo que ahora era capaz de contemplar esos pensamientos desde arriba. ‘Así es. No hay razón para que Paimon sea hostil conmigo.’ Sonreí. Era evidente. Sólo he hecho algo digno de mención una vez. Si relacionaba esa única acción con las tendencias de Paimon, entonces era fácil entender por qué usaría a Andromalius como pretexto para presionarme. La acalorada discusión entre los Señores Demonio llegaba poco a poco a su fin. El Señor Demonio de rango 5, Marbas, habló en voz baja. - Tengo el rango más alto entre los aquí presentes. Creo que estaría bien que yo me encargara de la audiencia. Me preocupa que haya alguna parcialidad si alguien de menor rango se encarga de los procedimientos. Miró a Ivar, de la empresa Keuncuska. Este se inclinó en señal de disculpa. Ivar era el anfitrión original. Marbas le reprendió por no ser capaz de calmar a los demás Señores Demonio. Sin embargo, yo pensaba de otra manera. ‘Lo más probable es que la Firma Keuncuska se sentara sobre sus manos deliberadamente.’ Le hice una pregunta en voz baja a Lapis. - Paimon también es cliente de la Firma Keuncuska, ¿verdad? - Sí. Torukel, uno de los más altos ejecutivos de la firma, está a cargo de ella. Es alguien que usted mismo ha conocido alguna vez, señor Dantalian. - Ese viejo goblin, eh. Fue el goblin que apareció de la nada para hablar de la plaga hace poco más de un mes. Está a cargo de Paimon, ¿verdad? Y pensar que tomaría represalias así porque me negué a discutir nada con él sin Lapis. Marbas caminó hacia el centro del salón de baile. - Rango 9, el Señor Demonio de la Destrucción, la solicitud de Paimon para una audiencia ha sido aceptada. Yo mismo, el rango 5, el Señor Demonio del Control, Marbas, lo he reconocido. La parte en cuestión es el Rango 71, el Señor Demonio de Muchos Rostros, Dantalian. Me miró. Eso significaba que yo también tenía que dar un paso al frente. Lamentándolo mucho, solté la mano de Lapis y salí con pasos algo nerviosos pero despreocupados. Podía sentir la preocupación de Lapis detrás de mí. No tienes por qué preocuparte, Lapis. ‘He jugado Dungeon Attack lo suficiente para evitar ser derrotado por algún PNJ.’ Con Marbas entre nosotros, me puse de pie y me enfrenté a Paimon. Me miraba con una sonrisa pervertida, pero no dejé que me molestara y le devolví la sonrisa. - Paimon tiene derecho a interrogar a Dantalian y Dantalian tiene derecho a responder a Paimon. Mantendré esta audiencia corta en consideración a que es la Noche de Walpurgis. Por lo tanto, ambas partes deben abstenerse de dar largos discursos y mantener la audiencia con preguntas y respuestas cortas. Decidiremos qué parte es la correcta a través de nuestra larga tradición de votación. Los Señores Demonio que estaban esparcidos por el salón de baile se reunieron lentamente. Se colocaron junto a nosotros como espectadores que hubieran venido a ver un combate de boxeo y procedieron a mirarnos de un lado a otro con miradas intrigadas. - En primer lugar, concedo a Paimon, la que solicitó esta audiencia, el derecho a ser interrogado. Procede, Paimon. - Le agradezco amablemente que haya escuchado la petición de esta dama. Paimon recorrió la sala con una mirada agradable. Parece que actuar con coquetería era un hábito suyo. A mi derecha, pude escuchar a Barbatos insultarla con una voz molesta. Acababa de darme cuenta de que los únicos Señores Demonio que hablaban en voz alta eran los de rango superior al 10. Todos los que están por debajo mantienen la boca cerrada. ‘Esto probablemente representa lo increíbles que son. La persona frente a mí también.’ - Deseo primero establecer los hechos. La sonrisa de Paimon estaba dirigida hacia mí. Pude ver claramente la hostilidad detrás de sus ojos sonrientes. - Dantalian, hace 9 días asesinaste al Señor Demonio Rango 72 Andromalius. ¿Es esto correcto? - Sí. Asentí plácidamente. - Lo asesinaste a pesar de saber que también era un Señor Demonio. ¿Correcto? - Eso también es correcto. - Por lo tanto, usted asesinó intencionalmente a un Señor Demonio. A pesar de usted mismo ser uno. Para todos los que han venido aquí para asistir a la Noche de Walpurgis, sabemos mejor que nadie que ser un Señor Demonio es un rol importante. Paimon volvió a mirar alrededor de la sala. - No deseo venir aquí a repetir el argumento de que todas las personas tienen una sola personalidad. Sin embargo, hay una cosa que es cierta. Poseemos demasiados ‘nosotros’ dentro de nosotros. Las emociones de los demás siguen mezclándose y mezclándose con nuestras propias emociones, lo que nos dificulta distinguir lo que es nuestro y lo que no lo es. Como no existe nada que nosotros, los Señores Demonio, podamos llamar realmente ‘yo’... Un silencio cayó sobre el salón de baile. - Por lo tanto, tampoco tenemos nada que podamos llamar ‘tú’ sin dudarlo. El único pronombre personal que nos está permitido es ‘nosotros’. Este es el destino de un Señor Demonio. Esta señora cree que es un deber que no tenemos más remedio que soportar como personas que nos hemos convertido en Señores Demonio. Sin embargo, hay una excepción. Otros Señores Demonio como nosotros. Extendió los brazos de forma exagerada. Este gesto le parecía natural. La forma en que se movía hacía evidente que estaba muy acostumbrada a dar discursos. - En este continente demoniaco en el que debemos esforzarnos constantemente para distinguir si nuestras emociones son nuestras o no, al menos, cuando estamos junto a otro Señor Demonio, no tenemos que preocuparnos por eso. Cuando estamos con otros Señores Demonio, parece como si nos hubiéramos convertido en personas normales que pueden sentir sus propias emociones, decir lo que quieren y pensar en lo que quieren. Sólo cuando estamos juntos podemos sentirnos ‘nosotros mismos’. Por eso los Señores Demonio son tan valiosos. Paimon reforzó su tono. - Podemos enemistarnos, ser hostiles y luchar unos contra otros, pero también nos reconocemos. No tenemos más remedio que hacerlo. Sólo 72 de nosotros existen en el mundo, después de todo. Así es. Incluso entre los Señores Demonio, Andromalius era una completa basura. A pesar de esto, ninguno de nosotros trató de matarlo. ¡Esto es natural! ¿Acaso no era un Señor Demonio que vino a este mundo con el mismo deber que nosotros? Bajó los brazos y me miró en silencio. Ya no intentaba ocultar su hostilidad. Me estaba denunciando abiertamente para que todos la vieran. - Y sin embargo, Dantalian golpeó a Andromalius hasta la muerte sin ninguna vacilación. Esta dama no puede evitar expresar sus dudas. ¿Es realmente un Señor Demonio como nosotros? ¿Cómo podría un Señor Demonio matar a otro Señor Demonio con tanta facilidad? Esta señora no está cuestionando a Dantalian como individuo. Como representante de los 72 Señores Demonio que existen, pongo en duda que este hombre tenga derecho a ser un Señor Demonio. Incluso el más pequeño de los susurros había desaparecido. Mientras todos contenían la respiración mientras seguían observándonos, Paimon habló con firmeza. - Esta dama sugiere que confinemos a Dantalian en la prisión de la Tierra Eternamente Congelada durante 300 años.

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DD - Capítulo 38

Capítulo 38
La Noche de Walpurgis (III)
Traducción y edición: Sho Hazama
Corrección: Zura ja nai, Lord
La tarde del día siguiente a nuestra visita a la boutique. Subimos a un carruaje. Miré tranquilamente por la ventanilla. El carruaje no paraba de temblar debido al pavimento de piedra, así que no podía disfrutar tranquilamente del paisaje que pasaba. Decidí cerrar los ojos. Lapis también estaba igual de callada. Así llegamos en silencio al palacio de Niflheim. Una vez que bajamos de nuestro carruaje en la puerta principal del palacio, una anciana nos dio la bienvenida. Era una bruja e hizo una reverencia tan baja que su cara casi le tocaba las rodillas. El sombrero de bruja que llevaba en la cabeza era tan grande que, de no ser por su nariz aguileña, le habría tapado toda la cabeza. Habló con una voz chirriante como la de un ratón. - ¿Su Alteza Rango 71 Dantalian? - Es correcto. - Mm, Dantalian... Dantalian... Oh, aquí esta. La bruja escribió algo en el pergamino con el dedo. - Tu nombre está al final, así que fue fácil de encontrar. La posición de Su Alteza es mucho mejor que la de aquellos que están en algún número vago como el 32 o el 46. Realmente, la gente debe estar en lugares que puedan ser encontrados fácilmente. Jeje. Ahora bien, Su Alteza. Ahora sólo tienes que seguir a este niño. La bruja entonces señaló a un gato negro. Este estiró rápidamente las patas traseras y nos saludó en cuanto nos volvimos para mirarlo. El gato vestía un espléndido uniforme rojo de soldado, como un muñeco disfrazado. Era la primera vez que veía una criatura tan adorable. Me sentí extrañamente cautivado y le devolví el saludo. Lapis me golpeo con el codo en el costado. Seguramente me estaba diciendo que mantuviera mi dignidad como Señor Demonio. La bruja acarició juguetonamente la barbilla del gato. - Niña, escucha con atención. Entra en ese callejón de ahí, baja por el camino cuesta arriba, sube por el camino cuesta abajo, gira y gira, a la derecha 3 veces, a la izquierda 3 veces, y después de girar y girar un total de 9 veces, camina por un camino estrecho como si fuera ancho y por un camino ancho como si fuera estrecho, acelera, olvídate de acelerar, y finalmente, una vez que aceleres hasta el punto de bailar y te olvides de que estás caminando, entonces llegarás al final del callejón. Guíale hasta ese final. El gato saludó de nuevo para demostrar que había entendido. - ¿Qué era esa magnífica tontería? Lapis me susurró. - Un elaborado hechizo. Permite al receptor atravesar el laberinto sin perderse. Las personas que no escuchen esas palabras y se adentren en el laberinto lo más probable es que se pierdan y queden atrapadas. - Hm, no sonó particularmente como si ella lanzara un hechizo. - Eso significa que es una maga impresionante que es capaz de usar hechizos sin usar ninguna magia. ‘¿Esa anciana lo es?’ Me entró curiosidad. Para ser honesto, nunca antes había conocido a alguien que fuera realmente fuerte. Si Lapis tiene razón y esta anciana es una gran bruja, entonces me mostrará estadísticas que superan con creces a cualquier otra persona. - Estado. Un efecto de sonido familiar sonó y una pantalla apareció al mismo tiempo.

Nombre: Humbaba
Aguante:
Ataque:
Defensa:
65
105
51
- ... ‘Lo siento. No me di cuenta de que era un individuo tan poderoso.’ No, si esta persona invadiera mi mazmorra, sería aniquilado en un instante. Ella probablemente podría acabar con mi gólem, no, con toda mi unidad gólem con un solo hechizo. Un personaje así actuaba como un simple asistente en una reunión de Señores Demonio. Comprendí una vez más lo bajo que estaba, un Señor Demonio de rango F en posesión de una mazmorra de rango F. - Jiji. Por favor, asegúrate de seguir sólo a este niño. Si te desvías del camino, ocurrirá algo muy interesante. - Lo pregunto por pura curiosidad, pero ¿qué se supone que es algo muy interesante? - Es tan interesante que un brazo saldrá de tu boca, jijiji. ‘Estoy seguro de que eso no tiene nada de interesante.’ El gato negro tomó la delantera y caminó a paso firme como un cascanueces. Yo seguía nerviosamente al gato, asegurándome de pisar exactamente donde él había pisado. Me di cuenta de que Lapis me lanzaba una mirada de lástima a mi lado, pero no se puede evitar. No sólo no quería tener 3 brazos, sino que quería evitar la sola idea de que un brazo saliera disparado de mi boca. Así, atravesamos la extravagante entrada del palacio, el oscuro jardín y algunos pasillos antes de llegar finalmente al salón de baile. El gato nos saludó junto a las escaleras que conducían al salón de baile, informándonos de que habíamos llegado. No pude aguantar más lo lindo que era y le acaricié abundantemente la barbilla. El gato dejó escapar un agradable ronroneo. ‘Dios mío. ¿Qué es este ser? ¿No es un monstruo gatuno demasiado lindo? Es tan lindo que no me sorprendería que fuera ilegal. Debe recibir un castigo legal, así que, para empezar, lo encerraré en mi habitación de Señor Demonio. No voy a hacer esto por algún deseo mío, es porque debo proteger las leyes de este mundo.’ - Señor Dantalian. - Ugh, lo entiendo. Gemí a Lapis y subí las escaleras hasta el salón de baile. No había guardias ni asistentes. Una vez que atravesamos las ya abiertas, macizas y magníficas puertas de mármol, una voz resonó desde algún lugar. - Rango 71, ¡Su Alteza Dantalian ha llegado! A diferencia de los salones de baile que había visto en las películas y libros de mi mundo original, este salón era increíblemente oscuro. Las únicas fuentes de luz eran las velas de la misma altura que las personas, colocadas aquí y allá por todo el salón. Los rostros de la gente se iluminaban a la luz ámbar de las velas. Todos me miraban ya que acababa de llegar. No pude evitar sentirme abrumado por esta extraña escena, que casi podría calificarse de reunión de fantasmas. ‘Pero no puedo mostrar mi lado débil.’ Inmediatamente activé mi habilidad de Actuación. Pero ocurrió algo inesperado.

Actuación
Se otorgará un efecto de bonificación a tu habilidad según tus estadísticas de Inteligencia y Encanto.
Has lanzado tu dado, pero un cuervo que pasaba volando se lo ha llevado. No has podido activar tu habilidad.
¡Múltiples habilidades han bloqueado la activación de tu habilidad!
‘¿Q-Qué?’ Las palabras que nunca había visto antes siguieron saliendo junto con el efecto de sonido metálico.

Has fallado al activar tu habilidad debido a la “abrumadora” diferencia de estadísticas.
Se te aplicará una penalización. Ya no podrás utilizar ninguna habilidad durante las próximas 3 horas.
Debido a la penalización, tu estadística de Inteligencia se ha reducido en 5.
Debido a la penalización, tu estadística de Encanto se ha reducido en 5.
Esto me dejó estupefacto, solo conseguí recuperar la compostura gracias a que Lapis me pisó sin que nadie se diera cuenta. Me aclaré la garganta al despertar de mi aturdimiento y seguí adelante. Entonces me coloqué cerca de un pilar. Podía oír a la gente hablar a lo lejos. - Es el que mató a Andromalius, ¿verdad? Parece bastante denso. - Me preguntaba qué clase de Señor Demonio demente asesinaría a otro Señor Demonio, pero es sorprendentemente sencillo. - Sabía que ese tipo iba a morir algún día. Hmph, ese idiota sin hogar. - Siento como si hubiera intentado algo justo ahora... Las palabras difamatorias contra mí continuaban siendo intercambiadas; sin embargo, no tenía tiempo para preocuparme por eso. Puede que mi habilidad para Actuación no sea muy fiable, pero es lo único a lo que puedo recurrir. Una severa oleada de inquietud me invadió una vez que eso me fue arrebatado. Si Lapis no estuviera a mi lado, firme y serena como de costumbre, probablemente habría hecho el ridículo en este baile. Lo único que impedía que se me doblaran las rodillas era mi deseo de no decepcionarla. Afortunadamente, el interés de la gente por mí desapareció pronto y los Señores Demonio volvieron a sus respectivos grupos. Ninguno de ellos se acercó a mí.
* * *
Unos cuantos Señores Demonio llegaron después de mí. Eran personas con cuyos nombres me había familiarizado ligeramente a través de Dungeon Attack. Tras la llegada del último Señor Demonio, las grandes puertas se cerraron. Una sola persona caminó hacia el centro del salón de baile. Era un anciano caballero vestido con un limpio esmoquin blanco. El anciano caballero hizo una cortés reverencia a cada lado de la sala antes de hablar en un tono pausado. - Doy mi más calurosa bienvenida a todos Sus Excelencias que han venido hoy aquí para esta honorable Noche de Walpurgis. Mi nombre es Ivar Lodbrok, uno de los siete ejecutivos de la Firma Keuncuska, y he sido puesto a cargo de los procedimientos de esta noche, lo cual es más de lo que merezco. Siguieron unos breves aplausos. Me parece que sólo 6 personas habían aplaudido. El aplauso fue demasiado pequeño para ser considerado una cálida bienvenida al anfitrión, pero Ivar se inclinó una vez más como si se sintiera muy honrado. Entorné las cejas. Ivar Lodbrok también es un personaje que aparece en la parte media de Dungeon Attack; sin embargo, esta persona tiene un aspecto completamente distinto del Ivar que conozco del juego. ‘Ivar no debería ser un anciano.’ Quería preguntárselo a Lapis, que también trabaja en la compañía Keuncuska, pero no tuve fuerzas para abrir la boca. Estaba muy nervioso. Probablemente no sería demasiado tarde para preguntárselo más tarde. - Primero cubriré la agenda de hoy. Primero, sobre la batalla de herederos que ha ocurrido en el continente demoniaco... Una aguda voz femenina intervino. - Espera. No quiero debatir los pros y los contras de las cosas que ocurren en el continente demoniaco después de haber venido hasta aquí. Esas cosas se resolverán naturalmente a lo largo de los próximos 4 días de esta aburrida reunión. Hoy sólo quiero comer y beber. La expresión de Ivar se contorsionó en preocupación. Era un rostro que quería decir algo, pero no podía. Un hombre de pie frente a la mujer habló. - Como era de esperar de una muchacha inculta. Qué vulgaridad. Hay una cosa que se llama procedimiento. - Deja las burlas, amigo. La gente podría empezar a pensar que realmente te apasionan estas reuniones. Kekeke. Te vi dormir en medio de la última reunión. - Qué absurda calumnia. Debido a la mala iluminación, apenas podía ver las caras de las personas que estaban hablando. Parecía que sólo sus labios sobresalían y se movían en la oscuridad. Otra persona habló. - ¿Se están peleando otra vez, eh? Esta señora se pregunta cuándo podremos tener por fin una reunión civilizada, una reunión apropiada para los Señores Demonio. ¿Con qué propósito nos hemos desviado de nuestro camino para contratar a la Sangre Verdadera de la Firma Keuncuska como anfitriona de nuestra reunión? - Uugh, para con esa forma de hablar que induce al vómito. El tono de la mujer sonaba como si estuvieran hartos de la mujer que había hablado primero. - Si una reunión civilizada es algo en lo que tienes que decir ‘oh querido, oh querido’ con voz hipócrita y mentirosa, entonces prefiero estar en una salvaje en una aldea de goblins. ¿Crees que no sé qué juegas salvajemente con minotauros por la noche, zorra? Señorita puta, deberías cambiarte los labios de arriba tanto como los de abajo o hacer que los de abajo sean tan femeninos como los de arriba. - ¿Qué puedo decirle a una mujer que cotorrea como un búfalo de agua en celo? Mis queridos Señores Demonio. La mujer que hablaba en tono apropiado salió al centro del salón de baile. Por fin pude verle bien la cara. Inmediatamente la reconocí, se trataba de Paimon quien ocupa el Rango 9 entre los Señores Demonio. El individuo que destruyó a numerosos jugadores como la hermosa reina súcubo, su pelo rojo. Incluso yo me había enfrentado a un Game Over después de ser atrapado por ella. Se me hacía raro ver a alguien así en la vida real después de haberla visto sólo a través de sus ilustraciones. - También creo que discutir un tema aburrido durante el baile de la primera noche de la reunión no es muy apropiado. ¿No sería mejor compartir primero una comunión? Tiempo y espacio para que la gente se cree más rencores entre sí o llegue a un acuerdo, ¿no sería esto necesario? Miró a su alrededor. En ese momento, me invadió una sensación premonitoria. Sentí que me miraba directamente. - Sin embargo, hay algo de lo que debemos ocuparnos de antemano. Hay un asesino que ha matado a nuestro prójimo que está presente, después de todo. No hay posibilidad de que podamos tener una relación cordial con ese individuo. Mi presentimiento era cierto. Definitivamente me estaba fulminando con la mirada. - Aunque era faltón y vergonzoso, Andromalius era pariente nuestro. Uno de los únicos 72 Señores Demonio que existen. Creo que todos saben perfectamente cuánto peso tiene el acto de asesinar a un Señor Demonio. Numerosas miradas siguieron su línea de visión hacia mí. Tragué saliva involuntariamente. - Creo que debemos pedir cuentas al Señor Demonio Rango 71 Dantalian antes de comenzar la reunión y el baile. Así que, por este motivo, yo, Señor Demonio Rango 9 Paimon, solicito formalmente una audiencia aquí y ahora.

≡≡≡≡≡≡≡≡≡≡≡≡≡≡≡≡≡≡≡≡≡≡≡≡≡≡≡≡≡≡≡≡≡≡≡≡≡≡≡≡ Si encuentras errores déjanos las correcciones en un comentario abajo, servirán para mejorar la calidad de la serie.

DD - Capítulo 37

Capítulo 37
La Noche de Walpurgis (II)
Traducción y edición: Sho Hazama
Corrección: Zura ja nai, Lord
- Sé que Su Alteza ha venido aquí de vacaciones para recuperarse de su cansancio físico y mental, pero, por favor, hágalo con moderación. - Pero mira. Hice un montón de dinero... Lapis me fulminó con la mirada. Sin querer, me puse firme. - Eso no es algo de lo que presumir. ¿Cómo podría un Señor Demonio juntarse con un grupo de apostadores y tomar su dinero? Esto sólo traerá problemas a la reputación de Su Alteza. De ninguna manera podría ser positivo. No tenía una excusa. Lapis no me criticó bajo el contexto de que las apuestas en sí fueran malas, sino que me advirtió sobre la influencia negativa que tendrá en mi imagen. Y tiene razón. - Imaginemos que el Señor Dantalian termina en una mala situación en el futuro. En ese momento, la gente criticará a Su Alteza diciendo que sólo cayó en tal estado porque se hizo adicto al juego. Lo mismo ocurrirá aunque tengas éxito. La gente hablará mal de usted diciendo que sólo tuvo un poco de suerte mientras apostaba. - Uugh. Ella tenía toda la razón. - ¿Cuánto ganaste? - Aproximadamente 4.000 monedas de Oro. - ...Has ganado mucho, eh. Lapis parecía un poco enojada. Me aconsejó que donara 3.000 monedas de Oro al pueblo. No había forma de negarme. La escuché y generosamente donaba ese dinero a un orfanato. Sorprendentemente, no me sentí reacio a donar el dinero. Tal vez fuera porque también me pareció mezquino utilizar las ventanas de estatus para quedarme con el dinero de aquellos apostadores. La gente de Niflheim empezó a apreciarme aún más gracias a mi donación. Tras escapar del casino, volví a vagar por Niflheim. Incluso visité el barrio rojo de los demonios al que me llevó Vuffoet la última vez. Había muchas prostitutas de distintas razas en las terrazas haciendo señas a los peatones para que se acercaran, pero cuando una prostituta goblin dijo con una voz aguda. - ¡Oh, Dios mío, Su Alteza Señor Demonio! ¡Venga a descansar aquí! Aprendí que había Señores Demonio pervertidos que no discriminaban y disfrutaban de los placeres carnales con todas las razas. Por ejemplo, el Señor Demonio de rango 12 Sitri es famosa por sus preferencias sexuales únicas y disfruta teniendo relaciones sexuales con gente de varias razas a la vez. Así transcurrió mi tiempo de descanso. Había llegado el día en que se reunían los Señores Demonio. - Hoy no puedo hacer excepciones. Debes llevar esta ropa. - No, no quiero. ¿Llevar esa ropa? Prefiero morderme la lengua y morir. - Este color ha estado de moda recientemente en el continente demoniaco. En general, señor Dantalian es demasiado distante cuando se trata de su atuendo. Aunque es aconsejable no estar demasiado apegado a su apariencia externa, hay un mínimo de etiqueta que uno debe mantener durante una ocasión como ésta. Lapis y yo estábamos en una boutique donde se exponían numerosas prendas de ropa. De todos los trajes que teníamos delante, Lapis eligió un abrigo de color marfil. Me dijo que me lo pusiera sobre un chaleco rosa. ¡Un abrigo marfil y un chaleco rosa! Alguien tiene que revisar seriamente el sentido de la belleza de Lapis. Es imposible que esto fuera tendencia en esta época. ‘¿No era este un atuendo que normalmente verías llevar a algún aristócrata excéntrico en una obra de arte de la época rococó?’ - Prefiero llevar un traje limpio como tú. - El traje negro que llevo es para plebeyos. No es algo que deba llevar un Señor Demonio. Lapis habló con severidad. Era la primera vez que la veía tan testaruda. Incluso como alguien que usaba ropa como la de los hippies en mi mundo original, no me gustaban las ropas multicolores que eran inútilmente elegantes. Casi me dan asco. - Francamente hablando, el señor Dantalian tiene un gusto terrible para la ropa. - ... ‘¡No puede ser! No soy yo el que tiene un gusto terrible, ¡es esta época!’ - En cualquier caso, déjame la coordinación a mí. Para empezar, elegiré el color de tu ropa y luego enviaré una carta a la doncella que será tu compañera de velada. Normalmente, los hombres combinan sus atuendos con las mujeres, pero los Señores Demonio son una excepción. - ¿Eh? ¿Una pareja? - Hay un baile el primer día de la reunión. Naturalmente, Su Alteza el Señor Demonio debe escoltar a una doncella. Era la primera vez que oía esto. - Oye. Soy terrible bailando. ¿Y qué quieres decir con una pareja? ¿Cómo podría conseguir una? - No tienes que preocuparte por eso. El baile no es más que una formalidad y en realidad se parece más a un banquete. El baile es voluntario hasta cierto punto. Tampoco te preocupes por tu pareja. La Firma Keuncuska ya ha reunido un surtido adecuado de damas para Su Alteza. Lapis sacó entonces un pergamino como si lo hubiera preparado para este momento. En él estaban escritos los datos personales de varias mujeres. A continuación, repasó los nombres y dio una breve explicación de cada uno de ellas. - Recomiendo a este individuo. Es la hija del Archiduque del Infierno del Veneno. Aunque a Señor Dantalian le falta un poco de estatus para ser el socio de la estimada hija de un Archiduque, mis superiores en la Firma Keuncuska se esforzaron activamente para arreglar esta asociación por alguna razón. Es una oportunidad para ganar conexiones personales. - Ajá. - Esta persona también es buena. Como es hija de un conde subordinado del Archiduque del Infierno Vacío, no sólo su belleza es notable, sino que también tiene influencia en la alta sociedad. Puedo asegurarte que si tomas a esta dama como tu amante, será increíblemente beneficioso para ti en el futuro. Me quedé sorprendido. - ¿Cómo? ¿Cómo mi amante? - No es escandaloso que un Señor Demonio tenga varias amantes. En todo caso, puede ser fuente de orgullo. La siguiente candidata es... Continuó la presentación de todas las mujeres. Yo estaba completamente aturdido. Esto es algo que no tiene relación con mi vida normal. ‘Además, ¿tengo que hacer compañera a una mujer que no conozco de nada y dar vueltas con ella durante todo un día? ¿Amante? ¿Qué se supone que es eso?’ - ¡Espera, espera! Lapis, deja de hablar un momento. Estoy siendo abrumado. Dejemos de lado todo el asunto de la amante por un momento. Digamos que participo en este baile. Entiendo la razón por la que tendría que elegir una compañera. Sin embargo, ¿por qué es la Firma Keuncuska la que elige a mi pareja? Lapis estaba a punto de decir algo, pero hice un gesto con la mano para interrumpirla. Podría adivinar por qué lo hacen. Lo más probable es que hayan informado a los superiores de la compañía de que estoy utilizando el asunto de Andromalius para amenazarles. Probablemente quieren que haga la vista gorda al asunto conectándome con alguien de influencia. Esto podría parecer un premio para otras personas, pero, por desgracia, no estoy nada contento con esto. Está claro que incluso estas hijas de personas influyentes son estrechas aliadas de la empresa Keuncuska. Harán lo que sea para restringirme atándome una amante. En otras palabras, no son más que manzanas envenenadas que sólo parecían atractivas por fuera. - ...Pero Señor Dantalian. A pesar de oír mi deducción, Lapis seguía insistiendo en que debía elegir una compañera. - También es cierto que, a través de esto, no sólo podrás ganar naturalmente a una persona de influencia de tu lado, sino que también pondrás a la Firma Keuncuska completamente de tu lado. Puede que el señor Dantalian haya ganado mucho dinero con las Hierbas Negras, pero su facción sigue siendo débil. Si usted es capaz de ganar con tacto la protección de una persona de influencia también, entonces nadie sería capaz de mirarlo hacia abajo. - Hm. Su sugerencia también tenía sentido. Me quedé pensativo. Mi primer y principal objetivo es sobrevivir. Mi segundo objetivo es “completar” este mundo... En otras palabras, si me guío por lo que VenusPanties dijo, tengo que conquistar este mundo. Si considero estos objetivos, entonces recibir la fuerte protección de alguien parece una decisión sabia. Al convertir a la hija de una persona influyente en mi amante, puedo utilizarla y, en última instancia, traicionarla más tarde con el fin de dejarlos de lado por una facción aún más grande... Definitivamente, esto tampoco es una mala idea. Lo más probable es que la otra parte también se acerque a mí para utilizarme. No pueden quejarse de una relación en la que nos usamos mutuamente. Sin embargo. - Lapis. Déjame decirte cómo me siento sinceramente en este momento. - Estoy escuchando. - Sinceramente, no confío en poder hacerlo. Lapis ladeó la cabeza. - ¿Perdón? - Si eres tú quien me ha estado observando más que nadie, deberías saber que soy una persona fundamentalmente inestable. No siempre fui así. ¿Lo llamaste síndrome del Señor Demonio? Es eso. Me convertí en esto porque he sido capaz de sentir las emociones de los demás como un Señor Demonio. Mi rabia y la alegría de otra persona están reunidas en un solo lugar dentro de mí. Es un completo desastre. La expresión de Lapis se ensombreció un poco. - Pero... ¿no fuiste capaz de encontrar la estabilidad después de venir a Niflheim? - Esto es sólo una medida temporal. Por lo que puedo ver, esto no es más que el principio de mi depresión. Quién sabe cuánto tiempo podrá mi mente soportar estas emociones caóticas. Confesé con sentimientos. Las emociones de preocupación de Lapis se me transmitían mientras lo hacía. ¿Hay realmente alguna diferencia entre los sentimientos encontrados y la preocupación? Las dos emociones son casi lo mismo. No hay mucha diferencia. Era difícil distinguir qué parte de la emoción que sentía ahora era mía o de Lapis. - Yo tampoco sé lo que va a pasar. De lo único que estoy seguro es que el equilibrio es necesario. - Equilibrio, ¿verdad? - Necesito tiempos de descanso. En el exterior, debo librar batallas mientras leo activamente las emociones de los demás o ir a la guerra. Eso es evidente. Sin embargo, también debo poder descansar tranquilamente en mi habitación de Señor Demonio y no tener que preocuparme por las emociones de los demás. Un lugar donde descansar mi mente agotada. En ese sentido, el casino era bastante estupendo. Cada vez que ganaba, me sentía feliz y los demás, tristes. Siempre hay una clara distinción entre las emociones como resultado de una victoria o una derrota. No tenía que esforzarme por distinguir el límite entre los demás y yo. Por supuesto, lo mejor es estar solo en mis aposentos, pero eso es increíblemente aburrido. - ¿Y aun así tengo que convertir en mi amante a una persona de la que desconozco sus intenciones? No tengo forma de saber si trabaja por el bien de su casa o de Keuncuska. Así, una vez más tendría que volcarme en preocuparme por las emociones de otra persona. - Señor Dantalian. Lapis me detuvo de repente. Esto era algo que ella increíblemente rara vez hacía. - ¿Eh? - Cuando estás conmigo... ¿también te sientes así? Sentí ansiedad desde ella. Hace tiempo que descubrí que Lapis tiene todo tipo de emociones detrás de su rostro impasible. Aunque pasa la mayor parte del tiempo como una mujer fría, de vez en cuando me muestra su lado humano. Es cómodo estar cerca de ella, ya que siempre está tranquila. Ya que rara vez me transmite otras emociones particulares. Además, como no es completamente aburrida como una muñeca, de vez en cuando nos entendíamos. Ella mantuvo la distancia perfecta conmigo. Me reí ligeramente. - No. Continúa a mi lado. - Entendido. Lapis respondió con calma. Me di cuenta de que se sentía aliviada por dentro, pero no hacía falta que me esforzara en señalárselo y avergonzarla. A pesar de mi aspecto, soy un hombre muy considerado. Sin embargo, la gente no parece darse cuenta de ello. Habló en tono preocupado. - Entonces esto va a dificultar la elección de pareja para el baile de mañana. - Cierto. Eso también es un problema...Mm, ¿a quién le importa realmente? Puedes ser mi pareja, Lapis. - ... Hubo un momento de silencio. - ¿Disculpa...? - Eso lo resuelve. Con esto, este problema ya está resuelto. Sólo hace un segundo que se me ha ocurrido esta idea, pero sigue siendo una solución decente aunque lo piense detenidamente. Por una razón u otra, la Firma Keuncuska quiere convertirme en su aliado. Rechazar completamente a todos los candidatos no sería prudente. Convirtiendo a Lapis, un empleado de su empresa, en mi socio, puedo transmitir el mensaje de que no tengo intención de convertiros en mis enemigos. Además, esto también expresará el hecho de que no tengo intención de moverme según sus planes. Es bueno porque sabrán que tengo la intención de cooperar con ellos, no perjudicaré mi posición, y mi estado mental estará bien ya que no tendré que andar con una completa extraña. Es perfecto. - Dijiste que es costumbre que los hombres combinen su atuendo con las mujeres, ¿verdad? Date prisa y elige un vestido. Yo generosamente haré coincidir mi atuendo con el tuyo. - Su Alteza. Soy un medio súcubo. Incluso si fueras acompañado por un súcubo de sangre pura, el impacto que tendría en tu reputación como Señor Demonio sigue siendo preocupante. Así que si llevas a alguien como yo... - Oh cielos. Vuelves a hablar de sangre pura y sangre mezclada. Me voy a hartar de este tema si lo vuelves a mencionar. Lo digo con un plan en mente, así que sigue mis órdenes obedientemente. Atravesé la boutique y busqué un vestido que le sentara bien a Lapis. Ella me siguió asustada. No paraba de hablar de mi dignidad como Señor Demonio y lo que fuera, pero la ignoré. - ¿Qué tal este? Un vestido blanco puro. Es lujoso y elegante así que es perfecto. - ...Eso es demasiado refinado para un baile. No, lo que es más importante, Señor Dantalian, todavía no lo he aceptado. - Entonces, ¿qué tal este vestido negro? El adorno se ve espléndido y digno al mismo tiempo. Parece apropiado para la pareja de un Señor Demonio. - Su Alteza. El tono de Lapis era bastante urgente. Continué haciéndome el tonto. Después de esto continué durante aproximadamente 3 horas, Lapis finalmente se rindió, una vez que la amenacé con quedarse sin pareja si seguía resistiéndose. Al final, después de regalarle a Lapis un vestido negro a medida, opté por ponerme un abrigo y un chaleco negros totalmente lisos con el pretexto de hacer juego con el atuendo de mi compañera. - Aaaah... para que una reunión importante se convierta en esto... Lapis soltó un suspiro y murmuró. Sin embargo, me alegré mucho de no tener que volver a llevar un atuendo excéntrico. No arruinar el humor de un cliente también es un deber importante para los comerciantes, ¿sabes?

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lunes, 2 de octubre de 2023

DD - Capítulo 36

Capítulo 36
La Noche de Walpurgis (I)
Traducción y edición: Sho Hazama
Corrección: Zura ja nai, Lord
- Me pregunto cuál habrá sido su última razón. Ivar murmuró. Iba de un lado a otro de la habitación. Era una costumbre suya que se manifestaba cada vez que contemplaba algo agradable. Cuando pensaba en algo desagradable, se sentaba en su silla y miraba por la ventana. Hacía mucho tiempo que el cerebro de Ivar no se estimulaba, así que ahora estaba un poco excitado. Recordó las palabras que Dantalian le había dicho burlonamente.

- Está bien que te lo diga yo. Al fin y al cabo, eres cómplice.
Ivar soltó una risita. - Cómo se atreve a amenazar a la Compañía Keuncuska. Inmediatamente supo qué significado subyacente tenía el “eres cómplice” de Dantalian. Si Ivar no estuviera fingiendo ser un joven inocente, no habría dado una respuesta tan a medias. Incluso mientras gritaba a Dantalian presa del pánico, la cabeza de Ivar evaluaba rápidamente la situación. Llegó a una conclusión en el acto. - Esto es definitivamente más que suficiente para ser utilizado como material de chantaje contra nosotros. ¿Un empleado se quedó sin hacer nada cuando podría haber salvado a un Señor Demonio? Además, era un empleado de la empresa Keuncuska, famosa por hacer negocios con los Señores Demonio. Aunque la Firma Keuncuska es la mejor compañía del continente demoniaco, hay muchas empresas que podrían reemplazarla. Si la fiabilidad de Keuncuska disminuye, los Señores Demonio cambiarán de inmediato su asociación a otra empresa. ¿Quién querría comerciar con una empresa que potencialmente podría matarle? Para los comerciantes, la confianza es más valiosa que la vida. En cuanto Vuffoet, no, Ivar se dio cuenta de que la otra parte había puesto sus manos en el salvavidas de la empresa, un sudor frío le recorrió la espalda. Además, la otra parte es un Señor Demonio al que no pueden enfrentarse de la forma habitual. A pesar de todo, dijo que era una broma. ‘Por lo tanto, en lugar de amenazarnos... El Señor Demonio Dantalian quiere crear una estrecha relación mutua con nosotros.’ Ivar interpretó así las palabras de Dantalian.

- Pasaré por alto este error; sin embargo, muéstrame a cambio tu sinceridad a tu manera.
Ivar se dio cuenta de otra cosa al mismo tiempo. El Señor Demonio Dantalian no le dijo a Vuffoet, su personalidad falsa, que informara a la empresa de su amenaza. Todo lo que hizo fue dar una vaga alusión. ¿Qué podía significar? - Estaba probando la capacidad de nuestra empresa. Dantalian estaba probando... si el individuo enviado por la empresa se había percatado de su amenaza o no, para evaluar si el empleado era competente o no. Luego se rio y dijo que era una broma. A fin de cuentas las cosas le habrían ido bien si se hubiera limitado a transmitir su amenaza, así que ¿por qué se esforzó tanto en ponérselo difícil? Los Señores Demonio tienen el poder de gobernar a los demonios. Podía haber usado ese poder para dar más fuerza a su amenaza y, sin embargo, eligió un camino más complicado. El vampiro que había vivido durante más de 2.000 años pudo darse cuenta de que había otro verdadero motivo detrás de las acciones de Dantalian. - Si no cumplimos sus expectativas, entonces pretende comerciar con otra compañía... Ivar sonrió. Era una sonrisa de los fuertes. Tenía confianza más que suficiente para mostrar una sonrisa al ser desafiado por alguien. Es obvio que la información sobre cómo la empresa Keuncuska observó ociosamente la muerte de un Señor Demonio podría venderse a un alto precio. Las compañías competidoras probablemente contenderían para dar la bienvenida a Dantalian como su cliente. A diferencia de cómo es tratado como un cliente normal en la Empresa Keuncuska, sería tratado como un cliente VIP en esas empresas competidoras. - Esta es la tercera razón del Señor Demonio. Es bastante elaborado. Lo más interesante es el hecho de que la otra parte manejó esta elaboración casualmente. Como Dantalian había dicho, amenazar a la Firma Keuncuska no era su primera ni su segunda razón. No era más que la última razón. - Esto significaba que nos estaba amenazando como un pensamiento secundario. ‘Primero mantener su autoridad vengándose de quien le insulta. Segundo obtener fama y honor tratando con el individuo que ha sido una molestia general para la ciudad. Y por último obtiene un beneficio al amenazar también a su compañero que había cometido un error.’ - Juju. Ivar se rio. No pudo contener la risa. Sintió una sensación de sublimidad como si estuviera mirando la pintura de un gran artista. Con un solo movimiento, al matar a Andromalius, obtuvo autoridad, fama e incluso beneficios. El Señor Demonio Dantalian había calculado todo eso en un breve instante de tiempo. - Muy bien, entonces. Aceptaré tu amenaza con mucho gusto. Ivar sonrió. Le intrigaba el hecho de que un Señor Demonio no utilizara una táctica prepotente, sino que se limitara a la pura estratagema. - Un Señor Demonio que no es como un Señor Demonio. La última vez fue la peor epidemia de la historia, y ahora... Ivar murmuro para sí mientras miraba hacia delante. La habitación estaba a oscuras. Para un vampiro como él, la oscuridad era increíblemente reconfortante. Por alguna razón, hoy no sólo se sentía reconfortado por la oscuridad, sino también por un vago sentimiento de esperanza. Por supuesto, era sólo una esperanza. Una esperanza agradable. - Me pregunto por qué razón va tan lejos para obtener nuestro apoyo. Naturalmente, no recibió respuesta. Y sin embargo, Ivar asintió como si hubiera recibido una respuesta mientras también pensaba en varios métodos diferentes para hacer de Dantalian un aliado absoluto. En ese mismo momento, en los aposentos de Dantalian... - ¿Por qué mataste a un Señor Demonio? ¿Estás loco? - N-No. ¡Lapis! Como dije, escúchame. - Los Señores Demonio deben ser seres sagrados. Me resulta desconcertante que tú mismo rompas esa inviolabilidad. ¿Eres acaso un pervertido que disfruta recibiendo dolor intencionalmente? ¿Es así? Sinceramente, es despreciable. Estoy decepcionada. No tienes remedio. - Uu... Lo siento... Si Ivar supiera que Dantalian estaba siendo seriamente regañado por Lapis, lo más probable es que estuviera sacudiendo la cabeza en lugar de asentir.
* * *
‘He jugado todo lo que he querido durante una semana.’ Aunque Niflheim sea comparable a la Johannesburgo de la Tierra, donde el crimen y la violencia ocurren casi a un ritmo continuo, un Señor Demonio nunca se verá amenazado. Tener el título de Señor Demonio era como tener un pase libre para entrar en un sangriento parque de atracciones llamado Niflheim. ‘Además, los ciudadanos de Niflheim, desde mercaderes hasta incluso delincuentes, eran todos amables conmigo. La noticia de la muerte de Andromalius se había extendido como una tela de araña que había llegado hasta los rincones más recónditos de la ciudad.’ ‘Ese bastardo de Andromalius había cosechado tanto odio en toda la ciudad que demonios al azar se me acercaban para darme las gracias. En toda mi vida, nunca esperé que me diera las gracias un matón. Además, era un matón con cabeza de lobo.’ Disfrutaba especialmente frecuentando el casino. El continente demoniaco también era abrasador bajo el calor del verano, pero el aire del interior del casino siempre era fresco. Los magos contratados por el casino estaban trabajando en una rotación para lanzar magia de hielo, pero realmente es un desperdicio de dinero. Pero, ¿qué importa? Puedo evitar el calor del verano gracias a ello. - Camarero. - Sí, Su Alteza. - Deme un refrescante vaso de cerveza. - Como desee, Su Alteza. Un camarero goblin de aspecto limpio se inclinó ante mí cortésmente. Normalmente, las bebidas eran gratis en el casino. Tampoco tenías que desviarte del camino para ir a buscar algo tú mismo. Bastaba con llamar a cualquiera de los camareros que deambulaban por el casino y decir “un vaso de cerveza” con mal acento. Lo importante aquí era la mirada. Puede que la otra parte sea un goblin, pero ni siquiera ellos pueden evitar quedar encantados conmigo si les dirijo una leve sonrisa. - Aquí tiene, Alteza. Recibí la jarra de cerveza con elegancia. Un refrescante trago de hefeweizen, el cual fluyó por mi garganta. Casi dejé escapar un refrescante suspiro. Por desgracia, al estar ante los ojos de tanta gente, tenía que mantener un mínimo de prestigio. ‘Es genial, puedo jugar y ganar dinero. ¿Es esto quizás... el cielo? ¿Por qué llevé una vida ejemplar en mi mundo original y construí un muro mental contra los casinos?’ Me reí entre dientes de mi tonto yo del pasado. Incluso el estrés extremo que experimenté como Señor Demonio había desaparecido hacía mucho tiempo. Puedo decir con certeza que nunca he sentido tanta felicidad como ahora. Adiós, mi yo del pasado. Adiós, a mi vida infernal en las mazmorras. Y bienvenidos, mis días celestiales. - Su Alteza. Parece que casi no le quedan movimientos. Un hombre lagarto sentado en el lado opuesto de la mesa rio entre dientes. Tenía dos cartas boca abajo sobre la mesa y estaba haciendo rodar hábilmente una ficha de apuestas entre los dedos de la mano derecha. La forma en que jugaba con la ficha me recordaba a mis días de primaria, cuando mis amigos competían por ver quién hacía mejor los trucos con el lápiz. Le dediqué una sonrisa despreocupada. - Me lo pregunto. Puede que no me queden movimientos, o puede que me sobren. En una nota similar, parece que dos pares es el único movimiento que tienes ahora. - Es demasiado pronto para hacer alguna afirmación. - Hm. Como pensaba, ¿estás apuntando a una escalera? La tez del hombre lagarto cambió por un breve momento. El borde de su ojo izquierdo se había movido ligeramente. Alguien debería hablarle de ese hábito. - ¿Estoy en lo cierto? Debería aconsejarte que, si es posible, no intentes ganarme en una batalla de palabras. - Jeje, no sé de qué estás hablando. El hombre lagarto sonrió sarcásticamente. Como esperaba, había dado en el clavo. Entonces tiré mis cartas en el centro de la mesa. - Me retiro. - ¡Malditooo! El lagarto se levantó bruscamente. - ¡Tenía una escalera! ¡Sólo gané 5 monedas de Oro cuando por fin tuve una escalera! ¡Apenas 5 monedas de Oro! ¡Además, ha pasado tanto tiempo desde la última vez que tuve una escalera! El hombre lagarto se puso a gritar. Los otros jugadores que nos rodeaban se rieron. Como todos éramos clientes habituales del casino, nos habíamos hecho íntimos amigos. Naturalmente, ninguno de nosotros era de la misma raza y entre los presentes había desde un abuelo hasta un niño, pero todos nos parecíamos en el sentido de que éramos jugadores. - Ríndete. No puedes engañar a Su Alteza. - Sí, si Su Alteza no fuera un Señor Demonio, probablemente habría nacido como un embaucador. Actualmente estaba jugando al póquer con estos individuos. En realidad, pasaba la mayor parte del tiempo jugando al póquer en el casino. En lugar de los juegos que se basaban puramente en la suerte, el póquer dependía más de las habilidades de los demás. Aunque, como sigue siendo un tipo de juego, el resultado de una partida de póquer también lo determina la suerte. Naturalmente yo fui una excepción. - Su Alteza, ¿está seguro de que no ha aprendido a leer la mente de los demás o algo así? ¿Cómo eres capaz de ver a través de la gente cada vez? - No acuses a un hombre inocente. Mostré una sonrisa amistosa mientras hablaba. - No existe tal cosa como leer la mente. Eso no es más que una superstición. - ¡Tienes razón, pero... rayos! Esto es muy raro. El hombre lagarto refunfuñó mientras volvía a sentarse. No es que no lo sintiera o algo así. Al fin y al cabo, les leo la mente. Se estaba mostrando muy descaradamente ante mí.

Nombre: Riker
Facción: -
Raza:
Hombre lagarto
Alineación:
Neutral (-15)
Nivel:
31
Fama:
72
Trabajo: Apostador (B+)
Estadísticas
Liderazgo:
7
Poder:
25
Inteligencia:
24
Política:
11
Encanto:
10
Técnica:
47
Afecto: 32
Pensamiento Actual: ‘¡Maldita sea, hoy también voy a acabar perdiendo dinero!’
El acto de deshacerme de Andromalius impactó positivamente en mi imagen básica para la gente de aquí. Incluso para los jugadores. Por lo que me contaron, había causado un desastre en el casino cientos de veces. Incluso si perdía en una partida, utilizaba su autoridad como Señor Demonio para llevarse el dinero por la fuerza. Incluso si un pozo de juego es un lugar donde se juntan pedazos de basura, eso era algo que iba más allá de la basura. En otras palabras, una mega basura. Gracias a eso, pude aumentar fácilmente sus puntos de afecto a 20. ¿Debería llamar a esto un efecto dominó? Una vez que mantuve una conducta cortés durante las partidas de póquer, el afecto de todos hacia mí aumentó enormemente. Era igual a la imagen negativa que Andromalius había cosechado hasta ahora, pero al revés. ‘Lo más probable es que nunca se enteren de que es por eso por lo que han estado perdiendo, jajaja.’ - Da igual. ¡Próxima ronda! ¡Empecemos la siguiente ronda! - Intentando blofear cuando no tienes nada. Tsk tsk. Por eso se te está escapando la suerte. - Te aseguro que se va a retirar en cuanto tenga sus cartas. - Qué casualidad. Yo también pienso lo mismo. - ¡Malditos bastardos! Volvieron a estallar las carcajadas. No era sólo nuestra mesa, sino que la gente de la mesa de al lado también se reía. El croupier vampiro hizo todo lo posible por contener la risa mientras nos daba las cartas. Yo seguí jugando mientras mantenía un comportamiento maduro y humorístico. Si tuviera que hacer una comparación, mi mente era como la de un lago infinitamente puro y tranquilo. La representación misma de la calma. Esta gente nunca podrá ganarme. Como mínimo, tenían que desafiarme libres de todas sus ideas y pensamientos si querían tener alguna oportunidad. Si todavía quieren jugar después de haber llegado a tal estado, es decir. Fue en el momento en que el crupier estaba a punto de dar la vuelta a la primera carta. - Ahora bien, la primera... - ¡Su Alteza! ¡Ya están aquí! ¡Esa persona está aquí otra vez! Un camarero goblin se acercó a nuestra mesa y me habló nerviosamente. Solté un gritó mental. Tenía que salir de aquí cuanto antes. A duras penas conseguí mantener la compostura en el exterior mientras me levantaba lentamente. Los demás jugadores me observaban con miradas en parte tristes y en parte alegres. La parte triste se debía a que disfrutaban de mi compañía, pero la parte feliz procedía naturalmente del hecho de que un oponente formidable estaba abandonando. - Pido disculpas. Me despido. Digamos que este partido lo pierdo yo. - ¡No hay nada por lo que disculparse! El hombre lagarto sonreía alegremente. Sus emociones estaban escritas en toda su cara, así que ni siquiera tuve que mirar su estado. Era como si hubiera aprendido a leer la mente de la gente. - Siéntase libre de volver cuando quiera, Su Alteza. Estaré aquí todos los días excepto los viernes. - ¡Adiós! - Invítanos también a una ronda de cócteles la próxima vez. Les hice un gesto con la cabeza antes de seguir rápidamente al camarero. Atravesamos una puerta que estaba en una esquina del casino. Ante nosotros se extendía un pasillo estrecho y sinuoso. Los pasos del camarero eran apresurados, pero su tono seguía siendo seguro. - La salida de emergencia está por aquí. Sólo los empleados conocen este pasadizo. - Qué alivio. - Ni siquiera esa persona debería conocer este lugar. Ya casi hemos llegado. Si doblamos esta esquina, entonces la salida... Chirriamos hasta detenernos. Nuestros pies se detuvieron en medio del camino torcido. Podía sentir el shock del camarero; sin embargo, no podía preocuparme por las emociones del camarero en este momento. Había una enorme tormenta de emociones acercándose a mí desde delante, después de todo. Delante de nosotros estaba Lapis con su habitual traje negro. - Hola, señor Dantalian. Lapis inclinó la cabeza cortésmente. Era más aterrador porque era cortés. Sobre todo porque sabía muy bien cuál era el estado de su mente en ese momento. Un caos incomprensible ocupaba el pecho de Lapis. Sentía hostilidad, rabia, odio, desprecio, decepción, arrepentimiento y cualquier otra emoción negativa estaban allí. Además, Lapis parecía carente de emociones. Completamente impasible, sin fisuras. Una falta de emociones que me recordaba a una estatua de mármol. Realmente daba mucho miedo. No pude ocultar el temblor de mi voz. La cara de póquer que había mantenido antes se había desvanecido sin dejar rastro. - A-Ah. Lapis. ¿Buen trabajo? - Sí. Estoy trabajando bastante. También tengo bastante curiosidad por saber quién es la razón por la que estoy trabajando tanto. Lapis lo miró impasible. Los hombros del camarero se estremecieron en cuanto se encontró con su mirada. - S-Su Alteza, seguiré mi camino entonces... - ¡No! ¿¡Tratas de abandonarme y huir!? Lapis habló fríamente en el instante en que intentaba aferrarse al camarero. - ¿Huir? ¿De qué podrían estar huyendo, señor Dantalian? - ¿Eh? Ah, quiero decir... - Creo que no es posible que estés diciendo que huyen de mí. - ¡Claro! ¡Por supuesto! ¿No es obvio? ¡Jajaja! Mientras estaba siendo interrogado por Lapis, el camarero aprovechó esa oportunidad para escabullirse. Ese escurridizo bastardo, ¡probablemente tenga una montaña de monedas de Oro de todas las propinas que recibió de mí! Al final, sólo quedamos Lapis y yo en el estrecho pasillo. - Jaja, jajaja. - ... - Ja ja... - ... La quietud cayó sobre nosotros. Pasó un momento sumamente doloroso, parecido a la ansiedad que sentirías en el momento en que tu madre se entera de que has perdido todo tu dinero apostando. Además, el dinero que habías perdido era también el que te habían preparado tus padres para pagar la matrícula de la universidad. Al final no pude soportar el dolor mientras bajaba la cabeza. - Lo siento... - Aaaaah. Un suspiro increíblemente largo atravesó mis oídos. Un sentimiento de culpa se clavó profundamente en mi cuerpo al mismo tiempo. Era realmente como el suspiro de una madre.

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DD - Capítulo 35

Capítulo 35
Una Temporada en el Continente Demoniaco (VII)
Traducción y edición: Sho Hazama
Corrección: Zura ja nai, Lord
Hablé con la mayor sinceridad. - Me alegra mucho que hayas hablado con sinceridad. - Perdóname..., no me mates... - Por supuesto. ¿Qué razón tengo para desviarme de mi camino para matarte? - Poción, una poción curativa... Forcé a Andromalius a levantarse. - Desafortunadamente, no tengo algo como una poción conmigo. Pídeselo a otro. Pero primero, ¡debes levantarte y disculparte con el dueño de la cantina! Deberías respetar a tus mayores. Andromalius gimió con fuerza al levantarse por la herida del muslo. Le pregunté en tono preocupado si se encontraba bien. A pesar de mis palabras, no aminoré el paso y, naturalmente, tampoco tenía intención de hacerlo. Probablemente la otra parte estaba maldiciéndome en su cabeza. - Eso es todo lo que quiero de ti ahora. - De acuerdo. Le apoyé mientras salíamos de la cantina. Los demonios seguían en formación, pero cuando se dieron cuenta de cuál era mi objetivo, ya no desconfiaban demasiado de mis gólems. Caminamos hacia el viejo hombre gato que estaba mezclado al fondo de la formación. - ¡Tabernero! Este hombre dice que tiene algo de lo que disculparse. El hombre gato estaba visiblemente perplejo. Los otros demonios murmuraban entre ellos mientras miraban hacia aquí. Antes de darme cuenta, los espectadores habían aumentado y ahora había el doble de gente que antes de entrar en el bar. - S-Sí. - Parece que se ha equivocado porque aún no ha experimentado mucho del mundo. ¿No serás generoso y le perdonarás? Entonces, ¿qué estás haciendo? Date prisa y discúlpate. Sin previo aviso, aparté el brazo que utilizaba para sostenerle. Una vez lo hice, Andromalius no pudo resistir el dolor de su muslo al caer. Contuvo un gemido mientras se postraba lentamente. - Lo siento... Cometí un error. - ¡Ja! Pisé el dorso de la mano de Andromalius. - Auh, Auuuuah! - ¿¡Qué clase de disculpa es esa!? ¡Pon más sinceridad en ella! - Kuh, ¡lo siento! - Así es. Presiona tu frente contra el suelo. Así. - Lo siento, hicc, lo siento... Su disculpa continuó. Andromalius golpeó tanto la cabeza contra el suelo que su frente se cubrió de un amasijo de pelo, sangre y tierra. Debía de haber mucha gente que albergaba odio hacia él, ya que los demonios que habían venido a presenciarlo se reían a carcajadas. Levantó la cabeza en cuanto oyó el sonido de las risas. Sus ojos llameantes miraron a los demonios. Se estremecieron. Sin embargo, en cuanto volví a pisarle la mano, no tuvo más remedio que soltar otro gritó y volver a bajar el cuerpo. La disculpa continuó hasta que el viejo hombre gato no soportó seguir mirando y nos dijo que ya era suficiente. - Dale las gracias al tabernero por aceptar tus disculpas. - Gracias. Hicc, muchas gracias... El viejo hombre gato asintió. Cuando comprobé sus emociones, aunque su hostilidad hacia la otra parte no había desaparecido por completo, ahora estaba más avergonzado por ser el centro de atención. Parece que quería salir de esta situación lo antes posible. Una oleada de tristeza debió invadirle cuando Andromalius empezó a llorar. No era diferente a un niño. Sentirse frustrado por ser castigado a pesar de haber hecho algo malo era una característica primordial de los niños. No tengo ni idea de cómo alguien así pudo convertirse en Señor Demonio y ser una molestia general para la gente de su alrededor. Decidí comprobar su estado.

Nombre: Andromalius
Aguante:
Ataque:
Defensa:
1/5
3
3
Sólo le quedaba 1 punto de Aguante. Seguía sangrando por el muslo, así que lo más probable era que pronto se le acabara la sangre. Le agarré de nuevo y tiré de él hacia arriba. Se tambaleó porque no podía mantener el equilibrio. - Bien, bien hecho. Esto debería ser más que suficiente. Ya puedes seguir tu camino. - ...Mu- muchas gracias... Usé mis manos para quitar la suciedad de sus hombros y rodillas. La cara de Andromalius estaba mortalmente pálida debido a la pérdida de sangre. Se inclinó ante mí antes de volverse hacia todos los demonios que se habían reunido aquí. Pidió ayuda en un tono frágil. - ¿Alguien tiene una poción...? Había fácilmente más de 30 demonios, pero todos mantenían la boca cerrada. Me di cuenta de que estaban deliberadamente callados. No había forma de que ninguno de estos demonios no tuvieran una poción cuando los conflictos y la violencia son algo natural en Niflheim. A pesar de ello, permanecieron en silencio. - Por favor, una poción... Te la pagaré más tarde. ¿Incluso un hechizo de curación serviría... alguien...? Numerosas miradas frías se centraron en él. Sólo oía susurros. No podía oír lo que decían, pero probablemente no era nada bueno. Las lágrimas corrían por las mejillas de Andromalius. Cuando se dio cuenta de que pedir ayuda era inútil, arrastró la pierna herida mientras avanzaba tambaleándose por la plaza. Se cayó sin poder dar más de un par de pasos. Andromalius se arrastró mientras gemía. La sangre de su muslo dibujaba una larga línea roja en el suelo. - Hkkuck... khk.. .hicc... Tenía ganas de fumarme un cigarrillo. No era porque sintiera remordimiento o porque sintiera lástima por él, simplemente pensé que un cigarrillo sería perfecto para un momento así. Es una pena que no pueda leer las emociones de otros Señores Demonio. ¿Qué está pensando este hombre en este momento? ¿Era el deseo desesperado de no morir lo único que pasaba por su cabeza en este momento? - Su Alteza. Vuffoet se acercó a mí y susurró. - Poseo una poción. - No se la des. - Pero este tipo de muerte es demasiado solitaria. - Así que te has convertido en un filántropo durante nuestro breve tiempo separados. Me reí entre dientes. - Personalmente creo que la muerte es algo solitario por esencia. - ... - Observa en silencio. Andromalius se arrastró un rato más antes de detenerse. ¿Debería felicitarlo por llegar al borde de la plaza? Su espalda aún se movía ligeramente hacia arriba y hacia abajo, por lo que parece que su respiración aún no se había detenido. Sin embargo, ni siquiera eso duró mucho. Cada señal de movimiento llegó a su fin. - Estado. Una ventana no apareció. Esto significaba que había muerto. Me di la vuelta. Elegí un camino al azar que salía de la plaza y caminé hacia él. Vuffoet me siguió sin decir palabra. Una vez que estuvimos fuera de la multitud, los demonios empezaron a gritar en voz alta cosas como. - Andromalius ha muerto. - Qué bueno, ya era hora. Caminamos por un estrecho callejón. No hubo palabras entre nosotros durante un rato. Vuffoet habló con cautela. - Uhm, ¿puedo preguntarte por qué te desviviste por matarlo? No me apetecía quedarme callado, así que le respondí alegremente. - Hay 3 razones. Primero, se había burlado de mí delante de muchos otros. Aunque soportaría que una persona con más autoridad se burlara de mí, no me quedaría callado y dejaría que alguien inferior a mí hiciera lo mismo. Además, también me había tratado como a alguien inferior a él. No puedo permitir que el nombre de Dantalian sea tratado a la ligera entre las masas. Un par de niños demonio ya debían de haber oído la noticia, pues corrían hacia nosotros desde el otro extremo del callejón. Los niños gritaron que un Señor Demonio había muerto mientras corrían rápidamente junto a nosotros. Un niño le decía al otro que se diera prisa y otro le decía que fuera más despacio. - Segundo, esta era una buena oportunidad para ganarme una buena reputación aquí en Niflheim. Una vez que la gente se entere de que había cortado al individuo que había sido una molestia frecuente, seguramente habrá algunos individuos que se ganarán una buena opinión de mí. Incluso es posible que haya alguien entre ellos que pueda ayudarme sustancialmente. Las impresiones son importantes para un rey. - ...Eso es correcto. Sin embargo, ¿está bien que digas tú mismo estas palabras? Vuffoet me miró con una mirada ligeramente dubitativa. - Está bien que te lo diga yo. Al fin y al cabo, eres cómplice. - ¿Cómplice? - No le salvaste a pesar de tener una poción, ¿no? Estaba desconcertado. - ¡Pero eso es porque Su Alteza decía...! - Tonterías. ¿Eres mi vasallo? Si vas a salvar o no a la persona que se está muriendo delante de ti es algo que sólo tú puedes decidir. Por lo tanto, dejarle morir es en última instancia tu responsabilidad. Me pregunto qué pasaría si empezara a correr el rumor de que la Firma Keuncuska ha dejado morir a un Señor Demonio. Vuffoet se quedó con la boca abierta. Poco después, recobró el sentido y gritó. - ¡Eso es una mentira! - Jajajaja, debiste ver tu cara, está claro que era una broma. - ... Felizmente, una brisa fría fluyó entre nosotros. Podía sentir una densa sensación de repugnancia de la otra parte. ‘Mm, me pregunto si se dio cuenta de que yo había amenazado indirectamente a la Firma Keuncuska. Sería estupendo que lo hiciera. Si no, entonces no tendría más remedio que transmitir la amenaza a través de Lapis. No quiero forzar un asunto tan problemático sobre ella.’ - Y la tercera razón, es un secreto. - ¿Cómo dices? - He dicho que es un secreto. ¿Por qué tengo que explicarte cada una de mis acciones? Usa tu propio criterio y echa un vistazo. Caminé hacia adelante mientras tarareaba. Podía sentir resentimiento detrás de mí, pero no me importaba. Aunque le dijera que había matado a Andromalius para matar al héroe o al menos para evitar que el futuro héroe despertara, no me creería. Espero que se devane los sesos por su cuenta para pensar en una buena razón. Es natural que un hombre tenga algunos secretos para ser encantador.
* * *
Por la noche, Vuffoet llegó a la sede de la empresa Keuncuska. Acababa de regresar de cenar en un restaurante tradicional con Dantalian. Aunque los platos de marisco que se presentaban en el restaurante eran deliciosos, él sinceramente no tenía tiempo para saborearlos todos. - Hola, señor Vuffoet. Le saludó una empleada de la recepción de la sede. Era una mujer tigre con una amplia y hermosa melena rubia. Como era lo bastante guapa para ser la chica de la recepción de la empresa y además era capaz de combatir en caso de emergencia, era alguien a quien él había contratado personalmente. Vuffoet le sonrió instintivamente con amabilidad. - Gracias por trabajar hasta tan tarde. - No te preocupes, al fin y al cabo es mi trabajo. La mujer tigre se sonrojó. Vuffoet ya sabía que la chica estaba interesada en él. Sin embargo, era necesario que fuera limpio en sus relaciones con las mujeres. Porque sabía que la empresa Keuncuska necesitaba una persona así. No, para ser exactos, este tipo de individuo era necesario para el dueño de la empresa. - Tengo que informarle algo al jefe. - Ah. Ya veo. La cara de la chica se tiñó de envidia. El jefe de la compañía, Ivar Lodbrok. Ese legendario Señor de los Vampiros estaba en la cima incluso entre los 7 ejecutivos de la Firma Keuncuska. Nominalmente, los ejecutivos actuaban como 7 presidentes iguales durante las reuniones, pero incluso esta mujer tigre sabía que eso era realmente sólo de nombre. Había individuos que se oponían al jefe Lodbrok; sin embargo, eran una minoría. El hombre que tenía delante era lo suficientemente prometedor como para presentar personalmente un informe al jefe. Aunque se sintió decepcionada por la brevedad de su encuentro con Vuffoet, le condujo hasta el dispositivo de teletransporte. Una vez que Vuffoet sacó su collar, el dispositivo de teletransporte empezó a emitir un resplandor rojo. Significaba que su teletransporte había sido aprobado. - Bien. Que pases una buena velada. - Uhm, señor Vuffoet. Si tal vez tiene algo de tiempo libre más tarde, entonces... uhm. La mujer habló vacilante. - ¿Puedo ofrecerle invitarle a cenar en algún momento en el futuro? - ¿Cena, verdad? - ¡Sí! Le estoy muy agradecida por todo lo que ha hecho por mí, y, bueno... yo también quería darle las gracias personalmente... La situación que temía había llegado a producirse. No era la primera vez que una joven se le confesaba. Hasta cierto punto, Vuffoet tenía que seguir siendo un joven brillante, cortés y con talento. ‘Aunque sé que este tipo de papel es necesario, es un poco molesto.’ Vuffoet respondió lo más amablemente posible. - Le pido disculpas. Sigo queriendo dedicarme a mi trabajo. - Ah... La cara de la mujer enrojeció rápidamente. Los tigres tenían fama de ser muy orgullosos. Vuffoet pudo adivinar que estaba muy avergonzada por haber sido rechazada. Para mitigar un poco su humillación, Vuffoet se apresuró a darle una excusa razonable. - La señorita Andelina es demasiado hermosa para alguien como yo. Además, como el jefe se está interesando por mí, no quiero perder esta oportunidad. Lo siento. - Ya veo. Tienes razón. Recuperó un poco la compostura. Estaba pensando en el futuro del joven que le gustaba. Ciertamente, recibir el interés del jefe de la firma Keuncuska era una gloria suprema y una oportunidad. Cuando se dio cuenta de que había obstaculizado su oportunidad, se sintió culpable, aunque sólo fuera un poco. Vuffoet sonrió finamente. - Me despido entonces. Me preocupan los problemas que podría pasar si hago esperar al jefe más tiempo. - ¡Ah, sí! Por supuesto. Lo siento, le he robado demasiado tiempo... - Tonterías. Yo también estoy encantado de haber podido conversar con la señorita Andelina. Vuffoet respondió mientras entraba en el dispositivo de teletransporte. Era un dispositivo pensado para una sola persona. Mientras la doncella parecía aturdida por el comentario de Vuffoet, éste le dedicó otra sonrisa antes de activar su magia. Una vez que lo hizo, su visión se llenó de una luz roja. El último piso de la sede de la empresa. Era un lugar al que una minoría muy reducida de personas podía acceder a través del dispositivo de teletransporte. Vuffoet recorrió el pasillo en absoluto silencio. Al final del pasillo había una puerta de madera. Era lujosa y tenía grabados símbolos un tanto extraños, pero que se adaptaban a las preferencias de los vampiros. Creeeaaak. No había nadie en la habitación. Vuffoet siguió avanzando sin dudar, como si estuviera acostumbrado a ello. Una vez que cruzó la habitación y llegó a la ventana, había más de una docena de ataúdes de vampiros alineados unos junto a otros en las inmediaciones. Eran ataúdes que incluso los vampiros hoy en día calificaban de anticuados y se negaban a utilizar. Sin embargo, a Vuffoet le gustaba dormir en un ataúd. Incluso hoy en día. ‘Justo como hace 1.000 años.’ Vuffoet se metió en uno de los ataúdes. La tapa se abrió y se cerró sin hacer ruido. Poco después, se abrió un ataúd diferente al que Vuffoet acababa de entrar. Un anciano se levantó. Se frotó la cara varias veces como si se la estuviera lavando. Miró hacia la ventana. El atardecer escarlata de Niflheim se extendía por los callejones. - Señor Demonio Dantalian... eres un personaje interesante. El anciano tenía el rostro de Ivar Lodbrok.

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