Capítulo 57
Aventureros de Rango E (XI)
Traducción y edición: Sho Hazama
Corrección: Zura ja nai, Lord
Corrección: Zura ja nai, Lord
- Aah... aaah... aah...
Riff estaba completamente sin aliento. ¿Alguna vez había corrido tanto como hoy? Corrió tanto que recordó el momento de su infancia en que corrió por su vida después de encontrarse con una manada de lobos mientras estaba recogiendo leña. Corrió hasta lo más profundo del bosque.
- Aquí debería ser suficiente.
Comparado con Riff, la maga parecía relajada. Se había encargado de la pareja de goblins que les perseguían.
- ¡Aaah!
Al oír esas palabras, Riff se tiró al suelo. Se dejó caer casi hasta rodar. El suelo estaba lleno de piedras y raíces, pero no tenía energía para preocuparse por esas cosas. Sentía el corazón tan hinchado que creía que le iba a estallar y le dolía mucho el vientre. Esto se debía a que no había corrido correctamente.
- Tsk tsk tsk. Qué hombre tan descuidado. Por eso las mujeres son mejores que los hombres.
- Aa... aah aah...
- El amor entre un hombre y una mujer es inferior, el amor entre una mujer y otra mujer es noble. El amor entre un hombre y un hombre está en algún punto intermedio, pero sólo es mejor porque no interfiere con las mujeres. Aquí tienes.
La mujer sostuvo su bastón por encima de la cara de Riff como si fuera un sedal. El agua comenzó a fluir desde el extremo de su bastón una vez que murmuró algo en voz baja.
- Ah. Abre la boca. Aah.
- Ugggrgl...pbbh.
- Eso es. Pareces un pez.
Riff agitó la mano débilmente. La mujer continuó durante 5 segundos más a pesar de que sabía lo que significaba ese gesto. Sin embargo, una vez que vio que él no reaccionaba más allá de agitar la mano, chasqueó la lengua y guardó su bastón.
-Mii-n, min, minmin.
Los últimos gritos de las cigarras llenaron el bosque. La conciencia de Riff se sentía distante. Su sentido del equilibrio era débil y se sentía mareado, como si tuviera la cabeza llena de vapor caliente. La mujer seguía hablando animadamente a su lado, pero sus palabras no entraban en sus oídos. Puede que fuera por el agua fría que le había entrado en la boca, pero sus sentidos iban volviendo poco a poco. En ese mismo momento, empezó a comprender lo que decía la mujer.
- Ha estado viendo la batalla desde una perspectiva diferente desde el principio. Eh, señor Líder. Usted sólo pensaba en conquistar el Castillo del Señor Demonio, ¿verdad?
- Aah... por supuesto...
- Sí. Debes haberlo hecho. En primer lugar, los castillos del Señor Demonio son así para los aventureros. Lo mismo ocurre con los Señores Demonio. Los castillos de los Señores Demonio son algo que hay que proteger para que no los conquisten, eso es lo esencial. Pero ese Dantalian es diferente. Él estaba mirando más allá de su castillo de Señor Demonio mientras los aventureros estaban ocupados concentrándose en este. Miraba directamente a los aventureros. Sabía que no importaba dónde luchara contra los aventureros mientras pudiera derrotarlos. Jeje, ¿debería llamarlo un plano de pensamiento diferente? No es un enemigo que una persona que solía ser leñador pueda manejar.
Riff apretó débilmente la mandíbula.
- Esta puta zorra... Diferente plano de pensamiento, mi culo. Rayos, todo lo que hizo ese bastardo Señor Demonio fue huir de un campo de batalla en desventaja porque es un cobarde.
- ¿Oh?
- Mira, pudimos coger el dinero de ese jodido Señor Demonio gracias a eso. Aunque lo perdimos todo excepto mi parte porque todos murieron... en cualquier caso, ese tipo es un bastardo cobarde y estúpido.
La mujer miró a Riff fríamente como si estuviera mirando a una mosca gorda.
- Ya veo. Por eso los hombres apestan. En vez de pensar que perdieron porque fueron superados, piensan que perdieron por su propia metida de pata. Oye, grano de arroz que sólo puede usar su cabeza como lavabo, no huyó de un campo de batalla desventajoso, eligió deliberadamente un campo de batalla ventajoso para él. ¿No lo entiendes? Tsk tsk. Además, seguro que hablas mucho para alguien que no podría haber entrado en la bóveda del Castillo de los Demonios si no fuera por mi magia.
La mujer dejó escapar un suspiro. Perdió el interés por Riff. Se estiró como uno de los arboles a su lado.
- Sí. Tomar un poco de aire fresco por primera vez en mucho tiempo es agradable. Hoy me entran ganas de vivir mi vida diciendo sólo cosas refrescantes y correctas. Esto puede sonar un poco loco, pero incluso yo quiero vivir mi vida hablando elegante y civilizadamente. Lo digo en serio. Estoy de buen humor ya que ha pasado mucho tiempo desde la última vez que vi una gran estrategia.
- ...
Hasta ahora, Riff pensaba que la maga era una idiota con flores en la cabeza. No tuvo más remedio que cambiar esta percepción suya. La persona que tenía delante seguía parloteando sin parar y, para empeorar las cosas, no paraba de murmurar para sí misma a pesar de no tener interlocutor.
- Si me remonto a cuando los aventureros cometieron un error, entonces es el hecho de que se salieron de su camino para saquear otras aldeas. Si me remonto aún más atrás, entonces es el hecho de que nunca esperaron que las aldeas se convirtieran en el principal campo de batalla. Esto se debe a su idea fija de los castillos del Señor Demonio. Hm, pensando en ello ahora, tengo una idea aproximada de por qué utilizó a los goblins como su fuerza principal.
Riff se esforzó por levantarse. Sentía que si la dejaba sola, entonces repasaría lo sucedido eternamente. Había recuperado un poco sus sentidos, así que tuvo que huir aún más lejos en caso de que todavía estuvieran persiguiéndolos.
- Cuando termine esta batalla, sólo quedarán 7 aldeas humanas en esta cordillera. Además, los 7 pueblos son aliados que obedecen a Dantalian. De ser así, los goblins superarían en número a los humanos. Incluso si se combinan las 7 aldeas, apenas tendrán 300 personas mientras que los goblins tienen 400 luchadores solos. No tendrían ninguna oportunidad. Parece que hizo todo lo posible para disminuir intencionalmente el número de goblins. Mientras los aventureros miraban la batalla con estrechez de miras, Dantalian miraba uno o dos pasos por delante. ¡Incluso consideraba el ecosistema entre los monstruos y los humanos! Jeje, en serio. No hay manera de que simples aventureros puedan tener una oportunidad contra...
- Sí. Sí. Ese bastardo Señor Demonio es grande y tú eres más grande. La gente acomodada debería chuparse el culo mutuamente. Me iré primero.
- ¿Hm?
Riff caminó por un sendero del bosque. Tenía la intención de encontrar una montaña alta y confirmar su ubicación en primer lugar. Siempre y cuando pudiera hacerse una idea de la geografía de la zona desde la cima, entonces debería ser capaz de llegar a una ciudad en pocos días de caminata.
‘Maldición. ¿Tengo que empezar desde el principio otra vez?’
Debido a esta batalla, Riff había perdido al resto de sus camaradas que venían del mismo pueblo que él. Una vez que este pensamiento cruzó su mente, el deseo de venganza tiñó sus entrañas de negro.
‘No, todavía no. Necesito concentrarme en llegar a una ciudad ahora mismo.’
La cordillera no era un lugar tan sencillo como para sobrevivir mientras se tenían otros pensamientos. Riff lo sabía mejor que nadie como leñador. Primero demos gracias por haber sobrevivido a ese infernal campo de batalla y no será demasiado tarde para pensar en otras cosas más tarde, Riff se convencía así mientras caminaba.
- Eh, ¿a dónde vas?
- ¿Cómo que adónde voy? A la mierda. Me voy de esta montaña de mierda.
- ¿Eh? Pero no puedes irte.
La mujer dio un largo suspiro.
- Está bien. Hoy estoy de buen humor. Y no puedo fingir como si los últimos días con tu grupo nunca hubieran pasado... Hey, bastardo leñador ignorante. No des más de 5 pasos de ahí.
- Sí, sí. Eres realmente genial. Si vas a seguirme, entonces hazlo...
- Te advertí que no dieras más de 5 pasos.
Fue en ese momento.
El tobillo de Riff fue cortado por “algo” mientras seguía caminando ignorando la advertencia de la mujer.
- ¿Huh?
Riff se cayó sin poder evitarlo. No se cayó de forma desagradable ni nada por el estilo. Simplemente se cayó porque ya no podía hacer fuerza en su tobillo derecho. Hábilmente amortiguó la caída con los brazos y el pie izquierdo.
- ¿Eh? No puedo...
Riff hizo una mueca mientras se preguntaba si el agotamiento del campo de batalla le había alcanzado por fin. Intentó levantarse varias veces, pero no podía hacer fuerza con el pie derecho para impulsarse. No sentía nada. Ya fuera la sensación de su pie sosteniendo firmemente todo su cuerpo o la tensión transferida a través de sus músculos desde los talones hasta el muslo, no podía sentir ninguna de esas cosas.
- Maldición, qué ha pasado.
- Te lo advertí claramente.
Oyó el sonido de unas risitas detrás de él. Riff se dio la vuelta. La mujer estaba apoyada en su bastón y sonreía ampliamente.
- La mayoría de los humanos tienen orejas, pero, extrañamente, sus orejas rara vez están conectadas a sus cerebros.
Riff gruñó mientras estaba en el suelo.
- Mierda, ¿me estás gastando una broma, zorra? Devuélveme a la normalidad. Si no lo haces, entonces introduciré mi hacha en tu cabeza.
- Me gusta la gente segura de sí misma, pero no me gustan los mocosos que no saben cuál es su lugar. Escuchar el sonido de un perro derrotado ladrando arruina el estado de ánimo. Bueno, es sólo el estado de ánimo. Esta vez también tendré la amabilidad de hacerte otra advertencia. Habla formalmente.
- Esta maldita perra, conoce tu lugar-.
Con una sonrisa todavía en su cara, la mujer chasqueó el dedo índice. Fue en el momento en que Riff sintió como si algo pasara por su cintura. Rodó bruscamente por el suelo. Ya no podía sentir la parte inferior de su cuerpo, ni las pantorrillas, ni los muslos, ni la cintura.
- ¿Eh? ¿Eh?
No sentía dolor. No sentía nada en absoluto. Como si la parte inferior de su cuerpo hubiera desaparecido por completo.
- Caray, esto sí que me va mejor. Pensaba que me iba a estallar la cabeza usando los cuatro elementos cuando no los he usado en toda mi puta vida. ¡A la mierda los cuatro elementos! La gente no sabe lo que es el romance, ¿sabes? En el pasado, la gente ni siquiera trataba los cuatro elementos como magia.
- ...Esta puta de mierda, ¿qué me has hecho?
- Te corté el alma. Si te diera una explicación detallada, tu cerebro de guisante no lo entendería, así que confórmate con esta sencilla explicación. Ahora mismo la parte inferior de tu cuerpo está muerta. Eres medio cadáver.
- Perra, ¿quién...?
La mujer se inclinó hacia Riff que estaba en el suelo. Ahora parecía estar de mejor humor, pues sonreía feliz.
- Sí, sí. Tienes muchas preguntas, ¿verdad, niñita? Te lo contaré todo ya que vas a morir de todas formas. Sólo te lo diré una vez, así que escucha con atención. Nadie ha recibido nunca tanta amabilidad por mi parte antes de morir. Ahora bien, soy el Señor Demonio de Rango 8 Barbatos y me di cuenta de que los fans idiotas de Paimon estaban tratando de hacerle algo a Dantalian, así que vine aquí en secreto para ayudarlo en caso de que se jodiera. Así, me transformé en humano y me acerqué a ti a propósito, y, afortunadamente, mordiste el anzuelo pensando que yo era una idiota, pero tú fuiste el idiota todo el tiempo.
- ¿Qué? ¿Señor Demonio? ¿Qué demonios estás diciendo?
- Dantalian luchó inesperadamente bien, así que perdí la oportunidad de hacer mi aparición. Ahora estoy de buen humor porque por fin he conocido a un buen Señor Demonio de la generación más joven después de tanto tiempo. Al igual que los leones empujan a sus hijos desde los acantilados para que se hagan más fuertes, yo también estoy pensando en hacer lo mismo. Y, por último, estaba pensando en aprovechar esta oportunidad para pedirle a Dantalian que limpie los pedazos de basura que no actúan como Señores Demonio. ¿Es suficiente? Te lo he contado todo.
Riff trató de decirle que esperara, mientras Barbatos sonrió y le dijo.
- No. Te dije que hablaras formalmente, ¿verdad, hijo de puta?
El dedo índice de Barbatos se movió burlonamente. Riff sintió que algo parecido a una débil brisa le atravesaba la frente. Eso fue todo. Riff no sintió nada, no pensó nada y se desplomó. Fue una muerte sin dolor alguno.
- Uuuuuuh.
Barbatos levantó el cuerpo e hizo algunos estiramientos lumbares. Después de terminar sus ejercicios de cuello, miró el cadáver de Riff.
- Hm. ¿Cómo le daré una pista a ese bebé Dantalian?
Se llevó la mano a la barbilla mientras pensaba. Después de un rato, dejó escapar un “Ah” y se llevó el puño a la palma de la mano. Se alabó a si misma mientras grababa un símbolo en el pecho de Riff. Después de confirmar que no se había equivocado al dibujar el símbolo, lanzó un hechizo para evitar que animales y bichos se acercaran al cuerpo.
- Bien. Perfecto. Hoy sólo han pasado cosas buenas. Estaría bien que pasara algo así al menos una vez al año, maldición.
Sonrió feliz antes de caminar luego hacia el bosque con paso alegre. Su aspecto pronto desapareció silenciosamente en la oscuridad del bosque. Sólo quedó el sonido de las cigarras en los abetos que rodeaban el cadáver.