Capítulo 133
Viento Soplante (II)
Traducción y edición: Sho Hazama
Corrección: Lord
Corrección: Lord
En ese momento, el señor se puso de pie. Era el doble de alto que un zombi normal. Un Ghoul.
- Hace mucho tiempo que no veía a un muerto viviente tan lleno de pasión. Ataque preventivo. ¿Son tan buenas tus habilidades? Tu apariencia... ¿no sigues siendo un zombi normal?
Una cara perezosa. Bajó de su silla y se acercó lentamente a mí. Yo estaba disfrazado. A pesar de dar una impresión salvaje, la base seguía siendo un zombi.
- Los cambios “normales” son en gran medida irrelevantes.
Mi exterior puede haber cambiado, pero mi interior no. Al final, mi naturaleza solo se había fortalecido. El cambio exterior era muy grande. Me transformé para parecer un Zombi, pero el Ghoul solo era unos centímetros más grande que yo. Era algo que no se podía cambiar. No había signos evidentes de poder. Por ejemplo, las alas y los cuernos que obtuve después de usar Corrupción eran signos de transformaciones “reales”. El ligero aumento de tamaño ni siquiera se podía comparar.
- Eso significa que incluso podrías vencerme.
- Si realmente quieres conservar este lugar, sígueme. Yo lo defenderé.
Levanté Ira y dije. Los Soldados Esqueletos vieron mis acciones y me rodearon.
- ¡Jajaja! Tengo que reconocer tu ambición. Entonces, ¿veremos las habilidades de las que estás tan orgulloso? Si no lo haces, los Soldados Esqueletos te arrancarán las extremidades. Mercenario que veo por primera vez.
Había 7 Soldados Esqueletos. No era gran cosa. No eran más que criaturas de bajo nivel... y yo había recuperado mi fuerza hasta un nivel intermedio.
Miré a mi alrededor en silencio. Sería difícil acabar con los enemigos que se acercaban yo solo. Necesitaba la ayuda de los que estaban allí. Aunque no quisieran ayudar, la situación lo requería. Para ello, tenía que ganarme su confianza. Era necesario hacerlo.
- Qué curioso.
En los últimos 20 días, me había familiarizado más con la técnica de espada de Haien. Mis estadísticas y mi poder mágico no eran tan fuertes, pero ahora era mucho más fácil. El poder de Lluvia de Luna dependía de la técnica en sí, por lo que no se podía ignorar. Sin embargo, sería un desperdicio usar las técnicas de espada de Haien con estas criaturas.
Levanté Ira. Y... ¡Kwajik! Cerré el puño. ¡Kwaduduk! Los Soldados Esqueletos no podían seguir mi velocidad. Mi puño se estrelló contra sus caras. Cayeron uno tras otro. Acabé con 7 de ellos en solo 20 segundos.
Me sacudí los fragmentos de huesos que quedaban en mi puño y miré a Torium.
- Tengo una pregunta. ¿Se elige al señor mediante algún método especial?
- Originalmente, el comandante del sur sería el señor. Pero en este territorio remoto, la persona más fuerte se convierte en el señor.
La cara de Torium mostraba su sorpresa. Las habilidades que mostré durante los combates con Jeff eran solo la punta del iceberg. La condición de mi cuerpo era la culpable de que no se revelara todo. Por supuesto, Jeff tenía suficiente fuerza para enfrentarse también a 7 Soldados Esqueletos. Pero era imposible que lo lograra con sus propias manos en 20 segundos.
Yo lo hice. Por lo tanto, juzgaron que podía competir contra un Dullahan. Ahora actuarían por su cuenta.
- El señor es el más fuerte. Me gusta.
- Por supuesto, lleva 50 años gobernando este territorio. Para convertirte en nuestro señor, tienes que demostrar ese tipo de fuerza.
Dijo Torium. En otras palabras, no podía contenerme. Me gustaba bastante. Había una leve sonrisa en mi rostro. Tenía que convertirme en el señor si quería que me siguieran.
- Una persona incompetente no es apta.
- ¿Puedes enfrentarte al señor y a los 20 mejores talentos de la aldea? ¡Lucha sin matar! ¡Entonces te seguiremos con mucho gusto!
Torium se dio cuenta de mis pensamientos e hizo esa sugerencia. Los muertos vivientes usarían este tiempo para juzgarme. Torium quería ver una historia épica que hiciera soplar el viento.
- ¡Seguro que será difícil! ¡No te engañes solo porque hayas vencido a 7 Soldados Esqueletos!
El señor, confundido, sacó una enorme espada. Se reunieron los 2 muertos vivientes más talentosos e influyentes. Jeff estaba entre ellos y, a diferencia de los demás, sonreía. Su expresión había cambiado desde que me presenté...
- ¡Me vengaré de las 20 derrotas!
Efectivamente. Había una razón. El centro del área se vació rápidamente. Miré a los oponentes que estaban alineados. 21 contra 1. También eran más fuertes que los Soldados Esqueletos. Sin embargo, no eran rivales para mí.
- Será difícil no matarlos.
Saqué Ira sin dudarlo. El reto era ganar sin matar. Naturalmente, ganaría, pero... No sabía hasta qué punto controlaba mi fuerza.
Dullahan. Tenía 3 metros de altura y era uno de los mejores muertos vivientes.
- No sé cuáles son las intenciones de Makdalli al hacerme obtener un territorio tan pequeño como este.
Somullem era un Dullahan que lideraba a 1.000 soldados. Era alguien que se quejaba mucho cuando algo no le gustaba. El comandante Makdalli decidió avanzar hacia el sur con fuerza bruta. Sin embargo, solo recurrió a repetidas incursiones para minimizar sus pérdidas. Makdalli recorrió el sur atacándolo. El problema era que no todo el sur era igual.
Somullem suspiró al acercarse al lugar objetivo.
- Está en el límite mismo de la frontera. Uuu...
Todo parecía un páramo. Esa escena no cambió en varios días. Ahora solo faltaba medio día para llegar. El comandante Makdalli le había ordenado que conquistara este territorio del sur. Somullem no tenía derecho a negarse.
- ¿Les ofreceremos rendirse?
Preguntó un esqueleto. Somullem se llevó una mano a la cara y dijo con confianza.
- No es necesario. Barreré todo mi resentimiento.
¡Acabar con el enemigo! Parecía estar liberando algunos de sus sentimientos. Somullem estaba colocando su enorme espada sobre los hombros cuando vio algo.
- Capitán Somullem. Se acerca algo.
- Ya lo vi.
Alguien se acercaba rápidamente. Se precipitaba sin miedo, solo, hacia 1.000 soldados.
- ¿Está loco?
Murmuró Somullem para sí mismo. El adversario no se detuvo y se acercó más. Los Soldados Esqueletos sacaron sus arcos. Las flechas recubiertas de un potente veneno fueron disparadas simultáneamente. Pero... la persona no se detuvo. Más bien, aceleró el paso.
- Está loco.
Somullem se rio. Una cosa era segura, nunca llegaría aquí sano y salvo.
¡Kwakwang! En ese momento, se oyó un fuerte ruido y los soldados fueron barridos. Se creó una línea.
La atravesé por mi cuenta...
- Más rápido.
Fue una sensación refrescante. Estaba usando mi destreza con la espada para abrumar a los enemigos. No había habilidades ni dependencia de mis estadísticas. Solo usaba mis habilidades físicas y mi destreza con la espada. Quería superar mis límites actuales. Mis músculos gritaban mientras aceleraba.
- Más fuerte.
¡Chwack! Puse toda mi fuerza en mi espada. No podría luchar durante mucho tiempo, pero no me importaba. Esforzarme más era entrenar. Era una lucha arriesgada cuyo resultado era desconocido. Arriesgar la vida era la fuerza motriz para hacerse más fuerte. Solo me había dado cuenta de ello de nuevo después de debilitarme.
- Yo...
¡El Dullahan Somullem! Movió su pesado cuerpo mientras sostenía una gran espada.
- ¡Este tipo! ¡Ni se te ocurra salir vivo de aquí!
Había matado a 200 enemigos yo solo. La situación estaba llegando a un punto de inflexión. Pero Somullem ahora se estaba moviendo. No era gran cosa. Más bien, llegaba en el momento adecuado. Mi poder se había agotado y él era el enemigo más fuerte. Si ganaba, podría sentir que había crecido.
- Hazme mucho más fuerte.
¡Chaeeeng! La espada y la espada larga chocaron. En ese momento.
- ¡Aahhhhh!
- ¡Mátenlo!
- ¡Ayuden al señor!
Mi ejército llegó a través del agujero que yo había perforado. Somullem era un nivel más fuerte que un Dullahan normal. Era una Criatura Avanzada de Nivel 2.
Pero esto era de esperar. ¡Kwang! En la confrontación de fuerza pura, fui empujado hacia atrás. Me tiró al suelo y rodé rápidamente. Las flechas de los Soldados Esqueletos cercanos me atravesaron el muslo y el pecho.
- Esto me resulta familiar.
Las heridas y el dolor no eran nada. Esas cosas no podían detenerme. Saqué las flechas clavadas en mi muslo y pecho. Era un poco incómodo, pero seguía en medio de la lucha.
- ¡Por Makdalli!
Somullem gritó mientras levantaba su espada. Al gritar el nombre del comandante Makdalli, reafirmó su lealtad. Recordé una escena con Maximum. Él tenía una actitud similar cuando decía “Su Majestad”. Pensaba que yo era el emperador porque tenía su corazón. Ese corazón no se detendría tan fácilmente. Era similar a mi naturaleza. Así que no había ninguna diferencia. En momentos de crisis, el corazón también se hacía más fuerte.
- ¡Deshazte de ellos!
La victoria estaba confirmada, pero la expresión de Somullem seguía siendo horrible. Mostraba signos de miedo mientras me miraba. Y empezó a mostrar más signos de angustia. Con el tiempo, su expresión se convirtió en una de auténtico horror.
- ¡Tú...!
Respiré hondo y levanté Ira. Luego le corté la cabeza a Somullem con ella. Para matar a un Dullahan, había que destruir el corazón y la cabeza.
- Ahora tengo que quitarle el torso.
- ¡Te mataré!
¡Chwack! La cabeza de Somullem había sido cortada en 2 con precisión. Después de eso, ataqué el cuerpo con una sonrisa en mi rostro.
- ¡Aahhhhh!
- ¡Victoria! ¡Hemos ganado!
- ¡Hurra!
- ¡Hurra, Randalph Brigsiel!
Había 400 personas que me seguían. De ellas, aproximadamente 200 habían sobrevivido. Por otro lado, solo habían acabado con unos pocos enemigos.
- Realmente lo atravesó él solo...
- ¿Viste la pelea con Somullem? ¡Se me puso la piel de gallina!
Guardé Ira mientras Torium se acercaba y me saludaba.
- Enhorabuena por tu victoria.
- Tu tono ha cambiado.
- El señor debería decirle algo al general no muerto.
Lo recordé. Había hablado con Torium en el pueblo.
- ¿Ahora soy el verdadero señor?
- Abran paso hacia el centro del enemigo solos. No huiremos. Lucharemos. Es decir... hemos aceptado a Randalph como nuestro señor.
Se habían reunido aquí 400 personas. 100 personas esperaban en el castillo. Estaban preparadas para huir en caso de que la situación se tornara desfavorable. Yo lo había permitido. Al fin y al cabo, el objetivo de este ataque era demostrar mis habilidades mientras atravesaba las líneas enemigas. Si no lograba atravesarlas, serían eliminados.
- Envía un mensajero al comandante del sur. Infórmale de que el señor ha sido sustituido. De todos modos, sé muy bien que el señor tiene otras tareas además de cuidar de nuestra aldea.
- 100 personas siguen fieles al antiguo señor.
Las 100 personas que quedaban en el castillo. Eran seguidores del Ghoul. No habían aprobado mi plan. Torium soltó una risa amarga.
- La marea ha cambiado y no pueden detenerla. Más bien... hoy es un día de fiesta. Todo el mundo está emocionado.
Todos los muertos vivientes que quedaban me miraban. La expresión de sus ojos no era mala.
- Ah, hemos repelido el primer ataque de Makdalli a nuestro territorio. Una vez que el comandante del sur se entere de esto, es posible que se ponga en contacto con el señor por separado.
- Entendido.
Respondí bruscamente. Estaba agotado. Descansar era mi máxima prioridad. Me dirigí de vuelta al pueblo.
Torium se quedó detrás de mí y dijo.
- El viento... ha comenzado a soplar. El viento que traerá descanso a todos.
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