Capítulo 342
En las Profundidades del Imperio (II)
Traducción y edición: Sho Hazama
Corrección: Lord
Corrección: Lord
- El centro del Imperio, ¿dices?
Marbas sonrió con amargura.
‘¿Era simple retórica o estaba dando a entender que conocía su plan? Si era eso lo que estaba insinuando, ¿entonces cuánto sabía...?’
Marbas miró fijamente a Dantalian a los ojos.
- El enemigo ha reunido un gran ejército. El rey de la Mancomunidad Polaco-Lituana está al mando de sus tropas. Será una lucha difícil para nosotros sin refuerzos.
- No importa cuántas tropas reúnan, ¿cómo podrían derrotar a Su Alteza?
Sus ojos que eran tan oscuros como pozos brillaron alegremente. Era por esos ojos. Los ojos de Dantalian se parecían parcialmente a los de un herbívoro débil. Parecía que se rendiría inmediatamente si alguien cargara contra él en ese momento. Por eso, sin darse cuenta, la gente lo menosprecia. Sin embargo, si bajas la guardia y te lanzas al ataque, recibirás un contraataque implacable. Te impedirá usar cualquier arma y te rodeará por todos lados. Para cuando recuperes el sentido, tus miembros ya habrán sido atados. Era como una araña. Una araña venenosa que engaña a los cazadores...
Dantalian tenía 1 de 2 opciones. O tenía una habilidad innata para camuflarse, o era un actor nato que incluso podía controlar libremente sus expresiones faciales. En cualquier caso, era peligroso.
- Por mucho que lo intente, me sería imposible manejar un ejército con decenas de miles de soldados.
- He oído que el curso de acción más sabio es ganar sin luchar. Creo que el Padre Imperial es el mejor táctico del Ejército del Señor Demonio.
‘Así que él sabe...’
Marbas se ajustó el monóculo. Dantalian estaba más preocupado por él que por el enorme ejército de la Mancomunidad Polaco-Lituana. Básicamente estaba declarando que había visto a través de sus intenciones.
- Pido disculpas, pero ¿podrían marcharse los demás? Hay algo que quiero discutir con Dantalian.
Marbas envió a los demás Señores Demonio y oficiales afuera. La mayoría de ellos tenían una opinión favorable de Dantalian, así que no les importó dejar a su respetado comandante con él. El cuartel quedó en silencio. Marbas fue directo al grano una vez que todos se fueron.
- ¿Cuándo te diste cuenta?
- Su Alteza no pidió refuerzos de inmediato a pesar de que el rey de la Mancomunidad Polaco-Lituana estaba reuniendo personalmente a sus tropas. Llegué a la conclusión de que no tenía ningún deseo de ganar esta guerra.
Dantalian respondió inmediatamente.
- Si lo que quieres es la derrota en lugar de la victoria... ¿qué podrías ganar perdiendo? No fue muy difícil armar el rompecabezas trabajando a la inversa.
- Realmente suena simple si lo pones así.
Marbas se sintió como si se hubiera convertido en un niño. Sin embargo, la otra parte pensaba de otra manera. Dantalian habló en tono serio.
- Su Alteza sabía que me daría cuenta de su plan. ¿No es por eso por lo que no lo llevaste a cabo? Podemos considerarlo un empate, ya que ambas partes fueron capaces de descubrirse mutuamente.
- Un empate, ¿eh...?
En otras palabras, estaban empatados. Aunque la gente normalmente se ofendería si le dijeran que estaba al mismo nivel que otra persona, Marbas extrañamente se sintió complacido. Dantalian tenía ahora una sonrisa en la cara.
- Personalmente disfruto teniendo batallas políticas como ésta con Su Alteza. Para ser sincero, nuestros camaradas no me proporcionan muchos estímulos. Son gente bastante aburrida.
- ¡Ja! ¿Tratas la gestión del Imperio como una especie de recreo?
- ¿No cree que hay demasiada gente en el mundo que confunde la seriedad con el tedio?
Dantalian habló en voz baja, como si estuviera susurrando un secreto. Marbas soltó una carcajada.
- Tienes razón. Un Señor Demonio debería ser capaz de distinguir ambas cosas.
- Muchísimo.
- Pero, Dantalian, no puedo evitar hacerme una pregunta. Esta guerra debe ganarse para detener mi plan, lo que significa que los refuerzos son esenciales. A pesar de ello, has venido aquí tú solo.
Qué planeas, la mirada de Marbas planteó esta pregunta a Dantalian.
- ¿Qué estás diciendo, oh excelso Señor Demonio? Tus refuerzos ya han llegado.
- ¿Oh? ¿Estás diciendo que tú solo eres suficiente?
Incluso esta arrogante afirmación era entretenida para Marbas.
- Por favor, déjamelo a mí. El enorme ejército de 30.000 soldados de la Mancomunidad Polaco-Lituana se retirará sin poder capturar ni una sola fortaleza.
Habían pasado 2 meses desde que se restableció el rango entre los Señores Demonio en el palacio. El Señor Demonio que le precedía se había hecho definitivamente con el Imperio en ese corto espacio de tiempo.
‘También podría ser entretenido observar sus habilidades desde un lado.’
Marbas pensó mientras asentía.
- Muy bien, entonces. ¿Qué necesitas?
Dantalian extendió los brazos como si estuviera actuando. Luego bajó la espalda mientras hablaba.
- Todos y cada uno de los soldados de la Facción Neutral.
2 días después, el ejército de la Facción Neutral, compuesto por 15.000 soldados, emprendió la marcha. El rey de la Mancomunidad Polaco-Lituana se puso rápidamente al frente de sus tropas como si hubiera estado esperando este momento. Los 2 ejércitos llegaron a un vasto campo abierto como si se lo hubieran prometido de antemano.
Juntando los 2 ejércitos, iba a ser un enfrentamiento de casi 40.000 tropas. Los habitantes del continente, que esperaban que la paz llegara por fin, volvían a temblar de inquietud. La gente del continente se preocupaba por su propia seguridad mientras su atención se centraba en las Planicies de Whist.
* * *
Los 2 ejércitos se enfrentaron en las vastas llanuras. La visión de decenas de miles de soldados alineados en un campo extenso es siempre un espectáculo digno de contemplar. Más aún cuando es justo antes de que se enfrenten. Inquietud, nerviosismo, excitación y miedo... todas estas emociones se mezclan en una densa capa de niebla y se asientan sobre la tierra. La mayoría de los comandantes son incapaces de soportar esta presión. No es porque sean cobardes. Es porque saben que no pueden controlar a los numerosos soldados que tienen delante una vez que comienza la batalla.
Los Orcos que huelen sangre se excitarán y alborotarán por su cuenta, los goblins cargarán por su cuenta con la visión de carne humana ante ellos, y los Señores Demonio acabarán excitándose también ya que estas emociones son compartidas con ellos. Los ejércitos de los Señores Demonio tienden a convertirse en una mancha de caos si no tienen años de experiencia. Una abrumadora sensación de excitación en la que podrías perderte. Por eso, los Señores Demonio a menudo perdían la racionalidad y se lanzaban al ataque.
Sin embargo, la Facción Neutral tenía actualmente una alineación firme. Aunque había pasado bastante tiempo desde que todos se habían colocado en posición, ni un solo Señor Demonio sugirió a Marbas que comenzaran el ataque. Las unidades del frente mantenían estrictamente sus formaciones. Un pequeño número de jóvenes Señores Demonio se agitaban con expectación debido a su sed de sangre, pero eso era todo.
Junto con Marbas, los Señores Demonio de la Facción Neutral miraban a las fuerzas enemigas con ojos tranquilos. De vez en cuando bromeaban para animar el ambiente. Eran como generales veteranos al mando de soldados de élite. No tenían generales destacados como la Facción de las Llanuras, pero este bando mostraba un ejemplo de cómo debe ser un ejército. Un ejército normal no podría compararse con ellos. Sin embargo, aparte de ser muy superiores al ejército medio, no tenían mucho más. En el juego, Marbas lideraría su ejército contra Elizabeth, pero perdería la cabeza ante el héroe después de que...
- Todos están en posición. ¿Qué piensas hacer ahora, Dantalian?
Marbas parecía increíblemente tranquilo. Era como si dijera que pasara lo que pasara a partir de este momento, no era su responsabilidad, sino la mía.
- Por favor, prepara la bandera blanca.
- ¿Planeas negociar antes de que la batalla haya comenzado?
- Negociaré directamente con el rey de la Mancomunidad Polaco-Lituana.
Llevé sólo 3 caballeros de caballería conmigo al centro de la llanura. Uno de los caballeros sostenía una bandera blanca que simbolizaba que éramos enviados. Otro caballero sostenía una bandera con un águila roja que representaba a la familia imperial del Imperio de Habsburgo. El último caballero sostenía una bandera que representaba al Señor Demonio Dantalian.
Llegamos a la zona exacta entre los 2 ejércitos. Poco después, un grupo de soldados de caballería fue enviado desde el lado de la Mancomunidad. Llevaban una bandera roja y blanca que representaba a la Mancomunidad Polaco-Lituana. Respondí a su aproximación dirigiendo mi caballo hacia ellos. Las 2 partes se encontraron bajo la atenta mirada de 40.000 soldados.
- ¿Ha venido a anunciar su rendición, Señor Demonio?
Stephen Bathory. El Gigante del Este. El mayor gobernante a lo largo de toda la historia de la Mancomunidad.
El hombre de gran contextura se acariciaba la barba. El gran rey vestido con una capa dorada estaba sentado erguido de una forma que le hacía parecer como si estuviera fusionado con su caballo. Su voz solemne resonaba como pequeños cascos de caballo en mis oídos.
‘Debe de ser el doble de alto que yo.’
Pensé mientras sonreía.
- Oh Gran Rey, no hay rendición.
- Sólo habrá guerra, entonces. Cualquier cortesía más allá de esto es innecesaria en un campo de batalla.
- ¿No debería un rey transitar el camino entre 2 extremos?
Gran Rey Bathory dejó escapar una risa baja.
- El camino entre 2 extremos no es más que un término que hace que un resultado sin fruto suene bien. He venido aquí con un ejército de élite de 50.000 hombres. ¿Hay un precio que corresponda a esto?
- Perdóname, pero no creo que hayas venido aquí esperando ganar.
El Gran Rey frunció las cejas con una mirada desagradable.
- No había oído que un Señor Demonio pudiera ser elocuente.
- No obtuviste la aprobación de tu consejo nacional antes de salir en esta expedición militar. Esta declaración de guerra no se hizo como rey de la Mancomunidad, sino simplemente bajo tu propio nombre.
Se necesita una gran cantidad de fondos para mover un ejército, y esa financiación tiene que ser cubierta por los impuestos. Sin embargo, un consejo nacional formado por nobles no pagaría esos impuestos sin condiciones. Los nobles de la Mancomunidad Polaco-Lituana habían acordado pagar un impuesto de guerra especial para su rey. Sin embargo, no querían que fuera a la guerra con sus nombres a cuestas. Querían que el rey asumiera la responsabilidad en caso de guerra. A pesar de estar de acuerdo con la necesidad de la guerra, se negaron a escuchar los rencores de su pueblo. Bueno, los Señores Demonio pensarían: “¿No es lo mismo una declaración de guerra del rey que haber recibido una de su propia nación?”, pero no es tan sencillo en el mundo de la política dentro del mundo humano.
- Oh Gran Bathory, tu situación actual no debe ser particularmente agradable.
El Gran Rey me miró con ojos fríos.
- Vaya al grano, Señor Demonio.
- Probablemente nunca esperaste que nuestro Imperio tuviera garantizada su posición nacional cuando cooperaste con la Cónsul Elizabeth. Por eso cooperaste con ella para luchar contra la Alianza Creciente.
Sin embargo, la situación dio un vuelco. Actualmente, las únicas naciones hostiles al Imperio eran el Reino de Cerdeña, la Mancomunidad Polaco-Lituana y la República de Habsburgo. El Gran Rey Bathory debe estar sintiéndose incómodo a medida que su nación queda gradualmente aislada.
- Su objetivo es entrar un poco en guerra con nosotros antes de terminarla con unas negociaciones... En otras palabras, para reconciliaros con nosotros.
- ¿Con qué pruebas estás haciendo estas suposiciones sobre mis intenciones?
- Usted no solicitó refuerzos de ninguna otra nación.
Si el Gran Rey Bathory realmente tuviera la intención de tener una batalla decisiva con el Ejército de los Señores Demonio, entonces habría anunciado esta guerra como una guerra contra los malvados Señores Demonio. Sin embargo, de forma similar a como Marbas no pidió refuerzos, el Gran Rey Bathory no expuso su causa a las otras naciones a su alrededor. Simplemente lideraba a sus soldados como rey de la Mancomunidad Polaco-Lituana.
Esto significaba que no quería causar estragos nacionales y que no deseaba enturbiar la actual situación diplomática en todo el continente. El Gran Rey Bathory aspiraba a un tratado y no a una victoria decisiva. Hay una sencilla razón por la que querría reconciliarse con nosotros.
- Desea distanciarse lentamente de la República.
Reemplazar su cuerda podrida por una nueva. El Gran Rey Bathory dejó escapar una risita baja.
- Digamos que tienes razón y quiero un armisticio. ¿No sería aún más necesaria una batalla? Es imposible establecer un armisticio sin ningún tipo de causa. También tengo que preservar mi dignidad.
Como era de esperar del Gran Rey de una nación, comprendió rápidamente. En otras palabras, estaba diciendo que quería un armisticio. Sin embargo, establecer uno después de haber perdido parte de su tierra haría que los demás lo despreciaran como un gobernante débil, por lo que era necesaria una cantidad apropiada de guerra. La guerra es inevitable si no puede mantener su dignidad hasta cierto punto. Incliné respetuosamente la cabeza.
- Hay una forma de que seamos amigos sin derramar ni una sola gota de sangre, oh Gran Rey.
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