Capítulo 304
Baile en Pareja (III)
Traducción y edición: Sho Hazama
Corrección: Lord
Corrección: Lord
En ese momento, una gruesa columna de llamas se elevó repentinamente a varios kilómetros de distancia. La intensa explosión acabó formando un hongo nuclear que giró lentamente en el cielo nocturno. Aunque estaba bastante lejos, se oían disparos desde la distancia. En otra dirección, una batalla también se volvió repentinamente más intensa.
Tal vez porque detectó un punto débil en el cerco enemigo, Ricardo dirigió a los subordinados restantes en un repentino asalto, rompiendo de un golpe el débil cerco y precipitándose hacia las profundidades del desierto. El otro Jinete capaz de resistir hasta allí tampoco era idiota. Él también empezó a intentar escapar de este asedio.
Su era incapaz de salvar a Ricardo o a sus propios subordinados. Ser capaz de alejar a Pandora era el límite de lo que podía hacer. Nunca había sentido que media hora fuera tanto tiempo. En su conciencia, cada segundo se estiraba incontables veces, convirtiéndose en decenas de miles de bits de datos, y como tales, decenas de miles de pensamientos surgían también en su mente.
No tenía forma de enfrentarse a Pandora, ¡en absoluto! Ella, o quizás esta joven de pelo negro, sólo la fuerza que mostraba era suficiente para aplastarlo completamente. Sus velocidades estaban igualadas, pero había una disparidad gigantesca en fuerza. Aunque ella no había mostrado ningún arte de combate, sólo por esa espada de luz de doble hoja, uno podía decir que definitivamente no era una chica que no supiera pelear. Además, tampoco había forma de que Su pudiera compensar la diferencia de armas. No había absolutamente nada en su cuerpo que pudiera detener esas espadas de luz. Aquella era un arma de energía bien desarrollada, cuyo nivel tecnológico estaba toda una era por delante. En manos de Pandora, un solo barrido partiría a Su por la cintura. Todavía había una ronda de la bala biológica especial. Estas eran para luchar contra Malim o Martham, y también era efectiva contra los elegidos. Sin embargo, contra Pandora, todavía tenía que ser disparado en el cuerpo para ser eficaz. La piel de la joven era fina y suave, similar a la suya, pero Su creía que su piel aparentemente suave no debería tener problemas para bloquear un disparo de rifle de francotirador. Incluso si realmente lograba disparar, ¿sería efectivo?
Al menos, Su sabía que esta bala no era efectiva en él mismo. Podía movilizar inmediatamente las células del tejido alrededor de la herida para expulsar todas las células intrusas del virus y la sangre de su cuerpo.
Lo único en lo que podía confiar eran sus habilidades de percepción. Las habilidades siempre tenían 2 caras. Los grandes maestros del Dominio de la Percepción inevitablemente serían expertos en ocultarse. Sin embargo, ya existía una conexión instintiva entre ellos. Pandora no podía escapar a la percepción de Su, pero en el otro extremo, Su tampoco podía escapar de Pandora.
Por eso Su sólo tenía una única opción, y era huir. Mientras huyera dentro de Ciudad Dragón, el Parlamento de Sangre definitivamente tendría un experto que pudiera lidiar con Pandora.
Después de ser perseguido continuamente durante varios minutos, Su ya se dio cuenta de que la chica de pelo negro estaba actuando un poco extraño. Parecía que no podía usar el poder de su cuerpo al máximo, y de vez en cuando, aparecía alguna incoordinación. De no ser por este hecho, ella lo habría alcanzado hace mucho tiempo. Era imposible que hubiera podido huir durante tanto tiempo.
En el momento en que descubrió la falta de armonía en el cuerpo de la joven de pelo negro, el deseo instintivo que crecía día a día en el cuerpo de Su se dividió de repente en 2. Uno era un deseo hacia Pandora, y el otro era un deseo hacia esta joven vestida de negro. Los 2 individuos eran como aviones de combate que volaban justo por encima del suelo, rugiendo mientras corrían hacia Ciudad Dragón.
* * *
La paciencia era una habilidad esencial para un francotirador. Lynch siempre sintió que tenía una paciencia ilimitada, y por eso, se mirara como se mirara, se le podía considerar un excelente francotirador. Sin embargo, él, que llevaba en la profesión de francotirador cerca de 20 años, sabía que un francotirador distaba mucho de ser omnipotente, hasta el punto de que consideraba que apenas se clasificaba como una habilidad de nivel medio.
Debido a la naturaleza de las armas de fuego, una bala de rifle de francotirador de gran calibre no podía superar los 2000. Este tipo de velocidad seguía siendo una amenaza para los Jinetes de bajo nivel, pero para los Jinetes de alto rango, los efectos eran extremadamente limitados. Contra los Generales, serían aún más inútiles. Por eso, en todos los Jinetes de Dragón Negro, el número de individuos con sexto nivel en la habilidad de francotirador era extremadamente escaso, y no había nadie con más de sexto nivel. Algo con lo que el sexto nivel de habilidad no podían lidiar, el noveno nivel tampoco podría. Además, en el Dominio Mental, había muchas habilidades poderosas de sexto nivel o más, por ejemplo, el Control de Área. Cuando se combinaba con las habilidades del Dominio Mágico, se podían producir campos de fuerza que podían defender contra atributos específicos, y cuando se combinaba con las habilidades del Dominio de Combate, se podían producir campos defensivos que podían proteger contra varios ataques físicos. Incluso la capacidad de manejar armaduras móviles y sistemas de armas a gran escala en el campo de batalla tenía usos mucho más amplios. Por eso casi nadie estaba dispuesto a invertir grandes cantidades de puntos evolutivos en un nivel aún más alto de Dominio del Francotirador.
El francotirador era a menudo otro trabajo que tenían los exploradores, o una habilidad a la que se dedicaban aquellos con talento innato en el Dominio Mental limitado a sexto nivel. Lynch era un ejemplo de ambos.
Cuando se planteó por primera vez la profesión de francotirador, lo que Lynch tuvo más en cuenta fue que el número de francotiradores era escaso, por lo que las posibilidades de ganarse la vida con ello eran mayores. El límite de su talento innato era también de sexto nivel.
Todavía faltaba una hora para que el cielo se iluminara. A Lynch, que ya llevaba 2 días y 2 noches tumbado en su lugar original, naturalmente no le importaría esperar 1 hora más. Si la persona a la que esperaba aún no aparecía cuando el cielo se iluminara, entonces no tenía sentido seguir esperando. Sin embargo, la intuición de Lynch le decía que esas personas no tardarían en aparecer. Nadie podía competir contra un francotirador en paciencia, y Lynch tenía más paciencia que más francotiradores.
Ahora mismo era cuando más oscuro estaba, así como cuando más frío hacía. Ni siquiera las criaturas mutadas estaban dispuestas a salir a darse un festín en ese momento. Sin embargo, Lynch estaba lleno de espíritu en este momento. Sabía que a sus presas lo que más les gustaba era ir en contra de los instintos humanos, y ahora era su momento favorito para abandonar sus nidos. Estos comedores de cadáveres de la División de Pruebas, no importa qué tipo de palabras se utilizaran para describirlos, no se pasarían de la raya. El paisaje en su línea de visión de repente cambió un poco. Lynch ajustó lentamente su alcance, y luego un equipo de personas que se movían a través de la cubierta de la oscuridad surgió.
- Todos ustedes finalmente aparecieron después de toda esta espera de mí ...
Cada pelo del espeso bigote de Lynch sonreía. El visor delantero se movía continuamente por las zonas clave de la presa, pero no tenía ninguna prisa por disparar. Estaba claro que todas las presas estaban muy atentas, así que el porcentaje de éxito no era muy alto. Tuvo que esperar un poco más para tener una mejor oportunidad. Todas las presas de la División de Pruebas eran las comidas más deliciosas, así que no le importaba tomarse un tiempo para disfrutar de este proceso.
La oportunidad llegó mucho antes de lo que Lynch esperaba. A través de la lente de observación, el que lideraba el grupo de repente se sorprendió, levantando la cabeza para mirar hacia adelante. Sólo este movimiento ya hacía de este individuo una persona muerta en el corazón de Lynch. Justo cuando este se preparaba para apretar el gatillo, una extraña sensación pasó de repente por su mente. Sin darse cuenta miró hacia la distancia.
Al final de lo que podía ver, la espesa oscuridad inesperadamente parecía estar deformándose. En un abrir y cerrar de ojos, un vago silbido comenzó a resonar en el aire, pero cuando Lynch trató de escucharlo con atención, ya no oyó nada. Lynch sintió que esta noche era especialmente fría, haciendo que sus finos pelos incluso se pusieran de punta. Inmediatamente se puso alerta. No era porque tuviera frío, sino más bien una respuesta al peligro. Creía firmemente que, como francotirador, la suerte era una parte indispensable de la fuerza. Por eso, después de alcanzar el cuello de botella de la maestría de francotirador, Lynch siempre se esforzaba por aumentar sus habilidades de los Campos Misteriosos.
Al cabo de unos segundos, los silbidos se hicieron más nítidos, surcando continuamente los cielos. Cada vez más fuerte, sonaba como un avión de combate volando bajo.
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