Capítulo 302
Baile en Pareja (I)
Traducción y edición: Sho Hazama
Corrección: Lord
Corrección: Lord
Limpiar el campo de batalla ya era una tarea extremadamente familiar para Su, pero esta vez, la limpieza le llevó media hora completa. Hay que entender que, de principio a fin, la batalla entera no duró ni 10 minutos. Su tomó muestras de varios órganos importantes del cuerpo de Martham, incluido un globo ocular, que selló cuidadosamente en la bolsa de sellado portátil. Si tuviera tiempo, las escamas de aleación del gigante, los cañones de energía que colgaban de su brazo y el cañón de aniquilación eran buen material que podría venderse por un gran precio. Sin embargo, ahora mismo, no podía malgastar su precioso tiempo y energía en mover estas cosas. Sólo podía sellarlas y enterrarlas bajo tierra. Cuando terminaran las batallas, volvería a por ellas, si seguía vivo para entonces, claro.
Número 5 y 13 estaban muertos. El 7 y el 19 seguían vivos, y ambos ofrecían suficiente información. Al menos Su creía que todo lo que sabían, ya lo habían hablado, lo que ya era suficiente. Por eso Su usó la espada para acabar con sus vidas, sin dejar que sufrieran demasiado dolor al hacerlo, al menos mucho más leve que el de cuando hablaban estos individuos que sólo tenían números.
Actualmente, ya sabía que estos 4 tipos que sólo tenían números como nombres eran los llamados elegidos. Sus habilidades eran completamente diferentes, y su numeración estaba basada en sus habilidades de combate. El nivel de autoridad de los que tenían números más pequeños también era mayor. Por ejemplo, el Número 5 era claramente más problemático para Su que el Número 13. Para eliminar a Número 5 antes de que Martham se precipitara, Su no podía dejarlo con vida para interrogarlo después de la batalla. En cuanto a Número 2 Martham, no sólo tenía su propio nombre, su nivel de experiencia era claramente diferente al de los otros elegidos.
El mundo de los elegidos era en realidad extremadamente simple, simple hasta el punto de dejar a Su estupefacto. Toda su vida consistía en crear habilidades, entrenar las recién adquiridas y disfrutar. El llamado placer era más cercano al de un tipo instintivo primitivo, que era precisamente comer y aparearse. Por la descripción de Número 19, lo que comían los elegidos era similar a la comida llena de nutrientes de los Jinetes de Dragón Negro, y su sabor no era en absoluto del tipo al que estaban acostumbrados los humanos. Cuando estaba en el campo de entrenamiento, Su definitivamente se sació de ella, y después del campo de entrenamiento, comió bastante de eso también. La comida nutritiva era comida nutritiva. Aparte del aumento de los costes de producción, el valor nutricional de los alimentos nutritivos con saborizantes alterados frente a los alimentos nutritivos puros no era muy diferente. Sin embargo, el sistema nervioso de los elegidos estaba controlado por un chip informático biológico, por lo que el mero acto de comer les proporcionaba grandes cantidades de alegría. Además de comer, los elegidos pasaban varias horas apareándose. Al igual que cuando comían, el apareamiento también les producía un intenso placer. Por eso, a los elegidos no les importaba demasiado con quién se apareaban. Algunos elegidos incluso cerraban los ojos, se tapaban los oídos y disfrutaban sin reservas de esta sensación de pura alegría, por ejemplo, el Número 19. En cuanto a si la que montaba era o no una cerda hembra, no le importaba.
La constitución corporal de un elegido ya era muy diferente de la de un humano. La frecuencia e intensidad del apareamiento era casi la misma que la de un león en época de celo. Martham alteró su cuerpo en gran medida con el fin de aumentar su fuerza, a partir de ahí se convirtió puramente en un arma de campo de batalla.
Antes de que el Número 7 se convirtiera en un elegido, era un joven que luchaba por sobrevivir cada día en una zona habitada. Después de que los apóstoles controlaran a los Escorpiones del Desastre, fue seleccionado por ellos y se convirtió en un elegido. El proceso de reconstrucción duró 3 años enteros. Sin embargo, el Número 19 sólo empleó 2 años de reconstrucción, y parecía que el tiempo que tardaba la nueva hornada de elegidos en completar el proceso de reconstrucción se había reducido a un año. Aunque el proceso de reconstrucción cada vez más corto influiría en su fuerza de batalla, no sería de una manera lineal. Su tenía muy claro lo que esto supondría para el aumento de la fuerza militar de los Escorpiones del Desastre.
Estos elegidos todavía tenían las emociones de un humano normal, por lo que tenían las mismas debilidades que un humano, es decir, su miedo a la muerte. Estas eran buenas noticias para Su. La tecnología del chip informático de los Escorpiones del Desastre no era perfecta. Al controlar las emociones, inevitablemente disminuiría su inteligencia, y bastante. Para mantener su fuerza de combate, a los elegidos nunca se les instalaban chips de control emocional. La fuerza de voluntad podía cubrir la mayoría de las debilidades humanas, pero la fuerza de voluntad no era innata. Para estos elegidos, que pasaban la mayor parte de su tiempo inmersos en fluidos culturales, superar en fuerza de voluntad a Su, que había luchado entre la vida y la muerte durante más de 20 años, era sencillamente demasiado difícil.
Los 4 cadáveres de los elegidos fueron arrastrados juntos y tratados de una manera sencilla. Si eran llevados de vuelta a Ciudad Dragón, todos ellos eran cosas buenas que podrían venderse por una gran cantidad de dinero. Desafortunadamente, temporalmente no podía traerlos de vuelta. Desde que llegaron los elegidos, así como un Martham que había sufrido otra reconstrucción, Su no creía que los Escorpiones del Desastre se detendrían en este momento. Por lo menos, todavía estaba Pandora que no había aparecido todavía. Tenía un fuerte presentimiento de que ella definitivamente aparecería.
Elegido, Martham, Pandora, todos ellos vinieron tras Su. Para acabar con los Jinetes de Dragón Negro, bastaba con solo Martham; no había necesidad de enviar a 4 elegidos más. Su poderoso cuerpo, destreza y velocidad, junto con el imparable cañón de aniquilación, hacían de Martham un depredador natural contra la forma de luchar de los Jinetes y sus subordinados.
Su se ajustó de nuevo el uniforme, poniéndolo en el estado más cómodo, y luego miró a su alrededor. Mientras escaneaba su entorno, las profundidades de su ojo izquierdo parpadearon 3 veces con luz verde. Las 3 imágenes construyeron un nuevo mapa tridimensional en su cerebro, así como una vista de 360 grados que abarcaba todo lo que había en 1 kilómetro a la redonda de la posición de Su, sin que faltara ni una sola esquina. En el borde del mapa panorámico, había en ese momento una joven de pelo negro que caminaba lentamente hacia allí. Sin embargo, si uno miraba ese lugar en el mundo real, no había nada que pudiera verse en absoluto.
Su miró en la dirección de dónde venía la joven. Sus cejas se curvaron ligeramente y apareció un rastro de sonrisa. Su expresión era tranquila, pero en realidad, cada célula de su cuerpo se retorcía, produciendo una intensa variación a nivel genético. Los puntos evolutivos fluían como el agua en el Dominio de la Percepción, todos ellos incrementando sus habilidades en ese dominio. En la conciencia de Su, la imagen de la joven pasó de borrosa a nítida. Independientemente de si se trataba de la chaqueta negra corta, el vestido corto, las piernas largas y delgadas, o las botas altas, todo se reconstruía dentro de la vista panorámica. Si la imagen de la joven no estuviera completamente reconstruida en esta vista panorámica, aunque Su la mirara con su visión nocturna, seguiría sin poder ver nada. Esta joven de pelo negro que se acercaba lentamente era como un fantasma intangible.
Cuando se acercó un poco más, Su ya “vio” claramente su apariencia. El pelo negro de la joven caía perfectamente liso, su nariz pequeña, recta y puntiaguda y sus labios ligeramente sobresalientes formaban una carita hermosa y dulce que desprendía un poco de inmadurez. Sus grandes ojos mostraban toda la sinceridad que podían, hasta el punto de hacerla parecer un poco tonta por naturaleza. Por supuesto, si alguien realmente pensaba que esta chica de pelo negro era tonta, entonces definitivamente se puede decir que esa persona era la verdaderamente tonta.
Su dejó caer al suelo el extremadamente “práctico” rifle de asalto y cogió el rifle de francotirador que llevaba a la espalda. Con un ligero empujón contra el cargador, se introdujo una bala en la recámara. Luego, con una mano sujetando el arma, apuntó a una zona espaciosa. Con una sonrisa, dijo.
- ¡Muy bien, quédate ahí! Si te acercas más, dispararé.
A 500 metros de distancia, una onda de energía apareció en el área originalmente espaciosa y vacía. La joven de pelo negro apareció gradualmente. Inesperadamente se quedó allí de pie.
- ¿Me dispararas? ¡Realmente estoy un poco asustada!
La joven sonaba extremadamente sincera y pura, pero Su obviamente no le creía. Por eso apretó de repente el gatillo. ¡El rifle largo rugió, la boca disparó una larga llamarada, enviando la bala volando directamente hacia el entrecejo de la joven! Las piernas de la joven de pelo negro estaban ligeramente abiertas, la parte inferior de su cuerpo permanecía inmóvil sin moverse. La parte superior se inclinó repentinamente hacia un lado, haciendo bailar sus cabellos negros. Varios mechones de pelo se interpusieron en la trayectoria de la bala y, como resultado, fueron cortados y lanzados al aire por una ola de calor abrasador. Sólo entonces se dispersaron lentamente hacia abajo. Sólo cuando la bala salió de la recámara comenzó a moverse.
Ante este resultado, tanto Su cómo la chica de pelo negro tenían ciertas expectativas, así que no había mucho de lo que escandalizarse. Aunque la distancia fuera menor, el resultado sería el mismo. La chica continuó de pie en su lugar original, obediente hasta un grado terrible. Miró fijamente a Su, preguntando suavemente.
- ¿Esos puntos de evolución eran sabrosos?
Si uno sólo mirara su expresión y su tono, pensaría que sólo estaba viendo a una chica ignorante que decía tonterías. Parecía fácil de intimidar, pero incluso si Su no viera la forma en que ella esquivó la bala hace un momento, él todavía no caería en este acto. La llama verde dentro de su ojo saltó ligeramente.
- ¿Cuáles?
- ¿Todos?
Dijo la chica.
Su se rio y dijo.
- ¿Todos? No deberían ser todos, ya que aún me falta el tuyo.
- No soy tan sabrosa.
La joven dijo palabras que definitivamente harían que otros malinterpretaran. Las cejas de Su se curvaron de forma extremadamente bella. Dio la respuesta más de manual.
- Si algo sabe bien o no, sólo lo sabrás después de probarlo.
Le respondió la chica de pelo negro.
- Muy bien, de acuerdo.
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