Capítulo 364
Sendero Sangriento (V)
Traducción y edición: Sho Hazama
Corrección: Lord
Corrección: Lord
La noche pasó rápidamente. Su trasladó su campamento 40 kilómetros al oeste y luego se detuvo para descansar y reorganizarse. Se trataba de una región montañosa con un terreno ondulado, un campo de batalla que había elegido para sí mismo. Ya tenía el presentimiento de que la batalla tendría lugar esa noche.
Al atardecer, se abrió una grieta en las nubes bajas llenas de radiación en el horizonte. El resplandor sangriento del sol poniente iluminó la gran tierra, sus poderosos rayos abrasando sin piedad a todos los seres vivos y pintando la hermosa pero desolada gran tierra de un intenso color carmesí. Sobre la espaciosa y desolada tierra, se oyeron gradualmente ondas de sonidos metálicos rítmicos. Claudia, con su cabello peinado hacia un lado, caminó lentamente desde el horizonte. Llevaba una armadura pesada de aspecto bastante sencillo y, con cada paso que daba, dejaba una profunda huella en el suelo. Cuando las piezas de su armadura entraban en contacto, sonaba como si se estuvieran tocando las campanas de un funeral.
La armadura era de color rojo y dorado y estaba hecha de cobre. Había muchos escudos complicados grabados en su superficie que no servían solo como decoración. Sin embargo, el material de cobre en sí mismo determinaba que, aparte de su gran peso, no ofrecía muchas características defensivas. En comparación con la pesada armadura que solía llevar Madeline, era prácticamente un tipo de objeto diferente. Realmente se desconocía por qué Claudia llevaba este conjunto de armadura pesada que parecía completamente incómodo. La pesada armadura era de un rojo aterrador, y el color rojo de su superficie seguía fluyendo continuamente hacia abajo, formando un pequeño charco bajo los pies de Claudia. Sin embargo, ¡la distancia entre cada huella era de 10 metros! Por eso solo se podía ver un rastro sangriento formado por gotas de sangre que conducía hacia donde se ponía el sol. Mientras tanto, detrás de Claudia, si se seguía este rastro de sangre, se veía al final de la línea de visión una zona habitada de tamaño medio. Todo en la zona habitada parecía estar bien, excepto por la sangre, ¡la sangre interminable que se extendía continuamente en todas direcciones!
La cortina de la noche finalmente cayó. Todos se durmieron uno tras otro y, finalmente, solo Madeline y Su seguían despiertos. Madeline seguía sentada en el vehículo todoterreno, mientras que Su deambulaba solo por los alrededores del campamento. Ya tenía la clara sensación de que algo iba a suceder esa noche. Esta sensación no provenía del Dominio de la Percepción, sino de los Campos Misteriosos, una sensación similar a una intuición. Su intuición era extremadamente precisa, y cuanto más clara era la sensación, más precisa se volvía. No entendía por qué era así, ya que no había invertido tantos puntos de evolución en los Campos Misteriosos. La intuición aguda era normalmente un talento que solo tenían los usuarios de habilidades de alto nivel en los Campos Misteriosos.
Su llevaba el rifle electromagnético completamente cargado mientras caminaba por el campamento con aparente despreocupación. No importaba adónde fuera, Su nunca se alejaba más de 60 metros del campamento. Si se observaba desde arriba, se veía que Su caminaba en un círculo de 60 metros de radio.
La noche era bastante fría y también soplaba el viento. El viento silbante, áspero y frío, barría ocasionalmente la gran tierra. En las rocas fuera del campamento, apareció de repente una fluctuación difícil de detectar, y luego volvió a la normalidad. Sin embargo, sobre esas rocas aparentemente vacías se encontraba Claudia, que los había perseguido hasta allí. Se encontraba de pie sobre las rocas de una manera absolutamente desenfadada, pero no solo no se veía ninguna silueta, sino que ni siquiera desprendía un poco de aura. ¡Ya era completamente invisible, y además invisible mientras llevaba puesto un conjunto completo de pesada armadura de cobre!
Ante sus ojos, Su continuaba caminando lentamente en círculo. Detrás de él, los lugares por los que pasaba ardían con un rastro de llamas rojizas y doradas. Cada vez aparecían más rastros, formando un gran círculo. Claudia ya vio que el radio del anillo de llamas era de 60 metros. Dentro del campamento, Li, Li Gaolei y Kane estaban dormidos. Sus cuerpos brillaban y luego se atenuaban uno tras otro, lo que indicaba que no estaban fingiendo dormir. Mientras tanto, la figura de Madeline, que estaba dentro del vehículo todoterreno, era extremadamente clara. Parecía que aún no había dormido, pero no estaba pensando demasiado en nada.
Después de recorrer el campamento con la mirada por tercera vez, Claudia volvió a fijar la vista en el cuerpo de Su. No importaba si los subordinados estaban durmiendo o no, y la luz que se filtraba del cuerpo de Madeline significaba que solo tenía segundo nivel de habilidad en el Dominio del Combate. Este tipo de fuerza de combate era prácticamente insignificante. Por eso, su único enemigo en ese momento era el único que quedaba allí, Su.
- ¿Una Sonda Espacial? Qué astuto es este joven...
Una leve sonrisa apareció en la comisura de los labios de Claudia, una sonrisa que no carecía de burla. Su estaba recorriendo el campamento con la clara intención de poner en práctica su habilidad de Sonda Espacial y escanear el entorno circundante. Si otros que no conocían su habilidad intentaran acercarse sigilosamente para lanzar un ataque a corta distancia, probablemente caerían en la trampa de Su. Sin embargo, Claudia era diferente de esos asesinos inútiles. Quizás sus muchas habilidades de Dominio del Combate de séptimo nivel no podían considerarse tan destacadas, y sus habilidades complementarias de Dominio Mágico valían aún menos, pero junto con la rara habilidad de Invisibilidad de octavo nivel que ella misma producía, ¡era suficiente para convertirla en la reina de la noche!
La información que los Jinetes de Dragón Negro tenían sobre la habilidad de Sonda Espacial era que cubría un rango de 50 metros. Esta era información a la que solo un General podía acceder, pero esa mujer, Perséfone, no parecía alguien que cumpliera inflexiblemente con las normas. Parecía que el radio de 60 metros del círculo era el verdadero alcance de la habilidad de la Sonda Espacial. Sin embargo, Claudia no era estúpida. Sabía que la información solo sería información al final. Podía utilizarse como referencia, pero si se trataba como si fuera la Biblia, entonces eso sería una verdadera estupidez. Por el rendimiento pasado de Su, las habilidades que producía en el Dominio de la Percepción a menudo superaban los niveles normales, y esta habilidad de Sonda Espacial no era una excepción. La razón por la que Su no eligió un círculo más grande para maximizar la distancia de su Sonda Espacial era muy probablemente para tender una trampa.
Por su parte, Claudia tenía la costumbre de no subestimar nunca a sus oponentes. Por eso decidió que la habilidad de Sonda Espacial de Su debía ser... ¡el doble de fuerte que la habilidad normal! Ella tenía muy claro que, al ser otra habilidad de octavo nivel, su propia Invisibilidad no necesariamente escaparía a la detección de la Sonda Espacial. Sin embargo, como había descubierto la trampa de Su, obviamente no se dejaría engañar. Aparte de la Invisibilidad, tenía otra habilidad poco común que, aunque era de octavo nivel, en combate real tenía efectos que no perdían frente a las habilidades de noveno nivel, ¡Asalto Extremo!
Sin embargo, cuando vio con qué cuidado Su sostenía el rifle electromagnético en sus manos, Claudia no pudo evitar sentir un poco de desprecio. Obviamente, comprendía lo aterrador que era y también sabía que, si alguien recibía un disparo con él, incluso un usuario de habilidad de defensa de noveno nivel sufriría mucho. Sin embargo, el rifle electromagnético y otras armas de pólvora tenían una debilidad similar, y era que su ataque tenía que dar en el blanco. Al igual que un francotirador no podía hacer nada contra un Jinete de Dragón Negro de alto nivel, el rifle electromagnético en los brazos de Su, a los ojos de Claudia, no era más que una barra de acero ligeramente avanzada.
Su figura erguida produjo una espada delgada de estilo occidental. Su brazo izquierdo se estiró hacia adelante, sosteniendo el filo de la espada con el pulgar y el índice, ¡apuntando la punta de la espada a Su! Claudia esperó con extrema paciencia. Finalmente, llegó al punto del círculo más cercano a su ubicación actual. ¡La distancia entre ellos era de 480 metros!
¡Era el momento! ¡La intención de matar estalló abruptamente entre las cejas de Claudia!
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