Capítulo 105
Proliferación Anormal (II)
Traducción y edición: Sho Hazama
Corrección: Lord
Corrección: Lord
A pesar de liberar varias criaturas, sabía que solo era una medida temporal. Podría ganar algo de tiempo, pero eso no conduciría a una solución permanente. El mismo problema continuaría a menos que eliminara la causa raíz. La tasa de propagación crecía de forma constante. La calidad nunca disminuía.
El tiempo pasaba. Mi ansiedad alcanzó niveles máximos. Yihi no despertaba y la luz del Núcleo de la Mazmorra disminuía cada día.
Sabía cuál era la causa. Lo sabía, pero era incapaz de mover la mano, a fin de cuentas, era el Árbol del Origen.
- Sin embargo...
Saqué a Ira. Luego me dirigí hacia el Árbol del Origen en el piso 15.
- Maestro de Mazmorra. Por favor, cálmate. Hay otras formas de resolverlo.
Julliom se dio cuenta de mis intenciones y se arrodilló ante mí. El árbol era la representación de sus deseos. Pero fue inútil. Mi paciencia ya se había agotado.
- Julliom. Necesito eliminar la causa de los efectos secundarios. Esta decisión debería haberla tomado hace mucho tiempo. De hecho, debería haber actuado más rápido.
¡Suok! ¡Pasak! Blandí mi espada. Una esquina del Árbol del Origen fue cortada. El cuerpo de Julliom tembló y agarró mis pantalones.
- ¡Ahh...! ¡No! ¡Por favor, por favor, el Árbol del Origen no!
- Si la mazmorra es destruida, no habrá árbol. No me bloquees. Si sigues actuando así, los cortaré a los 2.
¡Kuuuuoh! Fue justo en ese momento. El Árbol del Origen emitió un sonido como si estuviera gritando. Intentó defenderse. Sin embargo, eso era solo una ilusión. ¡Pasasak! Cientos de ramas fueron cortadas. Estaba usando la habilidad Espada Oscura, por lo que los objetos cortados no volvían a crecer. ¡Kuuuuoh!
- Cállate. Lo he aguantado todo lo posible. Esto no habría sido necesario si no me hubieras molestado.
Tenía una expresión indiferente. Mientras usaba mi espada, Julliom y los elfos oscuros que estaban cerca se taparon los ojos y los oídos. No pudieron evitar derramar lágrimas. El Árbol del Origen era la fuente de sus sueños y esperanzas. El único santuario en esta mazmorra. Ahora estaba siendo talado indiscriminadamente. No podían impedirlo. Una sensación de impotencia invadió sus cuerpos. Me detuve para tomar aliento.
- Mi Maestro de Mazmorra. Encontré algo. Una persona que puede comunicarse con la naturaleza.
Chrisley, que anteriormente había abandonado la mazmorra, había regresado apresuradamente. Había una pequeña niña humana con ella. Tenía aproximadamente nueve años- Una existencia que no encajaba en la mazmorra. No prestaba atención a ninguno de los elfos oscuros que la rodeaban. La niña miró al Árbol del Origen y comenzó a llorar.
- Ah...
La niña se sentó cerca del Árbol del Origen y comenzó a abrazarlo. Me di cuenta enseguida de que la niña era una Despertada. Ojos apagados. También reconocí que no era normal.
- ¿Es autista?
- Sí. Pero puede comunicarse con la naturaleza.
Chrisley mostró su determinación para abordar este problema abandonando la mazmorra. Eso fue hace 2 semanas. Entonces, esta era su respuesta. Usé el Ojo de la Mente.
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Un nombre familiar. Una habilidad familiar. Potencial muy alto. Reina de la benevolencia. Al igual que Yoo Eun-hye tenía el nombre de “Reina del Rayo”, Lee Sarang era famosa por su bondad.
En la segunda mitad de la guerra. A medida que la Tierra se veía abocada a la destrucción y los alimentos escaseaban, los humanos comenzaron a comerse unos a otros. Los Despertados no podían confiar fácilmente los unos en los otros cuando apareció Lee Sarang. Ella utilizó la poderosa habilidad Cuento de Hadas Natural y revivió la tierra. Las plantas echaron raíces y comenzaron a dar frutos. Al resolverse la escasez de alimentos, los Despertados pudieron utilizar su poder adecuadamente para contraatacar a los demonios.
Por eso Lee Sarang fue llamada “Reina de la Benevolencia”. Sin dudarlo, repartió amor por igual entre los humanos. Sabía que era surcoreana, pero no esperaba encontrarla en un lugar como este.
Comunicarse con la naturaleza... Lee Sarang era sin duda extraordinaria. No se vio afectada por la mazmorra y solo se preocupaba por el Árbol del Origen. Además, Lee Sarang había impedido que el Árbol del Origen gritara.
- Pero, ¿no será difícil conversar si tiene autismo? No parece que eso resuelva nuestro problema.
Podía comunicarse con la naturaleza, pero no habría forma de decirme lo que estaba diciendo. Chrisley expresó su oposición.
- Ella es, sin lugar a dudas, la clave para resolver esto. Mi Maestro de Mazmorra. Si nos dieran un poco más de tiempo...
- ¡Ah! ¡Ah!
Las palabras de Chrisley fueron interrumpidas. Lee Sarang había colocado una mano sobre el árbol mientras que con la otra se golpeaba el pecho. Era como si algo la estuviera agobiando.
- Te daré una semana. Analiza el comportamiento de esa niña y descubre cómo controlar al árbol.
- Gracias, mi Maestro de Mazmorra. No te decepcionaré.
Chrisley y Julliom, a su lado, suspiraron aliviados.
¡Suruk! Guardé mi espada y volví a la planta superior.
Había pasado exactamente una semana. Me paré frente al Árbol del Origen mientras sostenía a Yihi en una mano. Chrisley se paró a mi izquierda y me dijo cortésmente.
- El Árbol del Origen es una existencia necesaria. En este momento no puede controlarse a sí mismo.
- ¿Entonces Yihi?
- Ella es un espíritu del origen. Tashmal lo atestiguará.
Tashmal comenzó a hablar.
- Así es. Al principio me pareció extraño. El Árbol del Origen y el Espíritu del Origen deberían emparejarse. Creo que es porque ella aún es demasiado joven.
Miré a Yihi y al Árbol del Origen.
- Yihi es un hada. Es similar a un espíritu, pero claramente diferente. ¿Quizás pueda haber un sistema sustituto?
Los espíritus nacían en el Mundo Espiritual. Por naturaleza, un hada tardaba mucho tiempo en madurar. Chrisley respondió a la pregunta obvia.
- Mi Maestro de Mazmorra. El hada es muy especial. Está vinculada al Núcleo de la Mazmorra. Eso le da una enorme cantidad de poder mágico. Debería ser suficiente poder para controlar el Árbol del Origen.
- De acuerdo. ¿El método?
- La habilidad “Cuento de Hadas” de la chica humana. Si conviertes a la chica en una intermediaria...
- ¡Ah! ¡Ah!
Lee Sarang miró a Yihi. Extendió la mano como si estuviera pidiendo algo.
- Hazlo bien si quieres salir viva de aquí.
La amenacé mientras le entregaba a Yihi. Yihi podía ser joven, pero seguía vinculada al Núcleo de la Mazmorra. Era un privilegio poder tocar su cuerpo espiritual.
Lee Sarang cogió a Yihi y corrió hacia el Árbol del Origen. Cerró los ojos e instintivamente utilizó las habilidades “Cuento de Hadas Natural” y “Comunicación con la Naturaleza”.
Kuoooh... El Árbol del Origen dio un pequeño grito. La resonancia había comenzado.
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