Capítulo 127
Recursos Abundantes (IV)
Traducción y edición: Sho Hazama
Corrección: Lord
Corrección: Lord
Mientras hablaba, Perséfone ya había cambiado de posición 3 veces, esquivando 2 proyectiles de artillería y una ronda de balas de ametralladora, y al menos 2 de sus subordinados habían muerto. Estaba claro que esta batalla era increíblemente intensa, y Perséfone no tenía una ventaja absoluta. Sin embargo, su voz no parecía contener ningún tono de impaciencia. Aunque Su sabía que Perséfone definitivamente no sería alcanzada por esos proyectiles de artillería, seguía sintiéndose más y más nervioso cuanto más observaba.
Miró hacia Helen y vio que su expresión no cambiaba en lo más mínimo, como si ignorara por completo la situación actual de Perséfone. Su dijo con impotencia.
- De acuerdo, haré todo lo posible por cooperar. Sólo que algunas de sus peticiones me resultan realmente difíciles de cumplir.
- Está bien mientras hagas lo que puedas.
Le respondió Perséfone con una sonrisa antes de esquivar otra ronda de balas de ametralladora. Parece que el enemigo ya la había descubierto, y la potencia de fuego se iba acumulando poco a poco. Mientras tanto, la mayoría de sus subordinados estaban completamente suprimidos por la lluvia de balas, y varios de los pocos que eran un poco más poderosos estaban siendo suprimidos por enemigos de aproximadamente la misma fuerza.
- ¡Ya lo he prometido, así que deberíais darte prisa y concentrarse en la lucha! !No pierdas más tiempo en esto!
Dijo Su inmediatamente. Él tenía claro el hecho de que la muerte de cada subordinado añadía más presión a la pesada presión financiera de Perséfone. Además, la relación entre un Jinete y sus subordinados no era puramente financiera.
Helen miró a Su y luego a Perséfone. De repente, interrumpió y dijo.
- Perséfone, tu situación es bastante intensa. ¿Por qué no te quitas la ropa y dejas que Su eche un vistazo? Sé que te gusta ocultar tu cuerpo, así que si él puede echar un vistazo, estoy segura de que desarrollaría una reacción.
- ¡Muérete!
Perséfone se quedó momentáneamente atónita, y luego gritó bruscamente antes de cortar las comunicaciones. Helen no esperaba que su la reacción fuera tan grande. Ella también se quedó estupefacta momentáneamente, y luego miró a Su con malas intenciones. Sin hacer ruido, Su cogió inmediatamente su propio equipo y abrió la puerta para huir. En cuanto a la promesa de Perséfone, se ocuparía de ella la próxima vez que regresara a Ciudad Dragón.
Helen dio un paso adelante, pero luego se detuvo, dejando que la puerta del laboratorio se cerrara ante ella. Frunció los labios inferiores, decidiendo dejar escapar a Su esta vez. De cualquier modo, ya había recibido demasiados datos hoy, y había suficientes preguntas que resolver por ahora. En la mente de Helen, innumerables ramas se extendían desde el cuerpo multidimensional de Su, y cada rama contenía las probabilidades correspondientes. Entre ellas, había algunas que estaban claras, mientras que otras necesitaban más investigación. Mientras tanto, sólo la primera capa de ramas requería al menos 32 días, con cada día consistente en 15 horas de trabajo. Estaba muy satisfecha. Antes de completar esta investigación, Su debería volver de nuevo a Ciudad Dragón para proporcionarle más datos y resultados.
Sin embargo, Helen todavía estaba un poco arrepentida, porque todavía no era capaz de ver la reacción fisiológica de Su. No era algo crucial por ahora, pero la próxima vez, definitivamente no podía ignorarlo. Definitivamente tenía que pensar en otro método, por ejemplo hacer que Perséfone se quitara una o dos prendas. Justo cuando estaba perdida en sus pensamientos, la pantalla volvió a descender frente a ella, y Perséfone apareció de nuevo en la pantalla. Detrás había un campo de batalla en ruinas. Dos subordinados pasaban por delante de la pantalla mientras llevaban un cadáver. Parecía que la guerra ya había terminado y los subordinados se afanaban en limpiar el campo de batalla. Perséfone tenía restos de ceniza en la cara, pero eso sólo servía para resaltar aún más su piel blanca y clara. Apretaba un lápiz entre los dientes y se arreglaba el desordenado pelo gris.
- Helen, ¿cómo te fue?
Perséfone le preguntó con cierta ambigüedad mientras seguía mordiendo el lápiz. A los ojos del enemigo, era sin duda una general de división similar a un rey demonio. No importaba en qué situación o posición se encontrara, siempre mostraba unos niveles de habilidad asombrosos. Helen envió rápidamente una serie de datos y dijo.
- Los resultados son bastante ideales. Tengo que decir que para ti, que siempre has tenido bastante buena suerte, tu suerte esta vez tampoco es mala. El límite del potencial actual de Su es aún desconocido, y por los datos que tenemos actualmente, debería poseer el potencial para desarrollar al menos el tercer nivel de habilidad en cada dominio de habilidad.
- ¿Tercer nivel? ¿No es su Dominio de Percepción ya de quinto nivel? ¿Qué tienen de extraño el tercer nivel? ¡A fin de cuentas eso es el nivel básico!
- ¿Me pides que te adule, mocosa inmadura?
Helen respondió fríamente. Sin embargo, ella todavía meticulosamente explicó.
- Por favor, tome nota de 2 puntos, General Perséfone. Primero, Su tiene tercer nivel en todos los dominios. Creo que usted entiende aún más que yo lo que significa “todos los dominios”. En segundo lugar, tercer nivel es sólo el resultado producido por mi análisis actual, por lo que significa que es la menor cantidad que se puede garantizar. Muy bien, entonces déjame decirte lo que quieres oír. Mi querida General Perséfone, has descubierto un tesoro.
- Ah... ¡Ja ja ja ja!
Perséfone primero soltó una sonora carcajada totalmente desenfrenada y luego dijo orgullosa.
- ¡Por supuesto! Mi querida Helen, ¿por qué no piensas detenidamente cuál es la habilidad de Dominio de Campos Misteriosos más alta de este general? ¡Recursos Abundantes! ¡Está en el octavo nivel! ¡No encontrar un tesoro sería realmente extraño!
Helen se quedó bastante muda mientras miraba a Perséfone, pero su yo estricto y robótico seguía diciendo.
- Eso no es lo que hace Recursos Abundantes...
Sin embargo, en cuanto dijo esta frase, Helen pensó inmediatamente en su propio error.
‘Puesto que Perséfone poseía esta habilidad, ¿cómo podía desconocer su uso? Si seguía hablando de este tema, bien podría estar elogiándola más.’
Al ver que Helen no caía en sus payasadas, Perséfone recogió la excitación propia de una niña pequeña y se puso seria.
- ¿Por qué necesitas inspeccionar la respuesta fisiológica de Su?
- Porque hay demasiados misterios en su cuerpo, por ejemplo, aún no he encontrado señales de las células intrusas de su sangre ni de ningún tejido. Sin embargo, están definitivamente ocultas en alguna parte. Cuando las criaturas masculinas están en celo, es cuando todos los tejidos de su cuerpo se mueven con la máxima eficacia y cuando la vigilancia de uno está al mínimo. Podría haber señales de la célula intrusa cuando desarrolla una respuesta sexual, pero está bien aunque no se manifieste. Los cambios anormales en el cuerpo de Su cuando está en celo serán de gran utilidad para mi investigación. También podré evaluar con mayor precisión hacia dónde evolucionarán sus habilidades y evitar así que tome caminos equivocados.
Perséfone, en la pantalla, ya se había arreglado el pelo y se estaba ocupando de las manchas de la cara. Mientras hacía estas cosas, dijo.
- La parte de la investigación del doctor Connor parece avanzar con bastante rapidez, así que deberías tener cuidado.
Helen soltó un bufido y dijo fríamente.
- No importa lo bien que vaya su investigación, una vez que lleguen a la cerradura genética, se quedarán atascados. No es algo que podamos resolver con nuestro nivel actual de tecnología. Sin embargo, el doctor Connor es demasiado engreído y codicioso, así que no dejará de lado el bloqueo genético. Mientras utilicen todos sus recursos en el bloqueo genético, es imposible que su investigación supere a la mía.
- Sin embargo, su personal, sus fondos e incluso la cantidad de equipos son todos mayores que los tuyos. Conoces mi situación actual, y me temo que pasará bastante tiempo antes de que pueda ofrecerte más fondos.
- La financiación no es lo más importante.
Helen produjo una imagen tridimensional de Su y la envió para que Perséfone la observara. A medida que pasaba el tiempo, el cuerpo de Su cambiaba claramente.
- ¿Lo ves? ¡Esta es la parte más crucial! Mientras pueda seguir investigándolo, es suficiente. Según la velocidad de evolución actual, en menos de medio año, ese Connor con sólo unos frascos de sangre y datos obsoletos, ya se quedará completamente atrás. Cierto... sin embargo, no olvides que su valor evolutivo actual es de 36 millones.
La expresión de Perséfone era un poco complicada. Helen cerró todas las imágenes relacionadas con Su y continuó hablando.
- Dejemos de hablar de este tema por ahora. Déjame ver tu cuerpo.
Perséfone agarró el dispositivo de comunicaciones que flotaba frente a ella y se lo envió al estómago. Aproximadamente un minuto después, el dispositivo de comunicaciones se sacudió un par de veces y salió por sí solo, revelando una vez más la imagen de Helen frente a Perséfone.
- Su examen físico esta vez arrojó 2 puntos... En primer lugar, debes abandonar todas las misiones y volver inmediatamente a realizar el tratamiento. Aquí no hay lugar para la discusión.
Perséfone soltó un suspiro resignado, como si no estuviera muy dispuesta.
- ¿Es ya tan grave? ¡Ni yo misma lo noto! ¿Podemos esperar otra semana? Las otras 2 misiones pueden generar bastante dinero.
Al ver la cara de póquer de Helen que carecía de toda expresión, Perséfone no pudo evitar aceptar.
- De acuerdo, volveré justo después de esto. Sin embargo, ¿cuál es el segundo punto?
- Necesitas una mejor cirugía estética para mantener tu pecho al mismo nivel que antes.
Seguía siendo esa voz robótica. Perséfone inmediatamente sonrió de alegría.
- ¡Helen! Eres la mejor, ¿lo sabías?
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