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jueves, 9 de octubre de 2025

DH - Capítulo 401

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Capítulo 401
Limpieza (IV)
Traducción y edición: Sho Hazama
Corrección: Lord
La batalla fuera de la ciudad ya había terminado. Después de que más de la mitad de ellos murieran en combate, las tropas de Malphas finalmente abandonaron su resistencia y se rindieron. Todos eran veteranos experimentados y sabían que, con un francotirador presente, intentar huir era la muerte. La batalla no duró demasiado. Masacraron a las tropas de Malphas, capturaron a 90 personas y atraparon al propio Malphas. La banda armada de Malphas, que había causado problemas en la Ciudad del Atardecer durante muchos años, fue eliminada en solo una tarde de este juego de recursos para la supervivencia. A Su no le importaban las miradas mezcladas de miedo y respeto que le dirigía el comandante del campo de batalla que había enviado Víctor. Eligió a una docena de cautivos que parecían fuertes y robustos, y luego entregó a todos los demás cautivos a Víctor. Cuando sus ojos se posaron en Malphas, Su dudó un poco, pero aun así lo entregó. Un Malphas vivo valía más que todo lo que tenía él sumado. Aunque los cautivos que Su seleccionó eran naturalmente feroces y duros, Su creía que Kane tenía métodos más que suficientes para hacerlos obedecer. Mientras se les diera de comer, estos tipos darían la vida por Su. En cuanto a Malphas, eso ya era cosa del pasado. La lealtad de los refugiados armados, como todo el mundo sabía, era tan rara como el amor verdadero. Limpiar el campo de batalla, inspeccionar el terreno cercano y escoltar a los cautivos requería una gran cantidad de tiempo y energía. A Su no le interesaban en absoluto estos asuntos, así que dejó que la gente de Víctor se ocupara de ellos. De todos modos, este lugar iba a ser entregado a Víctor. 1 día después, Su volvió a sacar su flota. Víctor le envió un total de 20 combatientes para ayudarlo en su operación, y 15 de ellos estaban escoltando a los cautivos de regreso a la Ciudad del Atardecer. Tras recibir el informe del campo de batalla, Víctor envió inmediatamente a 100 élites totalmente armadas para ayudar a Su en su siguiente operación. Además, también envió a varias docenas de soldados para establecer un punto de suministro semipermanente en la pequeña ciudad. Al fin y al cabo, esa fuente de agua seguía teniendo bastante valor estratégico. La flota de vehículos continuó durante otro día y luego se detuvo en la ubicación predeterminada. Como de costumbre, Su salió a explorar, mientras que Li estableció las tácticas y las líneas de batalla. Tras otra breve batalla que no fue más que una masacre, el llamado Copperhead Ford y sus 110 subordinados volvieron a convertirse en prisioneros de Su. Con quinto nivel de habilidad en el dominio de las armas, quinto nivel de habilidad en el dominio de percepción y tercer nivel de poder, Ford era aún más difícil de manejar que Malphas, pero eso solo era así para los demás. Bajo las abrumadoras habilidades de Su, Ford ni siquiera tuvo la oportunidad de contraatacar. Independientemente de si se trataba de Malphas o Ford, ambos compartían una característica común, y era que muchas de sus habilidades eran producidas por ellos mismos. Como resultado, su fuerza de combate general era mucho mayor que la de un usuario de habilidades que dependía de fórmulas. Además, en sus cuerpos, Su podía sentir diferencias significativas con respecto a los del oeste. En esta región, los usuarios de habilidades de alto nivel, independientemente de su número o nivel de habilidad, eran muy inferiores a los del territorio controlado por el Parlamento de Sangre, pero su desarrollo era más equilibrado y más personas tenían habilidades de nivel avanzado. En cuanto a la poderosa fuerza militar del Parlamento de Sangre, así como a las regulaciones y el monopolio de las fórmulas de habilidades, casi no se podían encontrar usuarios de habilidades de alto nivel fuera del sistema del Parlamento. Si alguien tenía tercer nivel de habilidad, eso ya era suficiente para ser el rey de una zona habitada o de bandas armadas. Su no tenía clara la historia detrás de estos sistemas, ni sabía por qué la región deshabitada que estaba separada por la gran zona deshabitada se desarrollaría en direcciones tan diferentes. Además, desde su perspectiva, la zona deshabitada no era una fortaleza natural infranqueable. Quizás si los Jinetes de Dragón Negro enviaran a un General, trajeran consigo a 1.000 Jinetes y sus subordinados, podrían barrer fácilmente este lugar. Sin embargo, no se preocupó por estos asuntos, porque después de eliminar a las 2 potencias armadas de refugiados, la puerta que conducía a la antigua base de asilo ya estaba abierta. Esa era la nueva base que había seleccionado. Después de revisar las reservas de armas y municiones, Su hizo que Tegan y los demás soldados que se habían rendido se quedaran en la base de Ford. Los soldados de Kane y Víctor se encargaron de supervisar este lugar, mientras que Madeline, Li, Li Gaolei y él mismo se dirigieron a la base de refugiados. Según la información que Víctor le proporcionó, esta antigua base de refugiados llevaba abierta mucho tiempo. Tras varias décadas de desarrollo y continuos cambios de dueño, ahora era un nido de individuos mutados. Debido a que llevaba abierta mucho tiempo, era de suponer que las instalaciones energéticas y productivas estaban destruidas. Además, la base estaba construida en una región montañosa. La carretera que conducía a la montaña llevaba mucho tiempo destruida y no había recursos cerca. Por lo tanto, tras la aparición de los mutantes, ningún poder mostró interés en esta base. Los archivos de los Jinetes de Dragón Negro incluían datos sobre los mutantes. Desde un punto de vista genético, no eran tan diferentes de los humanos. La mayoría de los mutantes tenían cuerpos más grandes y su rasgo especial eran unos músculos excesivamente desarrollados, lo que también les daba una fuerza muy superior a la de las personas normales. El cuerpo original de un mutante maduro equivalía a la fuerza de un humano con el tercer nivel de fuerza. Sus músculos desarrollados y sus robustos esqueletos les proporcionaban una fuerza defensiva muy superior a la de las personas normales. Si se analizaba en función de sus habilidades, la mayoría de ellos tenían lo equivalente al segundo nivel de defensa. En realidad, aquellas personas que dependían de fórmulas para aumentar su fuerza solían presentar alteraciones esqueléticas, crecimiento muscular y otras características que los hacían parecer muy similares a los mutantes. Los mutantes poseían una inteligencia que tampoco era inferior, solo ligeramente inferior a la del humano medio. También poseían destreza con las armas y habilidades de fabricación, con un nivel de intelecto que les permitía avanzar en sus investigaciones. Sus robustos cuerpos podían resistir la corrosión de entornos hostiles y no temían a la radiación. Su debilidad era que esta raza era conocida por su mal genio. Se enfadaban con facilidad y sus cuerpos más grandes solían dar una apariencia de “lentitud”. Sin embargo, los materiales de los Jinetes de Dragón Negro no mencionaban su origen, ni Su se encontró con ninguno en las regiones circundantes. Nunca pensó que se encontraría con un nido de ellos en esta región. Basándose en la información de los Jinetes de Dragón Negro sobre los mutantes, sabía que, para lidiar con ellos, sobre todo en el interior de la base, complejo y estrecho, solo podía confiar en la opresión de sus habilidades. Las tácticas de sacrificio no surtirían ningún efecto. Por eso Su no trajo a ninguno de esos soldados ordinarios. Después de caminar durante 1 hora por la escarpada región montañosa, comenzaron a ver rastros dejados por los mutantes, incluyendo esqueletos de diversas criaturas, amplios grabados y montones y montones de excrementos espesos. El aire comenzó a desprender el espeso hedor característico de los mutantes. Si no fuera por la impresionante fuerza de voluntad de Su, este hedor podría considerarse un gran tormento y sufrimiento para sus sentidos extremadamente agudos. Li y Li Gaolei fruncieron profundamente el ceño, soportándolo con gran dificultad. Madeline, sin embargo, parecía completamente indiferente. Después de caminar un poco más, Su se agachó de repente, sosteniendo en sus manos el rifle de asalto que había sido ajustado al modo de francotirador.

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