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domingo, 19 de noviembre de 2023

DD - Capítulo 99

Capítulo 99
Un Rey y su General (XII)
Traducción y edición: Sho Hazama
Corrección: Zura ja nai, Lord
- Arqueros montados, ¡retirada! El Margrave Rosenberg pudo recibir el informe de la primera línea con relativa rapidez. El ejército imperial cuenta con numerosos oficiales de enlace entre las subunidades y las unidades principales. Gracias a esto, el ejército imperial es capaz de coordinarse estrechamente entre las unidades. - ¿Ha comenzado el ejército del Señor Demonio su contraataque? - No, Su Excelencia. Están utilizando un pequeño grupo para derrotar a los arqueros montados unidad por unidad. Respondió rígidamente el oficial. No sólo el Margrave Fritz Rosenberg estaba presente en la tienda. El príncipe heredero al trono del Imperio de Habsburgo, el príncipe heredero Rudolf Habsburgo, el general Mikhail Kolovrate, el general John Kutuzov y el capitán mercenario Ferdinand Wallenstein, los más altos mandos del ejército imperial, también estaban presentes. Estos individuos eran como estrellas rutilantes para el oficial de enlace. El oficial tenía que informar a estos individuos de la retirada de sus aliados. Podrían enfadarse ante el pésimo informe del oficial y, como ejemplo, el príncipe heredero podría empezar a patear al oficial de enlace. A partir de ese momento, tendrá que vivir su vida con el título de “el que se dejó pisar por Su Alteza el Príncipe Heredero”. Esto significaría básicamente que el oficial no tendría ninguna oportunidad de triunfar en la vida. El oficial de enlace despreciaba a los arqueros a caballo que perdieron ante los monstruos y, sobre todo, maldecía el hecho de que fuera él quien tuviera que informar de esto... El príncipe heredero Rudolf habló en voz alta. - ¡¿No se lo dije, Conde?! Les advertí una y otra vez que una estrategia defensiva sería inútil. Básicamente he perdido individuos que podrían haberse convertido en mis caballeros. Los individuos con talento son los que forman el poder nacional. Conde, ¿quizás no está tratando las vidas de sus soldados a la ligera? - Mis disculpas. El margrave se inclinó cortésmente ante el príncipe heredero. Era una actitud sumisa, pero había pura disciplina en su movimiento. El príncipe heredero agitó la mano como diciendo que aceptaría magnánimamente sus disculpas; sin embargo, sus pensamientos internos no eran así en absoluto. ‘Esta maldita cucaracha que se aprovecha del imperio.’ El príncipe heredero Rudolf anhelaba una monarquía poderosa y absoluta. Tenía la intención de deshacerse de todos los margraves tan pronto como se convirtiera en emperador. Para él, los margraves no eran más que traidores potenciales con una fuerza militar excesivamente poderosa. Un margrave local sólo obstruiría un gobierno que se dirigía hacia una monarquía absoluta, una política de un gobernante, un ejército y una nación. La intención del príncipe heredero ya estaba clara. No era sólo por su rostro contorsionado. Antes de que comenzara la batalla, el príncipe heredero no se ofreció a adelantar el ejército principal, sino que ordenó al margrave que moviera primero sus tropas. Incluso decidió colocar a los mercenarios detrás del margrave. Cualquiera podría decir que quería agotar el ejército del margrave. El margrave refutó con la lógica increíblemente simple de que no debían introducir la política en las operaciones militares. En respuesta a esto, el príncipe heredero y los demás generales del ejército principal dieron una respuesta sencilla. -Si no les gusta, entreguen el derecho de mando. Al margrave Fritz von Rosenberg le dolía la cabeza. No se podía evitar. Como comandante supremo, no era del todo irracional esperar que tomara la iniciativa y predicara con el ejemplo. Si el ejército de 10.000 soldados del margrave quería liderar a los 20.000 soldados del ejército principal y a los 20.000 mercenarios, entonces tenía que esperar una cierta cantidad de pérdidas. Al final, los soldados de infantería y los caballeros enviados hacia el ala derecha del ejército del Señor Demonio consistían únicamente en los 10.000 soldados del margrave. El príncipe heredero y los principales generales del ejército dieron un paso atrás ante la audaz decisión del margrave con un porte que decía que observarían a ver qué tal se las apañaba el margrave. El margrave habló con el oficial de enlace. - Los arqueros montados son todos caballeros asistentes. No deberían haber caído fácilmente. ¿Qué método utilizó el ejército del Señor Demonio? - Los monstruos llevaban armaduras negras. Blandían espadas más grandes que la gente... - Caballeros de la Muerte. El margrave recordó el pasaje que estaba escrito en el diario de su abuelo mientras cortaba las palabras del oficial de enlace. Tragó saliva. Los antepasados del margrave eran naturalmente también margraves y habían anotado todo lo que había sucedido en sus batallas contra el ejército del Señor Demonio durante los últimos siglos. En el diario, un pasaje que empezaba con “según los registros de hace 150 años” entraba en detalles sobre lo terroríficos que eran los caballeros de la muerte. El margrave había leído los registros de sus antepasados muchas veces desde que era niño, así que reconoció inmediatamente la descripción. El capitán mercenario preguntó. - Comandante Supremo, es la primera vez que escucho hablar de los caballeros de la muerte. A pesar de haber viajado por todos los rincones del continente, nunca antes había oído ese nombre. ¿Podría decirnos qué clase de monstruo son? - Son un tipo de monstruo no muerto con forma astral. Se sabe que sólo los brujos de Séptimo Círculo o superior pueden convertirlos en sus familiares. Cada caballero de la muerte posee la fuerza de más de 100 hombres y son tan hábiles como los caballeros de élite. El capitán mercenario encogió los hombros hacia atrás. - Oh cielos. Eso es bastante aterrador. - Puedes pensar en ellos como los guardias reales del Rango 8 del Señor Demonio Barbatos. Nunca he oído que ningún otro Señor Demonio aparte de ella maneje caballeros de la muerte. El ejército del Señor Demonio parece haber solidificado su ala derecha también. - Ya veo. Si ese es el caso, ¿entonces estaría bien asumir que el Señor Demonio Barbatos está en el ala derecha del enemigo? El margrave negó con la cabeza. - La posibilidad de eso es baja. Viendo que no son más que una pequeña fuerza destacada, sólo un pequeño número de tropas deben haber sido enviadas por ese lado. Oficial de enlace, díganos qué tamaño tenía la fuerza destacada. - Sí. Había algunas diferencias de tamaño, pero el número de monstruos que asaltaron a los arqueros montados se redondeó a unos 60. - 60, ¿eh? El margrave se acarició el bigote. 60 no era un número ni grande ni pequeño de soldados. Si excluías a los dragones de hueso, los caballeros de la muerte eran los soldados más fuertes del ejército del Señor Demonio y estos monstruos estaban situados en su ala derecha. Por lo tanto, el ala derecha es el lado más débil del ejército del Señor Demonio, así que el Señor Demonio Barbatos asignó una parte de sus guardias reales a ese lado para compensar su debilidad. Si necesitan 60 caballeros de la muerte, entonces el ala derecha podría ser mucho más débil de lo esperado. Aunque su estrategia de usar a los arqueros montados como cebo ha fallado, esto no daría la vuelta a la batalla. En este punto, sólo se perdió una pequeña bonificación. Su lado todavía está en ventaja... El oficial de enlace tragó saliva. 60 caballeros de la muerte es un número al que se llegó por la gran exageración de los oficiales al mando en primera línea. Actualmente, 10.000 soldados del margrave se enfrentaban al ala derecha del ejército del Señor Demonio. Sin embargo, el que dirigía a todos ellos era alguien del ejército principal y no del ejército del margrave. Una vez que se determinó que el margrave no podía abandonar el mando central por el bien de hacer su trabajo como comandante supremo, un general del ejército principal fue enviado en su lugar. Aquí quedó al descubierto el mal del ejército imperial de Habsburgo. Como predijo Dantalian, la cúpula del ejército imperial se dividió en dos bandos. El ejército principal y el ejército del margrave. Se peleaban constantemente por la autoridad de mando y esto provocaba que los oficiales al mando en el frente actuaran políticamente. El fracaso de un general del ejército principal debilita la autoridad del ejército principal y el fracaso de un general del ejército del margrave debilita la autoridad del margrave. Por eso, una vez fracasada la estrategia con los arqueros a caballo, el comandante de la división mezcló alguna exageración en su informe para que pareciera que no habían perdido por su incompetencia, sino porque había demasiados enemigos. En primer lugar, que hubiera tanto un comandante supremo nominal como un comandante supremo real era un problema. No hay forma de que un ejército funcione correctamente cuando se le adosan 2 cabezas. La razón por la que se estableció este sistema terriblemente ineficaz era que si ganaban, el príncipe heredero Rudolf, el comandante supremo nominal, obtendría el logro, y si perdían, toda la responsabilidad recaería sobre el margrave, el comandante supremo real. El margrave Fritz von Rosenberg ya era consciente de este hecho. Aunque dio su apoyo incondicional al príncipe heredero Rudolf en consideración a su hogar, incluso él no podía evitar estar ligeramente disgustado por el estado actual. Sin embargo, a quien más despreciaba el margrave no era al príncipe heredero, sino a los generales del ejército principal que le rodeaban y que constantemente pretendían hacerse con el mando militar. Por lo tanto. ‘Los nobles de la capital no son más que cucarachas.’ Se llegó a una situación en la que el ejército principal y el ejército del margrave se trataban mutuamente como cucarachas. Al ejército principal le molestaba que un simple margrave actuara como comandante supremo en una batalla en la que estaba presente el príncipe heredero y, para colmo, era un margrave que había perdido lamentablemente sus tierras. El ejército del margrave estaba resentido con el ejército principal por menospreciarles y no confiar en ellos a pesar de ser los que más experiencia tenían luchando contra los Señores Demonio. A lo largo de todo esto, el príncipe heredero trató constantemente de intervenir con el mando militar mientras contaba con el apoyo de los generales del ejército principal en aras de fortalecer su autoridad, y el capitán mercenario actuó como puente entre los generales mientras trataba de actuar como mediador, pero, al final, siguió a su empleador, el príncipe heredero. El resultado fue sencillo. - Siempre he tenido mis quejas. Todo iba mal desde el momento en que empezamos a atizarles con catapultas. - ¿Por qué dices eso ahora? ¿No fue algo que acordamos todos durante la última reunión? - Las catapultas no sólo restringen los movimientos del enemigo, sino también los nuestros. Deberíamos detenernos y... - Está claro que los arqueros montados han fallado. - ¿Así que vamos a enviar a nuestros caballeros o no? Para empezar, la reunión se hizo increíblemente larga. A menudo había reuniones que duraban varias horas y no llegaban a ninguna conclusión. Por supuesto, el margrave, el comandante supremo, sabía muy bien que celebrar largas reuniones durante una guerra no beneficiaría a su bando ni lo más mínimo. Así que decidió asumir la responsabilidad para poner fin a esta reunión. - Entiendo. Ataquemos el ala derecha con 10.000 soldados. - Muy bien, entonces. El príncipe heredero y sus generales parecían insatisfechos mientras miraban al margrave. El comandante supremo acababa de ofrecerse a enviar a su propio ejército, así que no tenían derecho a negarse. Aunque, naturalmente, estaban preparados para roer al margrave Rosenberg como un hatajo de perros si su ataque fracasaba... Sólo había una razón por la que Fritz von Rosenberg era tan inflexible a pesar de enfrentarse a problemas internos y externos. Era su absoluta confianza. Confiaba en su ejército y también se había dado cuenta de que el ala derecha era el lado más débil del ejército del Señor Demonio. El margrave estaba seguro de que no había forma de perder cuando sus fuertes tropas iban a golpear a enemigos débiles. - Tú, toma esta directiva y moviliza nuestras tropas inmediatamente. - ¡Sí, Su Excelencia! La orden fue rápidamente enviada al frente. Era una directiva firmada por el propio Príncipe Heredero Rudolf. En este período en el que el emperador se ha retirado del mundo político, ninguna directiva más pesada que ésta podría existir en el Imperio de Habsburgo. Un comandante de división del ejército principal, Keinmacher, gritó inmediatamente a sus tropas de élite en tono pomposo. - ¡Todas las fuerzas, avancen! 8.500 soldados de infantería y 1.500 soldados de caballería se adentraron en la espesa niebla. El lugar al que se dirigían era el campamento militar que el ala derecha del ejército del Señor Demonio había levantado con ahínco desde hacía un par de días y los 4.000 monstruos que había más allá. La orden dada al ejército imperial era abrir una brecha en el ala derecha del enemigo a toda costa, y la orden dada al ejército del Señor Demonio era defender el ala derecha a toda costa. La lanza del ejército imperial y el escudo de la 6ª legión de la Alianza Creciente, el asedio de Rosenberg y la defensa del Señor Demonio de Rango 16 Zepar iban a desplegarse ahora a toda velocidad.

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