Capítulo 217
Aventureros de Rango D (IX)
Traducción y edición: Sho Hazama
Corrección: Lord
Corrección: Lord
Héroe de guerra. Hubo héroes que fueron llamados así en el pasado. Bai Qi, de la dinastía Qing, había masacrado a más de un millón y medio de soldados enemigos. Han Xin hizo que una nación enemiga cayera en ruinas aniquilando un ejército de 100.000 con sólo una chusma de 20.000 soldados. Los héroes de guerra eran personas que llevaban a cabo guerras que iban más allá del sentido común como ésta.
- Parece que los exploradores goblins han descubierto al enemigo.
Una chica joven se levantó. Esta misma chica estaba destinada a convertirse en un héroe de guerra en este mundo. Laura de Farnese. Nació en la casa de un duque en el Reino de Cerdeña y terminó convirtiéndose en una esclava sexual, pero después de una década de crujir los dientes de vejación, asesinó a su amo con sus propias manos.
Posteriormente, es acogida por la reina Henrietta, que tiene buen ojo para los talentos. Asciende en la cadena de mando militar y mantiene una relación secreta con la reina. Los subordinados de la Reina desprecian a Laura porque saben que sólo fue nombrada por órdenes superiores. Sin embargo, Laura de Farnese consigue acabar con el ejército de 60.000 de Habsburgo con sólo 20.000 soldados. Empieza a obtener victorias aplastantes con números que habían sido inferiores al enemigo.
Si no hubiera aparecido el héroe, probablemente Laura habría seguido siendo una general invicta. El héroe que destruye estrategias con tácticas y tácticas con duelos. Sólo un arma humana de pesadilla pudo detener a Laura de Farnese. Y, nadie lo sabe aún, pero ese mismo héroe estaba actualmente bajo el cuidado de Dantalian.
- Ahora dividiremos y conquistaremos a los aventureros.
No había nadie que pudiera detener a Laura de Farnese ahora. Llevaba un vestido fino que parecía ropa de dormir. Más que llevarlo puesto, parecía que se lo hubiera puesto por encima. Había más piel desnuda que piel cubierta por el trozo de tela blanca. La chica, que pasó de los 17 a los 18 años, tenía un cuerpo tan radiante como un ramo de flores.
Los aventureros habían invadido ocasionalmente durante los varios meses de ausencia de Dantalian. Cada vez que lo hacían, Laura comandaba a los goblins que acababan de empezar a emigrar a la mazmorra y repelía a los invasores con facilidad. Unos 40 aventureros se habían convertido en cadáveres en el suelo de la caverna. Recogió los cráneos por separado y los apiló en un rincón de la habitación del Señor Demonio. Era un pasatiempo terrible para una chica, pero limpiaba los cráneos con una toalla siempre que estaba libre.
Los aventureros no eran conscientes de 2 cosas. Primero, que el castillo del Señor Demonio era del grado más bajo ya estaba en el pasado distante. Segundo, cada aventurero que había invadido fue masacrado brutalmente, así que nadie pudo informar que el Castillo del Señor Demonio de Dantalian había aumentado de rango. Como precio por esa ignorancia, Laura iba a ganar ahora 150 cráneos adicionales en su colección personal.
- Blingy, hoy también estaré a tu cuidado.
-Kerurk.
El primer monstruo del Señor Demonio Dantalian, el goblin de bajo rango asintió con la cabeza. Este goblin era el encargado de actuar como enviado de Laura para entregar órdenes a los soldados monstruos. Ella habló.
- Primero, nos ocuparemos de los aventureros que han entrado en el área Alfa 31. Deténganlos con nuestro tercer pelotón de goblins. Después, retrocedan hasta Alfa 11 y tiéndanles una emboscada junto con el equipo de emboscada.
- Keruk.
Blingy saludó con firmeza. Blingy procedió a pasar las órdenes a través de un orbe mágico. Había 18 orbes mágicos alineados sobre una mesa. Un flujo interminable de informes de estado entraba mientras Laura se sentaba en silencio y dibujaba la batalla en su cabeza. Este era el cuartel general de Laura. Estaba sentada en la entrada de la sala del Señor Demonio y daba órdenes a las tropas de toda la mazmorra. No podía ver las zonas directamente y la pared lingüística le impedía dar sus órdenes directamente a los monstruos. A pesar de estas 2 grandes deficiencias, Laura de Farnese continuó dando órdenes sin dudarlo.
- Los aventureros del área Alfa 23 ya deberían haber sido repelidos. 2º pelotón, diríjanse inmediatamente a Alfa 12.
- Los aventureros del área Gamma 13 no se mueven. Puede que pretendan una batalla prolongada, pero atáquenlos desde ambos extremos del túnel y aniquílenlos.
- Persigue a los aventureros que huyen de Beta 12. Sin embargo, no acaben con ellos y sólo persíganlos. Haremos que se unan a los aventureros de Beta 24. Oblíguenles a entrar en un estado de caos.
Las órdenes se daban tan rápido que a Blingy le costaba transmitirlas todas a tiempo. Delante de Laura había un mapa de la mazmorra, pero ni siquiera lo miró. Tenía una imagen clara de la batalla actual en su cabeza. No sólo había un mapa en la esquina de su cabeza, sino también un número. Era el número aproximado de aventureros que seguían vivos.
El número disminuía de 10 en 10 cada vez que Laura daba una nueva orden. El número que empezó en 150 disminuía lentamente a 140, 130, 110, y así sucesivamente. Los ojos de Laura permanecían cerrados mientras restaba de aquel número con indiferencia. Aquel número inorgánico estaba empapado de la sangre y los gritos de los aventureros.
Los grupos de aventureros estaban confiados al principio porque contaban con un gran número de personas. Tenían mano de obra más que suficiente para una mazmorra que se suponía era la de grado más bajo. Reían confiados mientras se enfrentaban a grupos de 2 o 3 goblins de vez en cuando.
Cuando salieron de un estrecho pasadizo y llegaron a una zona abierta, los aventureros se alegraron, pues pensaron que por fin podrían librar un combate decente. Había alrededor de una docena de goblins en el espacio abierto. Podrían encargarse de ellos sin sufrir ninguna pérdida mientras no bajaran la guardia. Efectivamente, los goblins empezaron a huir después de ser empujados hacia atrás durante unos 5 minutos.
- ¡Están huyendo! ¡Persíganlos!
- ¡Hoy es el día en que nos hacemos ricos!
El grupo de 10 persiguió a los goblins enérgicamente. Los monstruos corrían instintivamente hacia el centro de la mazmorra. Si seguían a los goblins, podrían ir directamente a la sala del Señor Demonio sin perderse. Tras unos minutos de persecución, el grupo llegó a otra zona abierta. Justo cuando pensaban que sólo tenían que hacer retroceder a los goblins un poco más. Los goblins empezaron a salir de otro pasadizo conectado a la zona abierta. Los aventureros entraron en pánico debido a la repentina emboscada. Algunos de los humanos incluso fueron abatidos porque no pudieron reaccionar a tiempo ante la inesperada situación.
- ¡No duden! ¡No son más que goblins!
Gritó el líder del grupo. Consiguieron crear una formación defensiva un poco torpe. Era difícil para los goblins atravesar sus defensas ya que eran más pequeños que los humanos. Sin embargo, una vez que una bola de fuego llegó volando a los aventureros de los goblins en el lado, el grupo cayó en un gran desorden.
- ¿Magia?
- ¡Los goblins están usando magia!
Un monstruo sostenía un bastón y estaba siendo defendido por un grupo de goblins. Era un Goblin Chamán que podía ser contratado una vez alcanzado el Rango D de Señor Demonio. Eran una unidad que costaba 1.000 monedas de Oro cada uno, pero Dantalian desembolsó una gran suma sin reservas.
- De ninguna manera... ¿No se supone que esta mazmorra tiene el rango más bajo?
- ¿Qué han estado haciendo los evaluadores?
La efectividad de la inversión era evidente. La moral de los aventureros bajó exponencialmente en cuanto se dieron cuenta de que había un lanzador de magia entre los monstruos. La gente de esta época temía enormemente a los seres que podían controlar la magia según su voluntad. El chamán goblin sólo podía lanzar bolas de fuego, pero en cuanto una persona desafortunada era alcanzada por ella y se prendía fuego, la voluntad de luchar de los demás aventureros se venía abajo. La mayoría de ellos eran aventureros novatos que, de todos modos, no tenían mucho sentido de la camaradería. Huyeron sin dudarlo.
- ¡Esos idiotas! ¡Todos moriremos si huyen ahora! ¡Todos moriremos idiotas!
Les gritó el líder del grupo. Habían gastado mucha de su resistencia persiguiendo a los goblins. ¿Hasta dónde podrían llegar si empezaban a correr ahora? Los goblins pueden ser pequeños, pero tienen una gran resistencia. Si los aventureros huían así, ¡seguro que los goblins los atraparían y los matarían! Sería mejor cargar contra el chamán aunque fuera a vida o muerte.
- ¡Aaaaaah!
El líder del grupo abrió la boca para decirles algo, pero lo único que salió de su garganta fue un grito. Una bola de fuego le había envuelto. El líder del grupo rodó inmediatamente por el suelo, pero el fuego se hizo más intenso en lugar de extinguirse.
- ¡Ayúdenme! No quiero morir.
El líder extendió la mano hacia sus compañeros. Incluso su mano estaba ardiendo. Los rostros de los aventureros palidecieron al presenciar este horrendo espectáculo y los individuos que aún mantenían la formación defensiva huyeron. El líder lanzó un terrible grito mientras los demás corrían por el túnel del que habían salido.
- ¡Hijos de puta, después de todo lo que he hecho por ustedes!
Las llamas acabaron por quemarle la boca y la garganta hasta el punto de que sus gritos dejaron de ser coherentes. Poco después, sólo se oía el sonido de un cadáver quemándose dentro de la caverna.
- ¡Keruk! ¡Keraruk!
Los goblins lanzaron un grito mientras perseguían a los rezagados. El cadáver ardiendo en silencio era todo lo que quedaba ahora en la zona abierta. Este tipo de situaciones se sucedían por toda la mazmorra.
Laura de Farnese atraía cuidadosamente a los aventureros a las zonas profundas de la mazmorra antes de utilizar el terreno para lanzar una emboscada. La emboscada y la posterior aparición de un chamán goblin bastaron para que los grupos huyeran con el rabo entre las piernas. Laura dio órdenes a las unidades de monstruos en el momento perfecto cada vez. De las 13 emboscadas, no se equivocó ni una sola vez. Los goblins se sintieron como si se hubieran convertido en los miembros de un solo cuerpo y casi no experimentaron pérdidas mientras masacraban a los aventureros. Era un logro impresionante si se tenía en cuenta que normalmente morían de 2 o 3 goblins para matar a un aventurero.
Una hora pasó así...
- ¿Ahora quedan 50?
En poco tiempo, el número en la cabeza de Laura se había reducido a 50. 100 aventureros habían sido masacrados en aproximadamente una hora. Por otro lado, de los 200 goblins, sólo 20 habían muerto en la batalla. La proporción era de 1:5.
La chica de 18 años que había enviado a los intrusos al infierno de la forma más eficiente posible simplemente se estiró como una forma de demostrar que estaba satisfecha consigo misma.
- Hnnng.
Justo cuando se estaba estirando, llegó otro informe a través de un orbe mágico diciendo que otros 30 aventureros habían sido asesinados.
- Ahora sólo quedan los aventureros que están con Su Señoría. Buen trabajo.
Laura acarició la cabeza de Blingy. Este estaba completamente agotado después de haber pasado las órdenes de Laura sin parar. Una vez que la chica le acarició suavemente, Blingy se olvidó de su agotamiento mientras ronroneaba como un gato.
- Su señoría es realmente raro. Podría habérselo dejado todo a esta joven y, sin embargo, decidió unirse a los aventureros porque quería verlo por sí mismo.
- Keruru, ruk.
- ¿Es porque es sincero? Hm. Blingy, estás demasiado cegado por Su Señoría.
Laura respondió rotundamente. Blingy empezó a saltar de rabia una vez lo hizo.
- ¡Karururuk!
- O-Okay. De acuerdo. Su Señoría es una persona seria. Esta jovencita se ha expresado mal. Le pido disculpas.
- Kiruru.
Blingy asintió satisfecho. Laura estaba bastante familiarizada con el lenguaje de los goblins. No podía utilizarlo con fluidez, pero al menos era capaz de entender lo que la otra parte intentaba decir.
No es que hubiera estudiado mucho su lengua. Lo aprendió de forma natural después de pasar un tiempo con ellos. Se estaba convirtiendo en una de las poquísimas personas de la humanidad que sabía hablar con goblins. Con un poco más de tiempo, probablemente será capaz de comandar a los goblins con “kerurus” y “keruras”.
- Entonces daré mis últimas órdenes. Todas las unidades en Alpha muévanse a Alpha 4. Si descubren un aventurero que logró huir, mátenlo inmediatamente. Todas las unidades en Beta muévanse a Beta 0 y todas las unidades Gamma preparen emboscadas en Gamma 11 y Gamma 12.
Poco después, el sonido de “keruks” afirmando vino de 18 esferas mágicas todas al mismo tiempo. Los chamanes goblin recibieron sus órdenes y movieron las unidades bajo su mando en consecuencia. Laura mostró una sonrisa satisfecha.
- Mm, este tipo de cosas son más adecuadas para esta joven que cosas como las leyes. Por mucho que la Gran Hermana Lapis no me haga caso, en general, cada vasallo tiene su propia utilidad. La Gran Hermana Lapis es buena en asuntos internos y esta joven dama es buena en asuntos militares. Es una espléndida distribución del trabajo... Esta joven no es estúpida. Sí, esta joven no es estúpida.
Laura de Farnese iba a convertirse un día en una heroína de guerra y ser reconocida como la pesadilla de la humanidad. Temía más a un simple medio súcubo mestiza que a 150 rudos aventureros...
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