DD - Capítulo 179

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Capítulo 179

Misantropía (I)

Traducción y edición: Sho Hazama
Corrección: Lord

La persona que ganó el concurso de masturbación no fue otro que nuestro capitán mercenario, Jacquerie. Se las arregló para terminar en 15 segundos. Nadie podría superar su vigor. El título del “Hombre más rápido del mundo” fue otorgado a Jacquerie. Que honor. Al día siguiente, el rostro del Barón permaneció serio incluso al salir de la aldea. Una vez que su gente notó que su señor estaba serio, hicieron todo lo posible para relajar el ambiente. Llegaron hasta la entrada de su aldea para darnos una gran despedida. Habían pasado 4 días desde que reanudamos de nuevo nuestras noches en el Camino del Imperio. - Su Alteza, él no es como un chico común. La voz de Jacquerie estaba llena de excitación y su rostro enrojecido. - ¿A quién te refieres? - Me refiero al niño que Su Alteza dejó a mi cuidado. Juro por la Diosa que nunca he conocido a un individuo con tanto talento. Le enseñas 1 cosa, y aprende 10. Enséñale 10 cosas y aprenderá 100. Sin duda, ese chico nació para ser un luchador. Para ser alguien que siempre se mostraba severo, Jacquerie se estaba exaltando. Le dediqué una pequeña sonrisa. - Hmm. ¿Tan impresionante es? - Sí. No bastaría con llamarle genio. Es como un mercenario que una vez dominó la esgrima y aprende a empuñarla de nuevo después de mucho tiempo sin hacerlo... Es como si recordara las cosas que sabía hacer en el pasado. En cualquier caso, sus habilidades son asombrosas. Entregué la tarea de educar a Luke a los mercenarios. Los cuales reaccionaron sin entusiasmo al principio. Básicamente había traído a un chico que parecía un mendigo y que supuestamente era el superviviente de un pueblo de tala y quema y les había dicho que le enseñaran esgrima. No entendían por qué les encomendaba semejante tarea ni sentían la motivación para llevarla a cabo. - La esgrima no es algo a lo que uno se acostumbre tras una sola noche. - No estoy seguro de cuáles son las intenciones de Su Alteza, pero lo haremos ya que nos lo ordena. Ese era su estado de ánimo general en ese momento. Ya se sentían cansados debido a que los mercenarios montaban guardia en el frente. No había forma de saber cuándo o dónde podrían atacarnos los bandidos. De repente también se les dio la tarea de enseñar a un niño, por lo que incluso si no se quejaban ante mí abiertamente, esto se debe haber sentido increíblemente molesto para ellos. El primer día. Luke se quedó con el miembro más joven del grupo mercenario. Básicamente habían entregado el molesto equipaje a su miembro más nuevo. Se les ordenó hacerlo, así que tenían la intención de hacerlo, aunque no entendían la razón. Esta era su forma de quejarse conmigo. - Eh, mocoso. Intenta golpear esto. El enano más joven le lanzó una espada a Luke. Era una espada de madera barata. Este ladeó la cabeza. - ¿Una espada? - Si eres un hombre, entonces deberías saber cómo protegerte. - Eh, eso es molesto. El enano lo miró. Yo los observaba con el rabillo del ojo desde bastante lejos. El enano estaba realmente desprendiendo un humor de “esto es seriamente molesto”. Bebí un poco de vinagre de uva diluido en agua y le dediqué una brillante sonrisa y una mirada que decía “Haz lo que te digo.” El enano soltó un suspiro. - Es más molesto para mí, mocoso. - ¿Por qué tenemos que hacerlo si es molesto tanto para mí como para ti? Si alguien que no tiene ganas de hacer algo hace una tarea molesta, entonces sólo se sentiría aún más molesto. - Probablemente aprenderás esto cuando crezcas, pero no hay nada que no sea molesto en el mundo. Despertarse cada mañana también es molesto. El enano golpeó ligeramente la frente de Luke. - Digamos, por ejemplo, que un lobo o un bandido te atacara de repente. ¿Qué harías? - ¿Un lobo? Había un claro miedo en la cara del chico. - ¡Ustedes pueden protegerme! - Claro que lo haremos, pero esto es hipotético. No hay garantía de que estés realmente a salvo en todo momento si te protegemos. ¿Y si se nos escapa un lobo? ¿Y si ese lobo va a por ti? ¿Qué? ¿Vas a mostrar simpatía por el lobo ya que consiguió sobrevivir al frío invierno y ofrecerle un bocado de tu pecho? - Uuugh. Sólo pensarlo parecía aterrorizarle mientras Luke se tapaba los oídos. El chico era muy expresivo con sus gestos corporales. Observar cómo se comportaba era suficiente para mantenerme entretenido. - Mocoso, deberías aprender mientras aún estoy de buen humor. Tu hermanita está postrada en la cama ahora mismo, así que también deberías aprender a protegerla mientras estás en ello. -...tienes razón. Tengo que proteger a Daisy. Luke pareció finalmente ganar la motivación para aprender mientras cogía la espada de madera. Vale la pena mencionar que Luke cree que somos parte del ejército del Emperador. Estábamos patrullando la zona y casualmente nos encontramos con su aldea siendo atacada, así que les ayudamos. Otra unidad estaba llevando a los aldeanos de tala y quema a una nueva aldea, mientras que nuestro grupo fue puesto a cargo de cuidar a Luke ya que lo descubrimos tarde... este era el escenario. ¿Por qué una unidad bajo el mando directo del Emperador vagaría por esta zona? Era una mentira ridícula. El Luke de 11 años parecía feliz de poder viajar junto a los soldados. ¿Debería decir que tenía un comportamiento increíblemente natural de niño? ¿Era porque su hermana pequeña, que era un año menor que él, actuaba de una forma madura que superaba con creces su edad real? La reacción de Luke era natural, pero se sentía rara... ‘Bueno, sería aterrador a su manera si hubiera 2 como Daisy. Una niña apretó los dientes y me miró fijamente mientras su carne se desgarraba y su corazón era grabado. Una niña así era más que suficiente en el mundo.’ Luke blandió la espada de madera descuidadamente. Claramente estaba blandiendo una espada por primera vez en su vida. - ¿Es así? - Sí. De arriba a abajo. Eso es, así. Separa los pies. Bien. - ¿Así? - Sí. Lo estás haciendo bien. Ahora intenta hacer 100 balanceos así. El tono del enano no podía ser más perezoso. Hacía que Luke practicara sus balanceos cada vez que parábamos para tomar un descanso. Era un movimiento sencillo que sólo le hacía mover la espada arriba y abajo, y hasta un novato sabría que ése era el más fundamental de los fundamentos. ‘Bueno, un viaje de mil millas debe comenzar con un solo paso. Debería estar bien dejarles avanzar a este ritmo.’ Dejé de prestarles atención y discutí con Jacquerie sobre nuestro destino. * * * El sol brillaba al segundo día. Tuve el privilegio de dormir en el carruaje. El cual tenía un poderoso encantamiento, por lo que debería ser más que suficiente para defenderse de los atacantes en la rara posibilidad de que aparecieran. Yo quería descansar con los soldados, pero tanto Jacquerie como Jeremi me pidieron consideración ya que se trataba de escoltarme. No era el único en el carruaje, ya que Daisy también estaba conmigo. Sin embargo, aún no había abierto los ojos desde que terminó la operación. Incluso ahora, estaba tumbada en una esquina del vagón como si fuera un cadáver. Según Jeremi, iba a necesitar al menos 2 días más antes de despertar. Cuando salí del vagón, mis compañeros ya habían terminado de preparar el desayuno. Habían hecho sopa. Habían cocinado una comida adecuada con harina y mantequilla. Esto se consideraría un lujo para los mendigos. - Cocinarás mañana, ¿entendido? - Bien, bien. Estás tomando una buena postura después de crear una simple sopa. Jacquerie y Jeremi comieron sus comidas mientras se gruñían el uno al otro. Los 2 miembros principales de nuestro grupo estaban incluso discutiendo sobre algo como quién iba a hacer las comidas. Parece que los mercenarios estaban a cargo del desayuno de hoy. - Imbéciles, ¿por qué estáis intentando morderos por algo tan simple como poner agua en una olla y hervirla? Tanto Jacquerie como Jeremi se giraron para mirarme al mismo tiempo una vez que les reprendí. Ambos tenían miradas serias en sus rostros. Tanto Jacquerie que naturalmente tiene un rostro de aspecto tosco, como Jeremi cuyo rostro estaba medio quemado, daban un poco de miedo. - Mis disculpas, Su Alteza, pero este es un asunto entre enanos y elfos. - Eso es correcto. La historia de la división de hace 3.000 años está en juego aquí. - ... ‘La historia de la división de hace 3.000 años mi culo. ¿Se han vuelto locos?’ Me rendí parcialmente en tratar de reconciliar a la brigada mercenaria y a los asesinos. Sólo puedo esperar que no sean hostiles entre ellos cuando se produzca una batalla. Alguien se nos acercó mientras tomábamos sopa en un lugar. - Uhm, Su Alteza. Mis disculpas... - ¿Hm? Era el enano más joven. Estaba bastante apenado, como si realmente sintiera molestarnos. Era comprensible ya que estaba interrumpiendo el desayuno de un Señor Demonio. Jacquerie miró al enano más joven con cara de “¿está loco este tipo?” - Rekan, ¿estás loco? ¿Desde cuándo mi unidad ha perdido todo su sentido de la cortesía? - Lo siento, capitán. Pero creía que debía informar de esto lo antes posible... Levanté una mano y detuve a Jacquerie. - Detente. Escuchemos primero lo que tiene que decir. ¿De qué se trata? - Se trata del niño humano que dejó a nuestro cuidado, Su Alteza... Uhm, este humilde ya no puede hacerse cargo de él. - ¿Hablas en serio? Aunque sean clases particulares, Su Alteza es quien dio esta orden. ¿No tienes miedo a la muerte, Rekan? - Capitán, no es eso lo que quiero decir... - Este es un juego de preguntas y respuestas. Parece que te has vuelto muy relajado después de que Su Alteza te tratara amablemente todo este tiempo. Por el crimen de ser descortés con Su Alteza a pesar de haber nacido demonio e ir en contra de la disciplina militar como soldado, tomaré tu cuello como arrepentimiento por tus crímenes. Jacquerie agarró su hacha y se levantó. Qué molesto. - Ah, ah. Espere un momento, Capitán Jacquerie. Los crímenes son eternos, así que puede imponerle el castigo en cualquier momento. Escuchemos por qué Rekan cree esto. - ...Si Su Alteza lo dice. Jacquerie frunció el ceño mientras daba un paso atrás. Jacquerie, el joven enano, y yo sabemos que todo esto fue una actuación. Todos los mercenarios aquí eran profesionales. Si no fuera por algo importante, entonces no habría tratado de dar un informe y al mismo tiempo interferir con nuestras comidas. Jacquerie simplemente estaba haciendo una escena como una forma de mantener las estrictas reglas. - Ahora bien, Rekan, habla. ¿Por qué dices que no puedes cuidar de Luke? - Gracias por la generosidad, Su Alteza. Seré breve. Ese niño está mucho más allá de mí capacidad. - ¿Mucho más allá de tu capacidad? El joven enano asintió. - Sí. Al principio, pensé que tenía mucha resistencia porque se había criado en la ladera de una montaña. También pensé que tenía una buena cabeza sobre los hombros a pesar de ser un mocoso. Sin embargo, poco a poco me fui cerciorando y llegué a una conclusión después de vigilarle hasta altas horas de la noche. - ¿A qué conclusión llegaste? El joven enano parecía incómodo al hablar. - Su Alteza, ese chico es un genio. Este tipo de gente aparece muy raramente. Gente que nació para el mero hecho de empuñar una espada. Este chico es un buen ejemplo de ello. Sólo le enseñé a balancearse hacia abajo y en ángulo, pero ya ha descubierto cómo equilibrar las piernas, el pecho, la cabeza y los brazos. Jacquerie frunció el ceño. Esta vez no se trataba de una actuación. Estaba realmente sorprendido por la declaración del joven enano. - ¿Eh? ¿Qué estás diciendo, Rekan? No estarás mintiendo porque no quieres hacer algo molesto, ¿verdad? - Cielos, Señor Jacquerie. Aunque me volviera loco, ¿por qué iba a hacer algo así? Si quieres, entonces puedes intentar enseñarle tú mismo. Yo también tenía dudas antes, así que estuve probando toda la noche. - Equilibrarse no es algo que pueda hacerse sólo con talento. Es algo que se adquiere de forma natural practicando y entrenando numerosas veces. ¿Cómo podría un simple niño humano...? - Ah, por eso fingí estar loco para informar de esto a Su Alteza. Ni siquiera yo quiero interferir en el desayuno de Su Alteza. Los otros ya me están mirando con deseos de matarme. Miré detrás del joven enano y los demás mercenarios reunidos en el claro miraban hacia allí. El hecho de que ninguno de ellos pronunciara palabra alguna hacía pensar que tenían intención de darle una paliza al más joven en cuanto regresara. El joven enano sacudió la cabeza y dejó escapar un suspiro. - Sinceramente, esto también ha sido un informe sin importancia. Por lo que puedo decir, ese mocoso... Creo que está haciendo circular maná por todo su cuerpo a través de la respiración. - ¿Qué, maná? La voz de Jacquerie subió una nota.

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