Capítulo 106
El Tesoro Mágico de Control de Fuego, ¡Uno Muy Avanzado!
Traducción y corrección: Radak
Edición: Radak, Sho Hazama
Edición: Radak, Sho Hazama
—¿Un tesoro mágico? —Song Shuhang sostuvo el abanico de metal con ambas manos y preguntó—. ¿Para mí?
—En tus sueños, este Abanico de Control de Fuego de Tres Estrellas es uno de los artículos experimentales que el Maestro de la Medicina y un maestro refinador de tesoros completaron hace poco. Puedes usarlo por ahora, pero dentro de un tiempo, se le debe devolver al maestro refinador de tesoros. —Niebla Púrpura Fluvial carcajeó.
En este mundo, ninguna ventaja se tomaba gratis, especialmente dentro del Grupo Número Uno de las Nueve Provincias, que siempre había sido quid pro quo.
—Jeje. —Song Shuhang se avergonzó, cada vez que escuchaba las dos palabras “tesoro mágico”, parecía que no podía dejarlo ir. Era una pieza de equipamiento que casi todos los cultivadores tenían que tener. Como cultivador, ¡uno tenía que tener un tesoro mágico y un arma!
—Lady Niebla Púrpura, ¿cómo uso este Abanico de Control de Fuego de Tres Estrellas? —Song Shuhang sostuvo el abanico de metal y preguntó. Pensó que probablemente debería encontrar un lugar adecuado y dejar que Niebla Púrpura le enseñara cómo usarlo.
—¡Aquí está el manual de instrucciones! —Niebla Púrpura Fluvial sacó un libro de tamaño A4 y se lo entregó a Song Shuhang—. Encuentra un lugar para encender una llama y revisa el manual mientras lo pruebas. Es muy fácil, aprenderás a usarlo de inmediato.
Manual de instrucciones... Manual… Instrucciones...
Cuando Song Shuhang tomó el manual de instrucciones, no sabía por qué parecía tener la ilusión de que lo que recibió de Niebla Púrpura Fluvial no era un tesoro mágico, sino un aparato comprado por internet...
Mientras Song Shuhang tenía sentimientos encontrados, Niebla Púrpura Fluvial le recordó: —Por cierto, cada vez que lo uses, asegúrate de cargarlo. Cárgalo tres horas y puede funcionar durante veinticuatro. El tiempo de uso es un poco bajo, pero para un novato refinador de píldoras como tú es suficiente.
—Bien, lo entiendo. —Song Shuhang asintió habitualmente.
¿Eh? Un momento, ¿escuché mal?
—¡¿Cargarlo?! ¿Este tesoro mágico necesita cargarse? —¡Song Shuhang quedó estupefacto!
Cogió el “Abanico de Control de Fuego de Tres Estrellas” y lo examinó; efectivamente, cerca del mango del abanico, vio un puerto de carga.
De repente, no se sintió muy bien.
—Tu problema es muy extraño, ¿de dónde viene la energía si no es al cargarlo? ¿Nunca has aprendido sobre la ley de la conservación de la energía? —Niebla Púrpura Fluvial respondió con una pregunta.
—No... Lo que quiero decir es, ¿no se supone que los tesoros mágicos utilizan cosas como la “energía espiritual del cielo y la tierra”, la “energía inmortal” o las “piedras espirituales” como su fuente de energía? O una piedra espiritual o cristal espiritual que puede usarse por varios cientos de años. —Song Shuhang se quejó rápidamente.
—¿Piedras espirituales? —Niebla Púrpura Fluvial sonrió presuntuosamente, y dijo—. Las piedras espirituales son fuentes de energía no renovables, y cuanto menos estén disponibles, mayor será su valor. Actualmente, una piedra espiritual de grado bajo puede comprar diez botellas de píldoras de sangre y qi. El uso de una piedra espiritual en un dispositivo de control de fuego de tan bajo grado no se puede describir con solo la palabra “desperdicio”. Además, ¿por qué desperdiciar piedras espirituales cuando puedes usar “energía eléctrica” que está fácilmente disponible a tu alcance?
Song Shuhang sostenía el “Abanico de Control de Fuego de Tres Estrellas” con una expresión “gloriosa”. —Lo tengo, me acordaré de cargarlo.
Un auténtico tesoro mágico que necesita cargarse, ¿alguien ha visto uno igual? Si no es así, ¡hoy les mostraré uno!
—Aprovecha el tiempo mientras estás libre para estudiar el Abanico de Control de Fuego, me reportaré con el Maestro de la Medicina. Si tienes alguna pregunta, solo envíale un mensaje al Maestro de la Medicina o a los superiores del grupo. —Niebla Púrpura Fluvial carcajeó.
Song Shuhang abrazó al abanico y preguntó de repente: —Por cierto, Lady Niebla Púrpura, ¿alguna vez el maestro refinador de tesoros venderá este Abanico de Control de Fuego de Tres Estrellas?
—Por supuesto que se ofrecerá a la venta; el precio no debería ser demasiado caro. Probablemente podría comprarse con tres piedras espirituales o menos. Si realmente no puedes dominar la fórmula de control de fuego, puedes considerar comprar uno. —Niebla Púrpura Fluvial sugirió—. ¿Alguna otra pregunta? Si no tienes más, me voy, ¿de acuerdo?
Recientemente, el Maestro de la Medicina había usado varias excusas para enviarla lejos, pero ciertamente no era una persona que se rindiera fácilmente. ¡Un día, ella convertiría al Maestro de la Medicina de su maestro nominal en su compañero del dao!
Song Shuhang preguntó de pasada: —¿Con qué está ocupado el Maestro de la Medicina?
—Solo escuché del Maestro de la Medicina que estaba tratando a algunos compañeros daoistas. Esos amigos recientemente encontraron un reino secreto y se aventuraron dentro, pero cuando salieron, encontraron algunos problemas. De los que específicamente no estoy segura, porque fui especialmente al maestro refinador de tesoros para conseguir este abanico de control de fuego. Si quieres saber sobre los detalles, puedes preguntarle directamente al Maestro de la Medicina —respondió Niebla Púrpura Fluvial.
Song Shuhang asintió en silencio.
Solo después de que Niebla Púrpura Fluvial se fue, Song Shuhang guardó el Abanico de Control de Fuego de Tres Estrellas y el manual de instrucciones. Tenía una expresión decepcionada.
Cuando recuperó el sentido, llamó a sus tres compañeros de cuarto y les pidió salir a comer.
Dado que el extranjero descubrió el edificio abandonado de la universidad, temporalmente no había un lugar apropiado para cultivar en la universidad. Su cultivación fue puesta en pausa. Por la noche, iría a la residencia del Maestro de la Medicina para cultivar algunas veces.
❄️❄️❄️
Mientras tanto, a mil kilómetros de distancia dentro de un templo daoista en un pequeño pueblo en algún lugar de la Ciudad J.
El Maestro de la Medicina fruncía el ceño mientras revisaba los cuerpos de cuatro compañeros daoistas.
Esos cuatro cultivadores eran un sacerdote daoista, una monja daoista y sus respectivos discípulos taoístas niño y niña.
Después de que se completó el chequeo, el Maestro de la Medicina dijo con duda: —Sus cuerpos no tienen peculiaridades. Primero, cuéntenme cuándo ocurrió la pérdida de memoria.
—El último recuerdo de este pobre Daoista es cuando la Monja Daoista Xuan Xuan y yo entramos en “La Isla Misteriosa”. —El taoísta frunció el ceño y dijo—. El siguiente recuerdo fue cuando este pobre Daoista apareció en una isla en el Mar del Este junto con la Monja Daoista Xuan Xuan y los dos niños Daoistas. En cuanto a cómo entré en La Isla Misteriosa y lo que pasó en ella, no tengo ni idea de eso.
La Monja Daoista Xuan Xuan continuó: —La pérdida de memoria de esta pobre Daoista ocurrió incluso antes... Solo recuerdo que el Sacerdote Daoista Kun Yi y yo acordamos ir a la isla misteriosa, y los recuerdos de cuando me fui se perdieron... Los recuerdos de cuando desperté también están en la pequeña isla en el Mar del Este. Los recuerdos que conciernen a lo que pasó en el camino y en La Isla Misteriosa se perdieron.
La Isla Misteriosa de la que hablaron fue la que apareció en el artículo publicado por el Diario El Cultivador, “La Isla Misteriosa Flotando Sobre el Mar del Este”, donde uno podía ver indistintamente aves y flores fragantes. También había abundante qi espiritual, e incluso muchos tipos de organismos ya extintos.
Debido a ese informe, hubo muchos cultivadores que se aventuraron al Mar del Este. En ese momento, el Grupo Número Uno de las Nueve Provincias también discutió cuándo formarían un grupo para ver el Mar del Este.
Sin embargo, no muchos pudieron encontrar La Isla Misteriosa.
Los dos daoistas fueron los pocos cultivadores afortunados que entraron en la isla misteriosa. Pero... ¡Sus recuerdos de cuando estaban en la isla desaparecieron!
—¿Fue lo mismo para los dos niños daoistas? —Preguntó el Maestro de la Medicina.
El niño Daoista sacudió la cabeza y dijo: —Superior, recuerdo un poco más. Desde que nuestro profesor y la maestra Xuan Xuan entraron a La Isla Misteriosa, nos encontramos con una matriz que restringía el vuelo. Finalmente tuvimos que aterrizar en un bosque al borde de la isla misteriosa, donde crecían muchas hierbas medicinales valiosas. Los cuatro recogimos algunas hierbas medicinales, luego continuamos más adentro en La Isla Misteriosa. Luego perdí una gran parte de la memoria y recuerdo vagamente que nos encontramos con una bestia monstruosa que nos persiguió por mucho tiempo y nos hizo perder muchas cosas. Después de eso hay otro vacío en mi memoria. Mi último recuerdo es el mismo que el de mi profesor, donde aparecimos en una pequeña isla en el Mar del Este. De los artículos que reunimos en La Isla Misteriosa, solo quedan unos pocos tallos de hierbas.
—¿El niño daoista retuvo más recuerdos que ustedes dos? ¿Podría ser que cuanto más fuerte es uno, más se deteriora la memoria? —Preguntó el Maestro de la Medicina.
—Si ese fuera el caso... El Sacerdote Daoista Kun Yi debería haber perdido más recuerdos que yo. Además, mi hija Daoista perdió aún más recuerdos que yo; ¡perdió la memoria de todo un mes! —La Monja Daoista Xuan Xuan sacudió la cabeza mientras decía.
