Capítulo 277
La Gran Coalición (V)
Traducción y edición: Sho Hazama
Corrección: Lord
Corrección: Lord
Inmediatamente enviamos documentos diplomáticos, donde hacíamos públicos nuestros planes.
“Nuestro objetivo es lidiar con el Señor Demonio Agares que se mantiene firme en el lado oeste del Imperio Franco.
No tenemos intención de invadir el Imperio Franco, pero les pedimos que nos presten sus carreteras... Regente de Habsburgo, Barbatos.”
Esto fue similar a cuando Toyotomi Hideyoshi pidió a Corea que les abriera el camino para poder atacar a la dinastía Ming. Pedirles que nos prestaran sus caminos era una cosa, pero, en esta época, las zonas que atravesaban los ejércitos solían ser devastadas por el saqueo de las tropas. No había gobernante que se cruzara de brazos y permitiera que su pueblo fuera asolado.
Laura ladeó la cabeza cuando le expliqué eso.
- Pero, Señor. ¿No hay gobernantes como el emperador Enrique del Imperio Franco?
- Uh, mm... Es un lunático que recibió ayuda de una potencia extranjera para golpear a su propia madre. Es una excepción.
‘A veces hay excepciones. A veces.’
Laura y yo estábamos bebiendo té en nuestra tienda. El ejército del Señor Demonio comenzó a prepararse para la guerra una vez que mi estrategia fue aceptada. Creando uniformes blancos para que nuestros soldados demonio encajaran con los soldados humanos, había un montón de tareas como esta que parecían triviales pero eran increíblemente cruciales. Declaré que iba a centrarme en asuntos diplomáticos como excusa para descansar. Laura y yo disfrutábamos de un té mientras los demás estaban ocupados.
- Como nota al margen, esta es también la última oportunidad de llegar a un acuerdo. Henrietta podría abrirnos un camino. Está bien si ella no se sale de su camino para luchar contra nosotros con el fin de proteger Agares.
En este caso, su tierra será destruida un poco, pero no se convertiría en una guerra. Henrietta puede ser una gobernante bastante beligerante, pero esto era algo que al menos debería considerar.
- Sin embargo, esto le causaría una enorme carga política.
- ¿Una carga política?
- Actualmente, el Imperio Franco está básicamente bajo el control total de la Reina Henrietta. La razón por la que los nobles del Imperio Franco están soportando esta atrocidad es simplemente por lo poderoso que es el ejército de la Reina Henrietta.
Pequeñas y grandes revueltas han estado ocurriendo cada año en el Imperio Franco. Algunas de ellas fueron lideradas por nobles mientras que otras fueron lideradas por plebeyos que habían sido infectados por la idea del republicanismo. Cada vez que esto ocurría, Henrietta masacraba por completo a los soldados rebeldes.
- Si Henrietta acepta nuestra petición, entonces el pueblo del Imperio Franco se enfurecerá sin duda. ¿Cómo puede alguien que no dudó en matar a otros humanos retroceder tímidamente cuando los demonios se acercan? ¿Qué clase de persona es...?
Bebí mi té. El líquido caliente acariciaba suavemente el interior de mi estómago. No sé cómo la gente pensaba que el té sabía bien, pero a mí me gustaba cuando me calentaba por dentro. Puede que sea un hombre de ciudad, pero no debería pasar nada si mi té está caliente.
- Esto aumentaría enormemente las posibilidades de que se produjera una revuelta a gran escala. Naturalmente sería una molestia para Henrietta.
- Es usted tan desvergonzado, Señor. No es una posibilidad. Su Señoría se involucrará y comenzará la revuelta por sí mismo. De todos modos, esto se ajusta más a su personalidad.
- Oh, ¿me han descubierto? Tienes razón. En realidad, no me importa lo que Henrietta decida hacer. Su decisión sólo determinará cuánto tiempo tomará.
Quiero aplastar a Henrietta aprovechando esta oportunidad. Si dejamos las cosas así, lo más probable es que se apodere por completo del Imperio Franco. El Reino de Bretaña y el Imperio Franco se unirán bajo un solo gobernante poderoso. Nada bueno vendría para mí de la creación de una nación masiva y poderosa.
Laura chasqueó la lengua.
- Qué mala personalidad. Su Señoría sería más encantador si fuera menos desvergonzado.
La ignoré y continué. Mi credo es ignorar las palabras que no me son favorables.
- Lo más probable es que Henrietta elija la guerra. Ella tiene confianza. Al mismo tiempo, esto también debe parecer una oportunidad de oro. Si es capaz de derrotar al ejército de los Señores Demonio, entonces su posición política aumentaría inmensamente.
Ella se convertiría en la heroína que protegió al Imperio Franco mientras eran consumidos por una amenaza extranjera. No había manera de que Henrietta retrocediera con un banquete tan apetitoso ante ella. La guerra sucederá.
- Pero hay una trampa allí.
- ¿Mm?
- Mira esto.
Puse un documento sobre la mesa. Era el manuscrito de la carta diplomática que habíamos enviado pidiéndoles que nos abrieran un camino. Laura hojeó el documento.
- ¿Esto es una trampa? Parece la típica carta diplomática luchando por una justificación.
Me reí entre dientes.
- Léela con atención.
- ...
Laura volvió a leer el documento. Arrugó las cejas.
- No lo entiendo. Me rindo. Su Señoría debería saber que soy débil cuando se trata de maquinaciones.
- Lee el nombre del remitente en la parte inferior. ‘Regente de Habsburgo, Barbatos’ está escrito allí.
Todas las cartas diplomáticas llevaban el nombre de Barbatos. Ella es conocida como la Señor Demonio más fuerte para los humanos. Era la persona perfecta para representar la voluntad del ejército de los Señores Demonio.
- Henrietta pensará que está rechazando al ejército del Señor Demonio, pero se equivoca. Estaría rechazando una petición del regente del Imperio de Habsburgo.
- ¡Nos da una excusa para hacer participar al títere príncipe heredero!
Prejuicio, como lo llaman. Nadie esperaría que el ejército del Señor Demonio nombrara a un humano como su comandante supremo. Lo más probable es que Henrietta piense que estaba rechazando a una Señor Demonio al rechazar la petición de Barbatos.
- Haremos que Rudolf dé un anuncio en el momento en que Henrietta rechace nuestra petición diplomática. El Imperio Franco ha rechazado la petición de la humanidad de subyugar a un Señor Demonio. ¿Por qué un compañero humano intenta proteger a un Señor Demonio...?
Hasta este punto sería la primera ronda. Daremos un golpe sorpresa a la otra parte utilizando el engaño.
- “Estamos profundamente decepcionados por la postura del Imperio Franco, pero debemos someter a este Señor Demonio. Independientemente de si nos lo permiten o no, yo, Rudolf von Habsburg pisaré el campo de batalla por el bien de la humanidad.” ¿Lo entiendes ahora, Laura?
- No.
Laura negó con la cabeza. Dejé escapar un suspiro.
‘¿Por qué Laura es tan inteligente, pero es una niña cuando se trata de planes y estratagemas? La gente es verdaderamente rara.’
- Significa que no dejaremos espacio para negociaciones. El lado de Henrietta sin duda entrará en pánico y enviará gente afirmando que no sabían que la petición era del Príncipe Heredero de Habsburgo y que, si se trata de un ejército de humanos, permitirían el paso... Harán lo que sea para ganar tiempo.
No hay razón para estar de acuerdo con eso. Henrietta probablemente se sentirá enojada, pero será su error. No podemos darle tiempo para corregir ese error. Debemos avanzar obstinadamente. No importa lo que los enviados traten de decirnos, sólo les gritaremos: “¿Van a unirse a nosotros para subyugar a Agares o no?”
- A partir de este momento será una batalla de provocación. Si avanzamos obstinadamente, entonces Henrietta responderá de la misma manera.
Y ese será el comienzo de la segunda ronda.
- “Muy bien, entonces. Ven si vas a hacerlo. No eres más que un subordinado del ejército de los Señores Demonio. Todas las justificaciones que alegas son mentiras.” Bueno, probablemente así es como responderá. Se convertirá en una batalla bastante caótica.
La persona con la voz más alta ganará en este caso. Es parcialmente cierto que Henrietta pasó por alto el asilo de Agares y también es cierto que Rudolf no es más que un subordinado del ejército del Señor Demonio. ¿Qué lado está más equivocado? Ganará el bando que racionalice y hable más. Si ambos bandos tienen faltas y justificaciones, entonces la verdad no importa. Lo único que importa es qué bando puede instigar más a la gente. Y yo soy un experto en eso.
Continué mientras sorbía mi té.
- Haremos que la República de Batavia anuncie que cooperará con nosotros en el momento en que Henrietta intente tomar represalias.
- ...
- En apariencia, subyugar a un Señor Demonio será su justificación.
Bretaña apoya el derecho divino de los reyes. Por otro lado, Batavia es líder del republicanismo. Las 2 naciones habían luchado durante la guerra civil dentro del Imperio Franco y son hostiles entre sí.
Lo más probable es que Henrietta se sienta como si la hubieran golpeado por la espalda. Desde la repentina participación del Príncipe Heredero Rudolf y el apoyo de Batavia después, el flujo de eventos irá en una dirección completamente impredecible simplemente porque ella inicialmente pensó que sólo se enfrentaba al ejército de los Señores Demonio.
- Pero, ¿Batavia sola sería suficiente?
- Instigaremos a las ciudades libres que se independizaron recientemente. No ayudarán tanto en términos de mano de obra, pero si varias ciudades anuncian su apoyo a nosotros una por una, entonces nuestra influencia política aumentará.
- Ya veo. Tenemos las ciudades libres...
Laura asintió con la cabeza varias veces mientras pensaba profundamente. Lo más probable es que Henrietta afirme que estamos engañando a todo el mundo. Ella hará todo lo posible para que las ciudades libres no se involucren en esto. Sin embargo, ella no sabe que la Alianza de Liberación de Paimon está detrás de todas esas ciudades libres... Con esto, ocuparemos el bando con “la voz más alta.”
- Padre, he regresado de mi recado.
Fue en ese momento cuando Daisy entró en la tienda. Ella sostenía una larga caja mientras vestía un uniforme de sirvienta. Me levanté con alegría.
- Por fin ha llegado. Laura, este es mi regalo para ti.
- ¿Regalo?
- Quería darte esto antes, pero hasta ahora fue terminado. Ahora, ábrelo.
Laura frunció las cejas mientras se acercaba a Daisy.
- Señor, este no es otro conjunto en el que hay un agujero en la zona de las bragas, ¿verdad?
- Dios. ¿Te han engañado toda la vida? Te garantizo con mi conciencia en juego que este no es ese tipo de regalo.
- No hay muchas cosas tan poco fiables como la conciencia de Su Señoría.
Laura recibió la caja de madera, con una cara llena de duda. Colocó la caja en el suelo antes de abrirla. Dentro de la caja había un objeto con forma de vara envuelto en un grueso trozo de tela. Laura cogió el objeto de la caja y lo desplegó.
- ¿Esto es...?
Los ojos verdes de Laura se abrieron de par en par. El regalo era una bandera, una bandera con el símbolo de una hortensia azul dibujada en ella. Era la bandera que representaba a la casa del duque Farnese.
- Laura, ésta es tu bandera. El príncipe Heredero Rudolf asumirá el cargo de comandante supremo de esta expedición, pero ¿quién crees que será el subcomandante?
- Por supuesto, o Su Excelencia Barbatos o Su Excelencia Marbas.
- Incorrecto. Pensamos nombrarte a ti comandante adjunto.
- ¿Yo... seré la subcomandante?
- ¿No estabas escuchando antes? Nos moveremos como el ejército del Príncipe Heredero Rudolf, y no como la Alianza Creciente. Si un Señor Demonio es el comandante adjunto, entonces la gente sospechará si realmente somos un ejército humano. Si un humano como tú toma esa posición, entonces sería beneficioso para nosotros en muchos sentidos. Por supuesto, la gente seguirá sospechando si lo manejamos así. Podrían pensar que tú también eres un títere que hemos presentado sólo de nombre. Aparecerás como una joven sin talento ni logros. La gente del ejército de Bretaña te despreciará sin duda.
Laura estaba aturdida mientras miraba la bandera, y yo le cepillé el cabello.
- Mi objetivo es justamente ese descuido. El Comandante Supremo Rudolf ya es un cadáver. Tú serás realmente la verdadera comandante suprema. Laura, esto es lo máximo que puedo preparar. Puedo ocuparme de todo cuando se trata de la guerra diplomática y la batalla de instigación. Pero cuando llega la parte final, la guerra de verdad, tu poder es crucial.
- No hay forma de que los líderes de la legión... escuchen las órdenes de esta joven.
- Barbatos no tenía ninguna queja. Paimon también confirmó tu talento cuando capturamos la fortaleza. Ambas son personas que apoyan el sistema de méritos. No son tontas ni tan altaneras como para ignorar tus órdenes porque resulta que eres humana. Convenceré a Marbas.
Una fina lágrima recorrió la mejilla de Laura.
- Yo... soy una esclava sexual que fue expulsada de su familia. No tengo derecho a usar esta bandera...
- Yo te daré ese derecho.
Aparté cuidadosamente las lágrimas de Laura con la mano.
‘Mi pequeña comandante. Mi primera y preciosa amante.’
A esta chica que no fue tratada como familia y fue vendida como esclava sexual, amaba y odiaba a la vez a su familia. Sin embargo, ahora ella representaba a esa familia. No sólo era como vengarse de ellos... sino que también era un gran logro.
‘Estás más que calificada para estar orgullosa.’
- La Casa de Farnese ya ha caído. Laura, ahora eres la mismísima Farnese. Muéstraselo al mundo. Muéstrales a quién habían abandonado. Véngate de los humanos que te abandonaron.
- ...
En ese momento, un efecto sonoro sonó en mi oído.
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¿Se ha roto el sello del afecto? Los puntos de afecto que se habían detenido exactamente en 99 finalmente habían llegado a 100. Era la primera vez que capturaba un objetivo por completo y era digno de ser celebrado, pero eso no me importaba. Mis ojos estaban fijos en la cara de Laura. Ella se secaba las lágrimas con el dorso de la mano, pero las lágrimas seguían saliendo. Siguió tratando de secarse las lágrimas antes de que finalmente se diera por vencida y me mirara mientras abrazaba la bandera fuertemente contra su pecho.
- ...Lo haré, Señor.
Laura sonreía radiante con el rostro empapado en lágrimas. Puedo decir con total seguridad que era la sonrisa más bonita que había visto nunca.
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