Capítulo 128
Una Mañana en Roma (IV)
Traducción y edición: Sho Hazama
Corrección: Lord
Corrección: Lord
El veredicto se hizo de acuerdo con lo que Parsi y yo discutimos previamente.
- El hecho de que fueran negligentes cuando las aldeas vecinas mostraban signos de rebelión y el hecho de que actuaran arbitrariamente sin informarme primero son delitos considerables. Sin embargo, sus acciones de encargarse de los traidores rápidamente han dejado claro que todos ustedes no tienen intenciones de conspirar contra mí. Por lo tanto, impondré una prohibición a los 3 jefes de aldea. Además, confiscaré sus bienes.
Confisqué los bienes de los tres jefes de aldea. No acepté el tributo que las aldeas habían preparado. Los aldeanos alabaron mi veredicto por ser tan generoso. Desde la perspectiva de los aldeanos, debe parecer que los jefes de aldea se habían sacrificado por las aldeas. Es casi obvio a dónde irá a parar la mayor parte del tributo que les devuelvo. Sería como enterrar la cabeza en la arena. Gracias a esto, los jefes de las aldeas y yo podremos salvar las apariencias.
Envié un grupo de goblins a las aldeas restantes. 3 días después, los enviados de las aldeas llegaron a mi Castillo de Señor Demonio. Se postraron a la entrada de mi calabozo y suplicaron. Me suplicaron que les perdonara. Probaron “una vida en la que los monstruos no atacan”. Pudieron centrarse exclusivamente en la agricultura sin tener que preocuparse de nada más. Ni siquiera necesitaron tener una milicia. No querían volver a cómo eran las cosas antes, y aún más de una forma tan desesperada y cruel.
- Habrá una tasa de impuestos del 70%.
Incluso si esto es normal en esta época, todavía se considera una fuerte tasa de impuestos. Los ancianos de estas aldeas me agradecerán al principio por perdonarlos, pero las quejas surgirán naturalmente con el tiempo. Naturalmente, empezarán a preguntarse por qué tienen que pagar un impuesto del 70% simplemente por la protección contra los goblins.
Aquí es donde he empleado un recurso. Cuanto más participen en tareas diversas como la conservación del agua, más les bajaré los impuestos.
- Disminuiré sus impuestos cuanto más trabajen por esta región. Hagan lo posible por trabajar por el bien de los que los rodean.
La tasa de impuesto real es del 40% para los civiles que trabajan. Sólo tienen que ofrecer el 40% de sus ganancias. Lo cual era algo tan generoso que los ciudadanos hacían canciones sobre la amabilidad de su señor. Después, seguí impulsando esta tasa de impuestos del 40% para los ciudadanos trabajadores. Bueno, los pueblos que no participaron en la traición no tienen que pagar impuestos. Esto es probablemente apropiado. Además, no puse mis manos en su segunda cosecha de cebada. Normalmente, la agricultura consistía en cultivar y cosechar trigo y luego cebada. Se recogían 2 cosechas al año. Yo sólo aplicaba impuestos a la cosecha de trigo.
- Esto debería bastar para que no se mueran de hambre, ¿no?
Le pregunté a Laura mientras le consultaba sobre esto. Ella era la estimada hija de un duque. Quería confiar en ella ya que supuse que estaría bien informada sobre asuntos relacionados con los impuestos, pero.
- Le pido disculpas, Señor, pero esta joven es una completa ignorante en lo que se refiere a la gestión del territorio.
Ahora que lo pienso, Laura también estaba condenada al ostracismo en su casa. Lo más probable es que fuera excluida de cualquier tipo de clases de educación destinadas a los sucesores. No había forma de que le enseñaran un trabajo avanzado como la gestión de territorios. No era de fiar en absoluto...
- Es decepcionante saber que mi único vasallo de nombre es tan incompetente.
- Ugh... E-Esta dama ayuda cuando se trata de tácticas militares. ¿No es suficiente?
La cara de Laura se puso roja mientras me contestaba.
‘Originalmente se suponía que te convertirías en una figura prominente que alcanzara la posición de canciller en el Reino de Bretaña, ¿sabes? ¿Cómo podría el canciller de una nación ser bien versado en asuntos militares pero absolutamente ignorante cuando se trata de política? Me preocupa el futuro de esa nación. Ah, el Reino de Bretaña cae en la ruina en Dungeon Attack. Esto explica su colapso.’
- Las tácticas militares no son necesarias en este momento. Pasará mucho tiempo antes de que participemos en otra guerra. Esto significa que eres inútil hasta ese futuro muy lejano. Qué súbdita tan útil eres.
- Uuuuuh.
Laura me miró con frustración. Era linda. Me encogí de hombros.
- No se puede evitar. Ahora sólo puedes hacer una cosa, Laura.
- ¿Qué cosa? Señor, por favor, dígamelo. Esta joven hará lo que pueda.
- Mientras la cabeza de Laura sea inútil, lo único que te queda es tu cuerpo.
La expresión de Laura se quedó rápidamente en blanco. Era como la cara de un erudito que acababa de perder su país.
- De ninguna manera.
- Mete el culo por aquí.
- ¡No! ¡Le he dicho claramente que no puedo más, Señor!
Laura se resistió desesperadamente, pero al final acabó convirtiéndose en una sola ronda. Un agradable efecto sonoro sonó en mi oído en ese momento.
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Entre los trabajos de Laura, su trabajo de Esclava Sexual había subido de C a B. Era un trabajo inútil que sólo bajaba tus estadísticas de Política y Encanto. Sin embargo, acabé descubriendo un mérito oculto en ese trabajo. En otros... tu nivel de Esclavo Sexual determinaba tu calidad en lo relacionado con el sexo. Cuanto más alto era tu nivel, ¡mejor se sentía! Efectivamente, la sensación que envolvía mi miembro se hizo más intensa en cuanto su nivel aumentó. Casi parecía como si una baba caliente estuviera haciendo todo lo posible por apretarse a mí alrededor. Ese día lo hicimos durante 6 horas.
- ...
Laura estaba fuera de combate. Estaba desplomada en la esquina de la cama. Sus últimos momentos fueron gloriosos.
- Uf. He derrotado al general enemigo.
- ...
Pronuncié una frase complaciente, pero Laura no respondió. Debió de desmayarse. Yo tenía suficiente resistencia para hacer que una animada chica de 17 años se desmayara. Cogí un cuenco de agua para beber mientras sentía una extraña sensación de conquista. Después de que mi deseo carnal recorriera mi cuerpo y se marchara, sólo quedaba una preocupación realista.
‘¿Cómo debo gestionar mi territorio?’
- Mm.
Aunque sé cómo dibujar el panorama general, no tengo confianza cuando se trata de hacer el trabajo real. Esto no era como el territorio del Margrave Rosenberg. Procedimientos como las tasas de impuestos ya se habían establecido allí a través de cientos de años de tradición. Todo lo que tenía que hacer era firmar los documentos que llegaban. Por otro lado, la situación era diferente para los pueblos de montaña alrededor de mi Castillo de Señor Demonio. Estas aldeas se crearon tras ser expulsadas por la tiranía de sus señores originales y la invasión de monstruos. Una zona donde la autoridad de sus señores no podía llegar y que además sólo tenía goblins por monstruos. Probablemente eran las mejores condiciones geográficas que se podían encontrar.
Y entonces aparecí yo de repente. Tengo que crear sistemas como las tasas de impuestos desde cero. Al igual que la gente dice que el principio determina la mitad de todo, lo que hagamos ahora determinará la imagen que mi territorio dibujará en el futuro. No puedo descuidarme lo más mínimo. En ese momento llegó una salvadora.
Tres semanas después de que prácticamente escapara de la Alianza Creciente, una súcubo de pelo rosa visitó mi Castillo del Señor Demonio. Lapis se inclinó cortésmente mientras hablaba.
- Pido disculpas. El trabajo de logística se había acumulado, así que sólo he podido llegar ahora. A partir de hoy, reanudaré de nuevo mi trabajo como mercader exclusivo del Señor Dantalian. Por favor, cuida de...
- ¡Lapis!
- ¡Señorita Lapis...!
Laura y yo corrimos hacia ella al mismo tiempo. Nos agarramos a los pantalones de Lapis y lloramos. No importaba el momento ni el lugar, Lapis ostentaba su rostro frío e impasible en todo momento. A pesar de que un señor y su vasallo estaban montando una escena llorando uno junto al otro, además, ambos estábamos desnudos, ella se mostraba completamente imperturbable. Enarcó una ceja mientras nos miraba.
- ¿Qué ocurre?
- ¡Mi territorio! ¡Los impuestos! Las leyes. No sé por dónde empezar.
- ¡Su Señoría es un demonio sexual! Se sale con la suya con esta jovencita cientos de veces al día. No puedo soportarlo más. Señorita Lapis, ¡por favor detenga el apetito sexual de Su Señoría!
Lapis dejó escapar un suspiro.
- Por favor, hablen de uno en uno.
Lapis tenía la mayor antigüedad en la gestión del territorio. Ella escuchó primero la idea que yo había planteado para las aldeas. Lapis escuchó con calma lo que tenía que decir antes de asentir.
- Debería ser suficiente. Sin embargo, hay que arreglar algunas partes.
- Ya me lo imaginaba.
Me reí entre dientes.
- En primer lugar, hay un problema con la política de reducción de impuestos. Poder reducir los impuestos mediante el trabajo obligatorio está bien; sin embargo, ¿cómo pretendes determinar cuánto trabajo ha hecho una persona? No puedes elegir a un supervisor diferente cada día y decirle que te informe.
- Ah.
Ella tenía razón. El trabajo obligatorio no es más que trabajo manual. Digamos que vamos a crear un embalse. Decenas de personas vendrían a trabajar. En esta situación, ¿cómo podría calcular con precisión la cantidad total que una persona ha contribuido a la construcción? Sería sólo una suposición.
- Dejarlo en manos de los jefes de aldea... está fuera de lugar.
- Eso es correcto. Estarías dividiendo tu autoridad.
Si dejo esta tarea a los jefes de aldea, entonces su autoridad aumentaría inmensamente. Los aldeanos tratarían desesperadamente de complacer a los jefes de las aldeas. Todos podrían hacer el mismo trabajo, pero los que estuvieran más cerca de los jefes de aldea tendrían más trabajo. En última instancia, recibirían una mayor reducción de impuestos que los demás. ¿Qué haría la gente que recibe la reducción de impuestos? Darían aproximadamente la mitad de lo reducido a los jefes de aldea. Al final, no sólo los jefes de aldea estarían a cargo de todo, sino que también se convertirían en ricos propietarios. Si es así, entonces yo sólo estaría ejerciendo mi habilidad mientras los jefes de aldea monopolizan todas las ganancias.
- ¿Qué debo hacer?
- Hay una solución sencilla y eficaz. Aplicar el tipo de reducción a todo el pueblo y no a cada persona individualmente. Se puede reducir el tipo impositivo en función del esfuerzo de todo el pueblo.
- ¡Aah!
Mis ojos se abrieron solos.
‘Qué solución tan espléndida. En otras palabras, podría ordenarles que construyeran esto y aquello y reducirles los impuestos por completo una vez que hubieran cumplido sus tareas. No habría necesidad de hacer cálculos complicados, entonces.’
- Además, no tendría que preocuparse por los perezosos.
- ¡Los holgazanes serían reprendidos por todos en la aldea ya que todos estarían tratando de ayudarse unos a otros!
- Si una sola persona comete un error, entonces toda su aldea se vería perjudicada. Esto promoverá naturalmente un ambiente de responsabilidad conjunta.
Esto no sólo facilitaría el cálculo, sino que también eliminaría una de las debilidades más arraigadas del trabajo, la pereza. Esto era, literalmente, matar 2 pájaros de 1 tiro. No pude evitar asombrarme.
- Asombroso. ¿Cómo se te ocurrió semejante solución?
- No merezco tales elogios. Esta solución no es tan impresionante.
Lapis respondió tranquilamente. Debía de creer sinceramente que no era tan impresionante. Sin embargo, Lapis se las arregló para evitar numerosas consecuencias perjudiciales con sólo alterar ligeramente la dirección de mi política. Esto no era algo que una persona normal pudiera hacer... Si la intriga que Parsi y yo utilizamos se consideraba política oscura, entonces lo que Lapis había mostrado era verdadera política. Comprobé las estadísticas de Lapis.
- Estado.
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Su estadística Política había superado los 70. Este era un número enorme comparado con los 10 puntos de Laura en Política. Lo más probable es que la habilidad política de Lapis se centre en su trabajo real, mientras que yo me especializo en intrigas y planes.
Aunque 2 personas tengan exactamente los mismos 70 puntos en Política, sus habilidades diferirán dependiendo de su especialización. Por ejemplo, esto es una suposición, pero la mayoría de los puntos de Política de Barbatos probablemente estén destinados a la gestión de facciones. Es una veterana a la hora de lidiar con conflictos entre facciones y mediar en las relaciones. Sin embargo, lo más probable es que sea débil cuando se trata de la gestión del territorio.
‘Me alegro de haber reclutado a Lapis pronto. Mi ojo perspicaz nunca se equivoca.’
Lapis habló cuidadosamente mientras yo estaba en medio de sentirme complacido. Ella estaba actuando inusualmente vacilante.
- Señor Dantalian, lo que le dije definitivamente no fue algo impresionante.
- ¿Hm? No. Es asombroso. Lo hiciste bien. Siento que por fin puedo respirar ahora.
- Entonces, ¿estaría bien pedir una pequeña recompensa?
- ¡Pues claro! ¡Dime lo que quieres! Te concederé lo que sea.
- ¿...cualquier cosa?
Por un instante, los ojos de Lapis brillaron.
