Capítulo 1
La Era de la Agitación (III)
Traducción y edición: Sho Hazama
Corrección: Lord
Corrección: Lord
Frente al túnel, los sonidos caóticos se hicieron gradualmente más fuertes. El olor a podrido de los Cadáveres Vivientes se hizo aún más fuerte. A la vuelta de la esquina había un tren tumbado de lado, bloqueando una gran parte de todo el túnel. El vagón llevaba mucho tiempo oxidado hasta un nivel ridículo, y las puertas estaban abiertas de par en par. Las ventanas estaban completamente destruidas. A través de la ventana del tren, se podían ver 2 Cadáveres Vivientes en el vagón más alejado. Estaban dando vueltas y revolviendo cosas en busca de algo que comer.
Su observó su entorno durante un rato y, sin hacer ruido, empezó a moverse. Recogió unas cuantas planchas de hierro oxidadas y un hilo de hierro antes de retirarse en silencio. Colocó el hilo de hierro alrededor de la parte central del túnel y puso las piezas de hierro en el suelo. A continuación, empezó a darles forma de cono. Después, se dirigió sigilosamente hacia los trenes subterráneos.
¡Ding!
Su golpeó ligeramente la pared del vagón. El sonido no fue fuerte, pero bajo los agudos sentidos de los Cadáveres Vivientes, cualquier sonido inusual era como un trueno para sus oídos. Las 2 creaturas detuvieron inmediatamente su búsqueda de comida y se dieron la vuelta, justo a tiempo para ver cómo una figura desaparecía por la ventanilla del tren. A los ojos de los Cadáveres Vivientes, a los que sólo les quedaban sus instintos más básicos, cualquier cosa que pudiera moverse era una presa deliciosa. Después de que sonaran oleadas de gruñidos, se precipitaron hacia el borde del vagón del tren con una agilidad que no tenía nada que envidiar a la de los sabuesos. La mitad de su cuerpo se coló a la fuerza por la ventanilla del vagón. En cuanto salió por la ventanilla del tren, el cadáver viviente miró impaciente de izquierda a derecha en busca de rastros de su presa.
Sonó un ligero pu. Las planchas de hierro en forma de cono atravesaron desde abajo, abriéndose paso fácilmente a través de sus gargantas. ¡Fue un golpe tan sólido que incluso la mayoría de sus huesos se rompieron con ese golpe! Su se levantó lentamente. No se molestó en intentar sacar el cono de acero del Cadáver Viviente. Continuó hacia el pasadizo.
El otro Cadáver Viviente que estaba siendo obstruido por el tren hacía tiempo que se había impacientado. Aulló y agarró la pierna del Cadáver Viviente que tenía delante, tirando ferozmente de él hacia el interior del tren. El afilado cristal de la ventanilla abrió 7 u 8 profundos cortes, provocando la salida de sangre roja oscura junto con sus órganos internos. El Cadáver enderezó el cuello y aulló ferozmente antes de estallar con fuerza. Sus duros pies, de los que salían largas garras, golpearon el suelo y, como una ráfaga de viento, se precipitó por la esquina del pasadizo.
El Cadáver Viviente, que corría tan deprisa que parecía volar, de repente se elevó en el aire. Dio varias vueltas en el aire antes de caer. En cuanto aterrizó, volvió a aullar dolorosamente. En el suelo había unos cuantos conos de hierro afilados que apuntaban hacia arriba y lo atravesaron por su espalda. Mientras tanto, una gran parte de su pecho fue desgarrado por la seda de hierro que estaba en el aire. Un agudo sonido ka sonó mientras Su lo golpeó con su arma para asegurarse. Pasó junto al Cadáver Viviente que ya se había sumido en una lucha involuntaria, sin prestarle atención. Levantó ligeramente la cabeza y barrió con la mirada por encima de él. Con un ligero salto, se elevó 2 metros en el aire y aterrizó en el techo del tren abandonado.
Un destello frío pasó de repente por el ojo de Su. De repente irrumpió con fuerza y corrió a lo largo del tren con una velocidad del rayo que era mucho más rápida incluso que la de un Cadáver Viviente. Aunque corría a tal velocidad con el cuerpo ligeramente doblado, no parecía hacer el menor ruido. Desde atrás, parecía un hilo de humo negro que desaparecía rápidamente en la distancia.
¡Bang! ¡Bang! 2 cañonazos desgarraron los hasta entonces tranquilos túneles del metro. Dentro del tren subterráneo, las cabezas de los 2 Cadáveres Vivientes fueron atravesadas por las balas. La tremenda fuerza de las balas prácticamente les atravesó el cerebro. ¡Bang bang bang bang! Otros 4 cañonazos sonaron continuamente. Su ya había llegado al final del tren subterráneo. No se detuvo lo más mínimo y saltó directamente del techo del tren. Tras 4 ligeros sonidos, volvió a pisar el suelo. Las balas de la pistola ya estaban recargadas.
Sus pies ejercieron algo más de fuerza, permitiendo que su velocidad aumentara ligeramente. El túnel de 10 metros de largo fue recorrido rápidamente. Parecía haberse transformado en una brisa, rozando a los 4 Cadáveres Vivientes que corrían rápidamente por el túnel. De repente, se detuvo. Su cuerpo giró bruscamente, ¡y soltó 3 disparos! Cayeron 3 Cadáveres Vivientes. El último giró rápidamente y se lanzó hacia él con un rugido. Su miró tranquilamente al Cadáver Viviente sin moverse en absoluto. Después de correr varios metros hacia adelante, se desplomó en el suelo.
Sin darse cuenta cuándo, una daga de acero que no reflejaba ninguna luz estaba agarrada hacia atrás en su mano. Estaba cubierta de pintura negra, y en ese instante, cuando pasó junto a aquellos Cadáveres Vivientes, fue precisamente esta daga la que rebanó las costillas del Cadáver Viviente. Su se dio la vuelta y miró en la dirección de dónde venían los 4 Cadáveres Vivientes. Efectivamente, había otros 2 que aparecieron en el otro extremo. Lo extraño era que estos 2 Cadáveres Vivientes estaban llevando cooperativamente el cadáver de una Rata Viciosa adulta. Por sus pupilas rojo escarlata y sus bocas de las que fluía saliva, Su podía ver que estaban hambrientos. Sin embargo, no comieron la comida que tenían en sus brazos. Esto contrastaba completamente con lo que él sabía de ellos. El principal objetivo de criaturas como los Cadáveres Vivientes era satisfacer su apetito. No sabían nada sobre el autocontrol. Si se les daba suficiente comida, era totalmente probable que comieran hasta reventar. Pero parecía que no se trataba sólo de estos 2 Cadáveres Vivientes; ahora mismo, podía ver que los otros 4 que se habían acercado corriendo también sufrían el tormento del hambre debido a sus vientres arrugados.
‘¿Cadáveres vivientes que no consumían inmediatamente la comida que tenían delante?’
¡Bang bang bang! Su bajó la pistola que aún emitía humo y caminó hacia los 2 Cadáveres Vivientes que ya no volverían a levantarse. Esta vez, uno de sus disparos no dio en el blanco; originalmente había apuntado a la frente, pero dio en el pecho, así que tuvo que añadir un disparo más. La distancia era de más de 10 metros, por lo que la precisión de la pistola modificada era baja. Esta vez, su gran suerte no mostró su efecto, por lo que ese disparo por sí solo no fue suficiente.
Los Cadáveres Vivientes que estaban hechos de carne no eran rival para la potencia de fuego ni para el metal. En un espacio tan reducido, no importaba qué parte fuera alcanzada, se abriría un agujero de 20 centímetros. Con un sonido de kacha, la pistola de Su fue recargada de balas. Sólo entonces se abrió paso entre los Cadáveres Vivientes para inspeccionarlos cuidadosamente. Los Cadáveres Vivientes eran criaturas con niveles increíblemente altos de vitalidad. Aunque la mitad de su cuerpo hubiera volado en pedazos, aún era totalmente posible que saltara y atacara.
Los 2 Cadáveres Vivientes que llevaban a la Rata Viciosa eran mucho más delgados que los otros 4 con los que luchó antes. Además, Su, que había luchado contra muchos Cadáveres Vivientes, tenía la sensación de que estos 2 ya eran mayores. Todavía poseían su movilidad, pero su poder ya estaba empezando a disminuir. Además, lo que hizo que los ojos de Su se estrecharan fue que había claramente más ropa en los primeros 4 que en estos 2. También eran más robustos. Sin embargo, entre el grupo de 4 Cadáveres Vivientes y ellos, no había mucha diferencia.
Ahora todo estaba bastante claro. Los 4 Cadáveres Vivientes que deambulaban antes se encargaban de la caza y la batalla, mientras que los 2 últimos, más viejos, se encargaban de tareas extrañas como el transporte. Se trataba de una clara división del trabajo: los que eran más robustos y luchaban mejor podían recolectar más alimentos, por lo que la ropa que llevaban también era mejor. A los Cadáveres Vivientes más viejos se les asignaban trabajos extraños, y no se les daba suficiente comida. Lo más importante era que estos Cadáveres Vivientes ya no actuaban según su instinto. Estaban empezando a aprender a ser moderados. Esto demostraba que esos Cadáveres Vivientes ya se habían convertido en una raza nueva, es más, había una clara división del trabajo, y evidentemente también había clases sociales. Eran completamente diferentes de los que había matado antes en el tren subterráneo. Su se había encontrado con un pequeño grupo de caza.
- No me gustan las cosas inteligentes.
Su enderezó su cuerpo y comenzó a pensar cuidadosamente las cosas. Estos Cadáveres Vivientes le hicieron recordar involuntariamente a los Lobos Putrefactos de las montañas. En el momento anterior a su muerte, unos ojos llenos de conmoción, confusión, ira y odio se grabaron en el fondo de su corazón. Estaba claro que estos Cadáveres Vivientes ya habían desarrollado una división del trabajo muy diferente de la organización elemental que tenían los Lobos Putrefactos. Definitivamente había un líder que poseía inteligencia. Para Su, esto definitivamente no era algo bueno. En los túneles subterráneos, los Cadáveres Vivientes ya eran monstruos difíciles de tratar. Pero los que habían desarrollado un sistema de organización eran definitivamente varias veces más fuertes y problemáticos.
Independientemente de si se trataba de la era de la agitación o de los viejos tiempos, no había comida gratis. Matar un nido de Cadáveres Vivientes organizados ya era un precio que superaba con creces la recompensa de una medicina genética primaria. Un pequeño grupo de caza ya contaba con 6 Cadáveres Vivientes, por lo que el nido bien podría superar los 30. Matar a tantos Cadáveres Vivientes ya debería ser suficiente para obtener un punto de evolución. Era posible que la Base N11 ya supiera que había Cadáveres Vivientes organizados viviendo en estos túneles, y esa era la razón por la que estaban dispuestos a pagar tal precio para contratarlo. Su recordó la sonrisa sincera de Turner y Tony, y una sombra que no era particularmente grande ni pequeña se deslizó por su corazón. Sin embargo, desechó rápidamente este pensamiento. Después de viajar por tantas zonas habitadas, Su ya había aprendido que no debía tener ningún tipo de expectativas para nada.
Su contempló el oscuro y profundo túnel. Su ojo verde penetró en la oscuridad infinita para buscar rastros de los Cadáveres Vivientes. Actualmente, era ante todo un cazador que necesitaba completar su misión. El resto podría discutirse más tarde. Al final del túnel, la oscuridad era prácticamente total. Incluso la Vista de Destello de Su sólo podía ver a 5 o 6 metros. Moverse bajo este tipo de ambiente era prácticamente un suicidio, por lo que naturalmente no haría tal cosa.
Su soltó una ligera bocanada de aire, y un tenue bulto de niebla se filtró de las vendas. Tiró suavemente de las vendas que cubrían su cara, revelando una nariz recta que casi parecía esculpida. La piel que quedaba al descubierto estaba húmeda y brillaba como el marfil. Dentro del oscuro pasadizo, el olor a podrido de los Cadáveres Vivientes impregnaba el aire. El hedor era especialmente intenso en esta parte del pasadizo, lo que indicaba que era una zona frecuentada por ellos. Si se tratara de una persona normal, simplemente no sería capaz de moverse bajo este espeso olor. Esta era también una de las formas en que los Cadáveres Vivientes marcaban sus territorios.
Comenzó a distinguir el olor al final de su nariz. Cientos de números comenzaron a fluir por la mente de Su como un torrente, y finalmente, se fijó en el olor que pertenecía a los 6 Cadáveres Vivientes que yacían en el suelo.
Su se ajustó la capa y, como un fantasma, se adentró silenciosamente en las profundidades del pasadizo. El olor de los 6 Cadáveres Vivientes era como una guía que lo conducía gradualmente hacia el nido. Por la fuerza del olor, parecía que estos Cadáveres Vivientes llevaban ya dos días de caza. El pasaje era escabroso y desigual. En el interior, había algunos lugares donde se habían colocado latas vacías a propósito. Estas simples trampas no deberían haberle importado en absoluto a Su, sin embargo, sus movimientos comenzaron a ralentizarse.
De repente, Su saltó 2 pasos. Luego, aterrizó y se pegó cerca de una esquina donde el techo y la pared se encontraban. Entonces, como un lagarto, comenzó a arrastrarse silenciosamente hacia el interior. Tras doblar una esquina, Su descendió tan ligero como una pluma. Aterrizó sin hacer ruido en la espalda de un Cadáver Viviente que estaba agachado junto a una esquina. El Cadáver Viviente sostenía una tubería de hierro en sus manos, y sus dos ojos emitían una tenue luz roja. Miraban fijamente al profundo pasadizo. Su extendió la mano y le tocó ligeramente el hombro.
