Capítulo 340
Un Mundo Feliz (III)
Traducción y edición: Sho Hazama
Corrección: Lord
Corrección: Lord
El Emperador asintió desde su trono dorado.
- Soy muy consciente de la lealtad que todos han demostrado en aras de la reconstrucción y preservación del Imperio. Algunos de ustedes han contribuido considerablemente en comparación con otros. Por lo tanto, tengo la intención de otorgar a estos individuos los títulos apropiados.
El movimiento de su cuerpo era natural como el de un humano, pero si mirabas bien, te darías cuenta de la sencillez de su expresión facial. Sin embargo, esto podría ser pasado por alto como él simplemente siendo disciplinado en el manejo de sus expresiones faciales como el Emperador. Rudolf von Habsburg era un ser humano triste. Los alquimistas le aplicaban a diario todo tipo de agentes en el cuerpo para evitar que se le pudrieran las vísceras y la carne. También se aplicaba una fuerte capa de perfume para atenuar el olor.
La gente se queja de que nunca se siente viva, pero me pregunto cómo se compararía Rudolf con ellos. No estaba muerto a pesar de estar muerto. Tener una muerte indigna era mucho peor que tener una vida indigna. No pude evitar reír en voz baja. ¿No era cómico? Llegó a matar a sus parientes y violar a sus hermanas con tal de hacerse con el trono, y al final lo ha conseguido.
- Barbatos.
- Sí, Su Excelencia.
- Le presento la Corona de Bohemia.
Varios de los Señores Demonio jadearon.
Había 4 posiciones gobernantes dentro del Imperio de Habsburgo. Sin embargo, 2 de ellos estaban unidos al Emperador como accesorios, por lo que el Reino de Bohemia y el Reino de Panonia eran los 2 únicos reinos sometidos al Imperio. Esto significaba que el gobernante de Bohemia ocupaba el segundo puesto más alto dentro del Imperio. El Emperador continuó una vez que Barbatos se arrodilló.
- Además, te nombro archiduquesa de Austerlitz y general adjunto permanente del Imperio. No sólo tienes la tarea de manejar los asuntos de estado en mi lugar, sino que también tienes el honor de poder usar el honorable título de “César”. El pueblo se referirá a ti como César Barbatos.
- Me siento honrada.
Barbatos respondió secamente. Recibió la corona y la espada del Emperador. Barbatos se levantó entonces y se dio la vuelta para mirar a la multitud. Una sonrisa casi burlona se dibujó en la comisura de sus labios.
Fue en ese momento cuando los aturdidos e independientes Señores Demonio se dieron cuenta. Se dieron cuenta de que formar parte del Imperio no era más que una justificación. La persona a la que tenían que obedecer no era el emperador marioneta, sino la muchacha que, por primera vez en la historia, se había convertido en la soberana sin precedentes tanto de los demonios como de los humanos.
Barbatos volvió a su posición al lado del Emperador. El Emperador anunció al siguiente individuo.
- Marbas.
- Sí, Su Excelencia.
Marbas, que tenía manchas blancas en el pelo, se inclinó cortésmente. Aunque no había ni una pizca de respeto en su voz, el gesto de su cuerpo era tan elegante que casi parecía que realmente obedecía al Emperador.
- Le concedo a su noble persona la Corona de Panonia.
- Haré todo lo posible para no avergonzar su decisión.
La atmósfera dentro de la sala se volvió más caótica en el momento en que se otorgó otra posición de gobierno. Marbas parecía no inmutarse por esta atmósfera mientras inclinaba aún más la cabeza.
- Siempre trataré al Gobernante de Panonia como a mi padre jurado. En privado, me referiré a ti como mi padrastro, y en público, serás tratado como un anciano de la familia imperial. Tienes derecho a usar el título de “Sebastokrator”.
Cualquiera de los Señores Demonio que conocieran bien los cargos oficiales del mundo humano seguramente se quedaría ahora en estado de shock. Barbatos obtuvo el poder como general del Emperador, mientras que Marbas recibió el título más honorable al ser aceptado como padre del Emperador. En el Imperio, el cargo de César era un nivel inferior al de Sebastokrator.
La Facción de las Llanuras y la Facción Neutral se habían llevado gratamente su parte de derechos.
- El pueblo del Imperio te alabará ahora como Sebastokrator Marbas.
- Me siento honrado.
Marbas se levantó cortésmente. Barbatos se situó a la derecha del Emperador, mientras que Marbas lo hizo a su izquierda. Todos sabían quién iba a ser llamado a continuación.
- Paimon.
- Paimon responde a la llamada del Emperador.
Ella caminó hacia el centro de la sala donde cortésmente levantó los extremos de su elegante falda roja. En comparación con los 2 últimos Señores Demonio, no había defectos en el tono o su comportamiento. Sin embargo, extrañamente parecía como si estuviera aceptando una invitación a un baile de máscaras en lugar de responder a la llamada del Emperador.
- Te concedo el Ducado de Luxemburgo y elevaré Luxemburgo a la categoría de gran ducado. Además, el Palatinado Electoral se incorporará al Gran Ducado de Luxemburgo.
- Me siento honrada. Apoyaré a Su Excelencia arriba mientras protejo al pueblo abajo.
- Mm. Gran Duquesa Paimon, se le dará la tarea de administrar el palacio imperial. Tienes el honorable derecho de usar el título de “Parakoimomenos”.
Los roles fueron dados uno por uno.
Gobernante de Bohemia, General Adjunto del Emperador, Barbatos de la Facción de las Llanuras.
Gobernante de Panonia, Padrastro del Emperador, Marbas de la Facción Neutral.
Gran Duquesa de Luxemburgo, Alto Chambelán del Imperio, Paimon de la facción de la Montaña.
Duque de Moravia, Comandante Naval del Imperio, Gamigin Independiente.
Elector de Sajonia, Zepar de la facción de las Llanuras.
Elector de Maguncia, Sitri de la facción de la Montaña.
Elector de Colonia, Vassago Independiente.
Un total de 7 personas. Mientras el Emperador siga siendo una marioneta, estos individuos son los que realmente tienen el control. A estos individuos también se les dio el derecho de elegir al próximo emperador. En otras palabras, sus títulos como electores. Estos 7 electores tenían el poder de elegir al próximo emperador.
Si nos fijamos en la composición del grupo, entonces la Facción de las Llanuras tiene 2 votos, la Facción de las Montañas tiene 2 votos, la Facción Neutral tiene 1 voto, y los Señores Demonio independientes tienen 2 votos. A primera vista, esto podría parecer bastante equilibrado... pero no fue así. Vassago es como un viejo tacaño que actúa como un lobo solitario, así que puede que forme parte del grupo “independiente”, pero en realidad no representa a ninguno de los grupos. Podría cambiar de bando cuando quisiera.
En otras palabras, los Señores Demonio independientes que no tienen ningún poder real no serían atractivos para Vassago. En todo caso, probablemente se aliaría con la Facción de las Llanuras o con la Facción Neutral. Al contrario de lo que podría pensarse, Vassago es hostil a los Señores Demonio independientes. Por lo tanto... los Señores Demonio que se han agrupado en facciones tienen un total de 6 votos de 7.
Debería estar bien enfatizarlo aquí una vez más. La era ha cambiado.
La era donde el independiente Baal y la independiente Agares manejaban al Ejército de los Señores Demonio se acabó. No importa cómo se mire esto, los individuos que lideraban esta nueva era eran los líderes de las facciones: Barbatos, Marbas y Paimon.
A pesar de ello, el ambiente en la sala era sorprendentemente pacífico. Los Señores Demonio independientes parecían creer que esto seguía siendo justo. Los Señores Demonio sin afiliación se sentían aliviados por la justicia inmediata que podían ver en la superficie.
‘¿Pensaban que estaba bien ya que Gamigin tenía 1 voto? Qué tontos...’
- Haagenti, te ennoblezco como Duque de Knyphausen.
- ...Muchas gracias.
- Alloces, te ennoblezco como Duque de Martinice.
- Me siento honrado.
Uno a uno, los Señores Demonio se acercaron y se arrodillaron ante el Emperador después de ser llamados. Lo más probable es que estos individuos supieran que en realidad no se estaban arrodillando ante el Emperador, sino ante los 3 líderes de las facciones que estaban de pie a su alrededor. Si observabas atentamente, te darías cuenta de algo interesante.
Los Señores Demonio que pertenecían a la Facción de las Llanuras se inclinaban ligeramente ante Barbatos, mientras que los Señores Demonio de la Facción de la Montaña lo hacían ante Paimon. Por otro lado, los Señores Demonio independientes se inclinaban torpemente sin una dirección clara.
Un extraño silencio llenaba la sala cada vez que se llamaba a un Señor Demonio. Todos me miraban furtivamente con cara de confusión. Ignoré sus miradas mientras observaba despreocupadamente la ceremonia. Así era. Aún no me habían llamado.
Docenas de Señores Demonio se habían girado para mirarme en el momento en que el Hermano Zepar fue nombrado elector. El Hermano Zepar era sin duda la mano derecha de Barbatos, pero la persona que más había contribuido a la Facción de las Llanuras en los últimos tiempos... era innegablemente yo. También fui yo quien consiguió que nuestro Imperio fuera reconocido diplomáticamente por las demás naciones del continente. Probablemente no había nadie mejor para ser nombrado elector. A pesar de esto, mi nombre aún no había sido llamado...
A medida que aumentaba el número de Señores Demonio que habían sido llamados y disminuía el número de Señores Demonio restantes, aumentaba el número de personas que me miraban fijamente. Nadie habló para señalar esta extraña situación. Finalmente...
Todos los Señores Demonio fueron ennoblecidos y sólo quedé yo. El Emperador habló desde la cortina de silencio.
- Hay un individuo aquí que no sólo protegió al Imperio, sino que se dedicó a la paz entre humanos y demonios. Deseaba ofrecerle mis mayores elogios y recompensarlo generosamente, pero este individuo se negó modestamente a ser recompensado... Dantalian.
- Sí.
Enderecé la espalda y di un paso al frente. Podía sentir la mirada de todos centrada en mí. Había todo tipo de emociones detrás de estas miradas. Alegría, duda, odio y celos. Todas estas emociones me envolvían como una capa. Lo más probable es que nunca pueda quitarme esta capa.
- Por la presente te nombro Fiscal General del Imperio.
- Dedicaré mi cuerpo y alma por el bien de todos los seres vivos del Imperio.
Así de simple, todo había terminado. Varios de los Señores Demonio empezaron a agitarse debido a la brevedad del intercambio.
Me di la vuelta y lentamente miré alrededor de la sala. Barbatos, Marbas, Paimon, Gamigin, el Hermano Zepar, Sitri y Vassago, después de encontrarme con los ojos de cada uno de ellos, bajé la mirada.
Barbatos es mi aliada. Si se tiene en cuenta el hecho de que su afecto está en 50, se puede decir que la mitad de su voto me pertenece. 0.5.
El afecto de Marbas hacia mí también está casi en 50. Además, tenemos una alianza política, por lo que la mitad de su 1 punto naturalmente también me pertenece. 1.
El afecto de Gamigin está en 50, y su obsesión por mí va más allá de sus puntos de afecto debido a su repugnante posesividad. En cualquier caso, la mitad de su voto me pertenece. 1.5.
El hermano Zepar obedece a Barbatos. Es literalmente su subordinado, así que, como Barbatos, la mitad de su voto también me pertenece. 2.
No hay razón para mencionar siquiera a Sitri. 3.
El afecto de Paimon hacia mí ha superado los 50 y, en verdad, ahora sólo puede hacer lo que yo diga. Esto seguirá siendo así a medida que pase el tiempo. Por lo tanto, todo su voto me pertenece. Ella viene junto con Sitri como un paquete. 4.
4 votos de los 7.
Más de la mitad de los derechos de voto estaban en mis manos. Esta fue la verdadera imagen detrás de la ceremonia de hoy. Una nueva era ha comenzado. Una era que es controlada por 3 Señores Demonio y 3 facciones, pero, bajo la superficie, una era donde todo es controlado por un Señor Demonio que una vez fue el de rango 71. Por mí, Dantalian.
No fui otro que yo quien inició esta era. El Imperio mantendrá su postura de ser una alianza entre demonios y humanos, y, con esta insignia, el Imperio podrá involucrarse en asuntos relacionados con el continente bajo el nombre de demonios o humanos. Estoy seguro de que el Imperio de Habsburgo tendrá un control sobre los acontecimientos futuros de este continente. Yo soy quien controla ese Imperio. Sin embargo, no desde el frente, sino desde la sombra. Me moveré en ellas.
Por lo tanto, como Duque de Custos y Conde Palatino del Imperio, la posición que corresponde al antiguo Señor Demonio de Rango 71 no es el frente ni el medio, sino el final. Siempre he sido el último individuo y siempre seguiré siendo el último individuo.
Me incliné respetuosamente hacia los Señores Demonio. Un aplauso, oí que alguien aplaudía. Probablemente era Barbatos. Los demás Señores Demonio no tardaron en aplaudir también. Sonreí al escuchar los aplausos.
Soy el Imperio.
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