Libro 5 - Capítulo 4
¿Gran Maestro Escultor?
Traducción: Radak, Mr. Pirps
Edición: Radak, Sho Hazama
Corrección: Radak
Edición: Radak, Sho Hazama
Corrección: Radak
Poco después que el Instituto Ernst comenzara el nuevo semestre escolar, Hillman llegó a al Instituto Ernst en busca de Linley.
En frente de la puerta principal del Instituto Ernst, Hillman estaba frunciendo el ceño mientras esperaba. Claramente tenía el estómago lleno de malos pensamientos. El Instituto Ernst estaba bajo una muy estricta administración, y como un forastero sin algún particular poder o estatus, no tenía la calificación necesaria para entrar.
Después de un tiempo, Yale y Reynolds, ambos vestidos en túnicas azul cielo, se detuvieron y caminaron hacia él.
“Usted es el tío de Linley, Hillman, ¿cierto? Me encontré con usted antes.” Yale habló cálidamente.
Hillman había anteriormente visto a los tres hermanos de Linley. Al ver a Yale Reynolds, de inmediato se dirigió hacia ellos y les preguntó, “Hola... Sé que son compañeros de clase de Linley, y quería preguntar, ¿por qué Linley no volvió para celebrar el Año Nuevo? Cada año en el pasado, él volvería a casa.”
“Uh...” Yale y Reynolds intercambiaron miradas.
Que Linley haya tenido el corazón roto no era un evento feliz. No sería bueno que ellos revelaran a los familiares de Linley.
La velocidad de reacción Reynolds fue la más rápida. Sonriendo, dijo, “Tío Hillman, Linley está totalmente concentrado en su entrenamiento, y mucho antes de las examinaciones de fin de año, ya había llegado al rango de magus de sexto rango. Y entonces, una vez más entró a la Cordillera de Bestias Mágicas para entrenar. Hombre, él sí que trabaja duro... Ni siquiera se molestó en regresar para las examinaciones anuales. Ese sujeto Dixie fue evaluado como un magus de sexto rango este año. Algunas personas están diciendo que Dixie ha sobrepasado a Linley.”
“A tercer hermano no le importan esas cosas superficiales. Cierto, tío Hillman, Linley se dirigió a la Cordillera de Bestias Mágicas en diciembre. Deber volver muy pronto. ¿Hay algo importante? Si es así, puede decirnos. Definitivamente le dejaremos saber cuando vuelva.” Yale dijo con mucha cortesía.
Hillman estaba en silencio por un tiempo, entonces agitó su cabeza en negación, una sonrisa yacía en su rostro que no parecía una sonrisa. “No... Nada importante. Fue solo que Linley siempre había vuelto cada año, y así que este año, cuando no lo hizo, la familia se preocupó y quería ver como estaba. Ya que ahora sabemos que Linley ha entrado en la Cordillera de Bestias Mágicas, estamos satisfechos.”
“Tío Hillman, no te preocupes, cuando tercer hermano vuelva, definitivamente le diré que vaya a casa lo más pronto posible así usted no se tendrá que preocupar.” Yale de inmediato dijo.
Hillman negó con la cabeza. “No hay necesidad, no hay prisa para que vuelva. Déjalo concentrarse en su entrenamiento. Cuando tenga tiempo libre, puede volver. Nada grande está pasando en casa de cualquier forma. Gracias, ustedes dos. Me voy ahora.”
Viendo a Hillman partir, Yale y Reynolds sonrieron, luego giraron y se fueron.
De repente...
“¡Joven maestro Yale, joven maestro Reynolds!” Desde lejos, una voz extremadamente amigable sonó.
Yale y Reynolds giraron para ver afuera del Instituto. A lo lejos, pudieron ver un carruaje aparcado protegido por cuatro caballeros armados. Frunciendo el ceño, Yale dijo inquisitivamente, “¿Quién me llama? Oh. Es Austoni.” Yale vio a Austoni mostrando su rostro fuera del carruaje.
Austoni fue el primero en salir del carruaje. Él sonrió humildemente a Yale, y luego respetuosamente se puso de pie a un lado. En este momento, la puerta del carruaje una vez más fue empujada, y un caballero calvo de apariencia muy distinguida con un bastón lentamente caminó hacia ellos.
Yale y Reynolds intercambiaron miradas.
“¿Quién es este vejestorio? Parece distinguido.” Reynolds dijo bajo su respiro.
Yale negó con la cabeza. También bajo su respiro, dijo, “no reconozco a este vejestorio tampoco. Pero basado en las acciones de Austoni, deber ser un importante individuo. Austoni es un administrador de alto nivel en la Galería Proulx que también tiene un gran estatus en sí mismo.”
Acompañado por Austoni, ese anciano de apariencia distinguida, caminó, sonriendo.
“Pequeño Yale, hola.” El anciano sonrió como habló a Yale. “Me encontré con tu padre no hace mucho. Tu padre estaba lleno de alabanzas hacia ti. Jaja, para que el Sr. Dawson tenga tal hijo como tú en el Instituto Ernst es algo de mucho orgullo.”
Yale observó inquisitivamente al anciano.
“¿Dijo que conoce a mi padre? Y, ¿parece cercano a él?”
Austoni dijo desde un lado, “joven maestro Yale, este es el director administrativo de nuestra Galería Proulx. Puedes dirigirte a él como Director Maia.”
“No hay necesidad, solo llámame tío Maia. He sido muy buenos amigos con tu padre por décadas.” El anciano dijo con una sonrisa.
Yale se sintió secretamente sorprendido.
La Galería Proulx era suelo sagrado para las artes. Cada gran ciudad en el continente Yulan tenía una rama de la Galería Proulx. Incluso aquí en Ciudad Fenlai, el valor total de todas las esculturas guardadas en la Galería Proulx local equivaldría a una enorme cantidad.
Y eso no era la mitad de ello.
La cosa más importante era el estatus. Para ser el director de administración del suelo sagrado para las artes significaba que el círculo de este Director Maia viajó en composición de los niveles más altos de personas en todo el continente Yulan, y él podría incluso estar en buenos término con combatientes nivel Santo. ¿Cómo podría alguien menospreciar a alguien así?
Lo que es más, la Galería Proulx tenía una extremadamente formidable fuerza armada, por otra parte, ¿cómo podrían ellos proteger sus valioso tesoros?
“Tío Maia.” Yale dijo humildemente.
El director Maia giró a mirar a Reynolds. “¿Y este es?”
“Este es un buen hermano mío – Reynolds.” Yale de inmediato respondió. Muy elegantemente, Reynolds también dijo, “muy complacido de conocerlo, Director Maia.”
Director Maia asintió ligeramente. De los movimientos de Reynolds, él podía decir que Reynolds había recibido excelente tutelaje desde cuando era joven.
“Tío Maia, ¿por qué ha venido aquí, si puedo preguntar?” Yale preguntó.
A pesar que estaba preguntando, en su corazón, Yale ya sospechaba la respuesta. “80% de que él esté aquí es debido a esa escultura de tercer hermano – Despertar de un Sueño.” La última vez que el Instituto Ernst tuvo un feriado, debido al hecho que había pasado mucho tiempo desde que Linley había enviado alguna escultura a la Galería Proulx, Austoni había venido a ver cuál era la situación.
Pero al llegar al dormitorio de Linley, por casualidad, Austoni había atrapado la vista de esa escultura, la cual ellos habían puesto en el dormitorio.
Como un administrador de alto nivel de la Galería Proulx, los ojos de Austoni eran demasiado afilados. De esa sola mirada, estaba absolutamente seguro que esta escultura de Linley estaba calificada para ser descrita como posicionada en el pináculo de todo el arte de esculpir piedra. Definitivamente estaba calificada para se puesta en algún pedestal como las Diez Grandes Esculturas.
La cosa más importante fue que, esta escultura de Linley era enorme, a la par con esculturas separadas de muchas personas.
Justo como en el arte de pintar, el valor de una escultura estaba relacionado en parte a su tamaño. Tal enorme escultura habría requerido una gran cantidad de esfuerzo. Esta escultura la cual contenía cinco imágenes de personas que ya contenía dentro un alma única y estaba en un nivel totalmente diferente.
Ver esa escultura era lo mismo que ver cinco verdaderas hermosas mujeres.
En todo el continente Yulan, había unos cuantos escultores nivel maestro. Pero esta escultura hecha por Linley ya había sobrepasado el nivel de ‘maestros’; era calificada para ser clasificada entre los trabajos de los más venerados escultores gran maestro en la historia, tal como Proulx, Hope Jensen, y Hoover.
Esos a quienes se les otorgaba el título de maestro eran capaces de producir esculturas de excesivamente alta calidad, con su propia aura distintiva y la habilidad para agitar el alma de los espectadores.
Pero sus trabajos, cuando se comparaban a los trabajos de Proulx, Hope Jensen, y los otros escultores que han recibido el título de ‘Gran Maestro’, era aun ligeramente inferior. A pesar que la distancia era muy pequeña, eso aún determinada una diferencia en estatus.
Esculpir roca tenía una historia de cientos de miles de años, y durante ese periodo de tiempo, la vasta mayoría de esculturas habían sido destruidas por el pasar del tiempo. Solo unas cuantas estatuas especiales hechas de materiales especiales podrían sobrevivir y ser pasadas a la presente generación. Así, de los auto-llamados Diez Grandes Maestros, nueve de ellos vivieron dentro de los pasados cien mil años.
Incluso desde que el Imperio Yulan unificó el continente Yulan, solo habían dos escultores que podían ser puestos en el mismo nivel como esos antiguos grandes maestros: Proulx y Hope Jensen.
Hoover era un Gran Maestro de hace más de cien mil años, y su famosa escultura, el León Melenudo de Ojos Sangrientos, ha sobrevivido todos esos años debido a las propiedades únicas del material del que fue hecha, así asegurando la fama de Hoover mientras duraba.
En los pasados diez mil años, solo había dos escultores Gran Maestro. Ahora, por supuesto, Proulx era en realidad el más formidable escultor en toda la historia, y tres de las Diez Obras Maestras pertenecen a él. No solo los Diez Grandes Maestros habían producido esculturas las cuales se numeraban entre las Diez Obras Maestras.
Por supuesto, esto era solo el juicio de las últimas generaciones. En términos de actual habilidad para esculpir, todos los Diez Grandes Maestros tenían la misma.
Un nuevo Gran Maestro había nacido... ¡Y era un joven de 17 años!
¡Qué asombroso evento era! Y esta era la razón de por qué el director administrativo de la Galería Proulx se había apurado a llegar aquí, todo el camino desde la Galería Proulx localizada en la Alianza Oscura.
“No hay prisa. Vamos a una habitación privada en un hotel y tengamos una buena y tranquila charla.” Director Maia no estaba en un gran apuro.
¿Un Gran Maestro escultor?
¡Qué broma!
A pesar que los ojos de Austoni eran perspicaces, si era o no una escultura capaz de ser heredada a las siguientes generaciones requería extremadamente formidable juicio. El trabajo de un maestro escultor y el de un Gran Maestro recaía en su aura y alma únicas.
Si era o no un trabajo de arte calificado para ser considerado una pieza de arte nivel Gran Maestro era un extremadamente profundo campo de estudio.
.........
Dentro de una habitación de lujo en un hotel.
En frente de los cuatro, había una tetera de té ligero. Riendo, Director Maia dijo, “este niño, Austoni, al ver la escultura de Linley, insistió que estaba a la par con las Diez Obras Maestras. Jaja, ¿no es lo mismo decir que ahora tenemos un Gran Maestro de diecisiete años?”
‘Gran Maestro’ era un título que representaba cierto estatus, representando que alguien estaba en el pico de esta forma de arte.
Pero en una conversación casual, muchas personas se dirigían a alguien como ‘maestro’, por ejemplo, ‘Maestro Proulx’.
“¿Escultor Gran Maestro?” Yale estaba un tanto asombrado. “No sé si la escultura de Linley califica o no. Después de todo, mi experiencia es limitada. Pero estoy absolutamente seguro que esta escultura de Linley es, al menos, comparable con las esculturas que usted muestra en su salón de maestros.”
“¿Oh?” Director Mais rio. “Bien hablado. Después de toda esta cháchara, supongo que es mejor ir a tomar una mirada. No sé donde está esta escultura. ¿Puedo darle una mirada?”
“Por supuesto.” Yale sonrió.
“Pequeño Yale, incluso si esta escultura no está al nivel de las Diez Obras Maestras, apuesto a que no está demasiado lejos. Tienes que protegerla y asegurarte que no la roben.” Director Maia le recordó.
Yale dijo con confianza, “tío Maia, por favor no se preocupe. Ahora, he asegurado la escultura en la habitación bajo tierra secreta dentro del Hotel Huadeli, y tengo expertos del Conglomerado Dawson protegiéndola. Lo que es más, hay unas pocas personas que incluso saben de la existencia de esta estatua para comenzar.”
“¿La has movido al hotel?” Austoni estaba un tanto sorprendido. La última vez que la vio, estaba en su dormitorio.
Yale frunció sus labios. “Confío en mis hermanos, pero no confío en ti.”
Austoni solo pudo soltar unas pocas carcajadas raras.
“Tío Maia, vamos. Lo llevaré hasta ahí.” Yale dijo cálidamente.
El Hotel Huadeli era en realidad una propiedad bajo la bandera del Conglomerado Dawson. Esta era la razón de por qué el administrador del Hotel Huadeli conocía el estatus de Yale.
Dentro de un gran salón en el Hotel Huadeli, había muchos asientos como también tres expertos que habían estado montando guardia cada día.
“Joven maestro Yale.” Los tres guerreros del séptimo rango se inclinaron respetuosamente.
Yale asintió y sonrió ligeramente. “Tío Maia, por favor observe para el contento de su corazón.” Como él habló, Yale dio un afilado tirón a la pesada tela que cubría la escultura, revelando el enorme trabajo de arte. Esas cinco hermosas mujeres eran incomparablemente inmaculadas. Una imagen era de un tierno amor, otra de una adorable inocencia, una tercera sonrojada y tímida, la cuarta apasionada e inspiradora, y la última... Mostrando una completa falta de sentimientos.
Todas ellas parecían tan reales como una persona.
Viendo esas cinco formas humanas dentro de la escultura, la boca del director Maia estaba colgada, y él la miró, aturdido, por un largo tiempo.
Después de un largo tiempo...
“Increíble, increíble.” Solo ahora director Maia despertó de su estupor. “Esta escultura está al nivel maestro, al menos. Una escultura la cual conecta cinco diferentes formas humanas, ¿Cómo si fuera totalmente natural? ¿Cuánto esfuerzo costó esto? En términos de solo tallado, al menos debe haber pasado un año en ello”
Director Maia sabía muy bien cuando esfuerzo tomaba esculpir.
Tomaba mucho esfuerzo muchas veces, en el medio de tallar una escultura, un maestro escultor podría de repente vomitar sangre y desmayarse del excesivo esfuerzo. En la historia, habían personas que morían en mitad de su esculpido. Las esculturas tales como esta eran formadas de sangre y esfuerzo.
“Para un joven de diecisiete años ser capaz de producir esta escultura es simplemente... Simplemente...” Director Maia estaba en una pérdida de palabras. Él emocionadamente se acercó a la escultura para una examinación más cercana. “Si es cono una escultura a la par con las Diez Obras Maestras requiere una inspección más profunda desde múltiples ángulos.”
Como él habló, director Maia se pegó al lado de la escultura, comenzando a cuidadosamente inspeccionar cada línea de tallado.